¡Auxilio! ¡Soy la omega de JungKook! (JungKook & tú)

Capítulo 45: Sexto mes

A partir de aquí comienza la historia de mi vida (no me peguen, lloré con la planeación de los siguientes caps)

Hemos decido con JungKook que la raza y sexo de nuestros bebés sea una sorpresa, claro que no han faltado los clásicos trucos para tratar de adivinar, como el truco con el aceite en el vientre, el hilo, la forma de mi barriga. En fin, ninguno 100% seguro.

La especialista nos ha indicado que de momento todo va bien, pero es en especial este mes en que muchos más cuidados debo tener, evitando a toda costa alterarme.

Estoy en nuestro departamento en compañía de Suni, quien ha decidido venir a visitarme y a traer un pequeño e innecesario presente a los revoltosos en mi vientre, quienes al sentir el tacto contra mi piel no dudan en moverse, como si buscaran más de ese tacto.

Suni: Debe ser algo increíble, la maternidad -habló, dejando la taza de té nuevamente en la mesita del centro.

____: Si... Aunque no todo es color de rosa, no lo cambiaría por nada. Además todavía no empieza lo bueno -ambas reímos.- ¿No planeaste alguna vez tener hijos, Suni?

La escuché suspirar, su mirada se entristeció.

Suni: Siempre soñé con tener al menos cinco lobitos corriendo por toda la casa. Pero la Madre Luna tenía otros planes para mí.

La miré extrañada, no muy segura de preguntar. Pero no hizo falta hacerlo, ella siguió hablando.

Suni: Estaba enlazada a mi pareja, una preciosa alfa. Estuvimos juntas alrededor de tres años, pero como dijiste, no todo es color de rosa. Ella una mañana se fue y nunca más volvió, rompió nuestro enlace marcando a su nueva pareja, estaba tan molesta que salí a conducir estando ebria, tuve un accidente y sin saberlo perdí a un bebé que crecía en mi interior. También perdí la oportunidad de algún día poder concebir...

Cuando volvió a mirarme yo ya era un mar de llanto, nunca creí que en mi enérgica y primer amiga extranjera se ocultaba una herida de esa magnitud.

____: Lo si-siento... No debí preguntar... -sequé mis lágrimas que por insistencia seguían saliendo. Ella solo negó y me sonrió.

Suni: No te preocupes. Todos de alguna manera tenemos un pasado duro, algunos más que otros. Pero por muy difícil que se vean las cosas lo importante no es cuántas veces te derriben, sino cuántas veces te piensas dejar tirar.

Me permití sonreír y abrazar a mi amiga, no pudiendo imaginar el dolor por el que llegó a pasar, pero ella siendo prueba viviente de que sin importar cuan difícil sea la prueba, la determinación puede más.

Tras ese emotivo momento regresamos al ambiente de un principio, ella contándome acerca de algunos pequeños consejos para cuando comenzara mi curso como maquillista en la empresa.

Y así trasncurrieron las horas, pasó la mayor parte de su día libre haciéndome compañía e incluso ayudándome a cocinar la cena, le he dado un tuper para que llevara a su casa, pues como mañana debía trabajar temprano debía regresar a descansar.

Suni: No era necesario, pero te lo agradezco.

____: No me lo agradezcas, soy yo la agradecida de pasar tiempo contigo, espero que algún día podamos salir a tomar algo.

Suni: Así será.

Ya la estaba por acompañar a la puerta hasta que el noticiero local resonó con fuerza en el televisor, logrando escuchar perfectamente el nombre de JungKook.

____: Espera Suni, ¿me ayudas a entender lo que dicen? -ella asintió y fuimos hacia la sala, tomé el control remoto y subí el volumen.

A primera instancia aparecían fotos de JungKook en el aeropuerto y en los premios, sonriendo y luciendo tan apuesto como siempre.