Infantil {Adrien Agreste y tu} [FINALIZADA]

#17

Se pensó 2 veces si debía entrar, daba un paso y retrocedía sin saber si debía hacer lo de todas las mañanas.

"Hoy es viernes con un v de voy a irme a la verga como entre a esa habitación." Dijo en su mente, pero le echó valentía y decidió asomar la cabeza.

—Buenos días.—Habló con la voz temblorosa y los colores se le fueron de la cara cuando vio la sorpresa de encontrarse a Adrien y no a Chat Noir, no había que ser tonto para no poder diferenciarlos, simplemente había que fijarse en la forma en la que estaba su semblante y no solo eso, estaba vestido, peinado, duchado sin la necesidad de que ________ lo hubiese despertado.

—Adiós.—Contestó de forma fría y al salir por la puerta la empujó levemente.

"Sigo así y juro que pierdo el trabajo." Volvió a hablarse a sí misma, pero no pudo hacer nada más que suspirar e ir tras el joven.

Toda la mañana transcurrió tan simple como las anteriores con la única diferencia de que en las demás no había un aire tan denso como en ese momento, en especial cuando los dos se sentaron en la limusina, nada de riñas, ni una sola sonrisa por parte de la chica, ni un solo comentario ya que la de cabello oscuro no se atrevía y el rubio seguía cabreado por lo del anterior día, bueno tal vez cabreado del todo ya no, pero no soportaba la idea de que su madre defendiera a la mujer que hacía de su niñera que a la novia de su único hijo.

—¿Estás bien niña?—Preguntó la cocinera apareciendo de la nada en la sala de estar en la que _______ se encontraba limpiando.

—Está bien, todo correcto.—Contestó nerviosa mientras recogía los trapos que había tirado por el impulso repentino.

—¿Té?

—No, gracias.

—¿Galletas?

—Estoy bien.

—Normalmente comes mucho, algo te ocurre o te preocupa.—Gina se sentó en uno de los grandes sofás e invito a la muchacha a hacer lo mismo, la cual está vez no se negó.

—Está claro que me preocupa lo de ayer, la señora Emily y Adrien estuvieron peleando y todo por mi culpa, tenía que haberle hecho caso e irme.

—La señora Emily te defendió porque no te puedes dejar humillar de ninguna persona por mucho dinero que tenga, a ella no le gusta ese tipo de cosas y deberías tomar en cuenta lo que está haciendo por ti, vales mucho y no lo olvides. —Tras eso se marchó y dejó pensando a la joven. Cuando reaccionó siguió limpiando.

Su estabilidad emocional desde que llegó a su casa era como las montañas rusas, reía, lloraba, temía por estar en la calle y tras eso aprendía mucho más de lo que le hubiesen enseñado en la universidad, a la que tanto su padre le decía que fuera. Se sentía como si estuviese descubriendo cosas nuevas y no quería marcharse de ahí hasta saberlas todas, todas y cada una de Adrien o Chat Noir.

Miró el reloj de la sala de estar y había tenido el tiempo justo para terminar de limpiar e ir a recoger al rubio

Llegó a la universidad y las manos comenzaron a sudarle y sintió un nudo en el estómago, de esos que parecen un agujero negro; profundos y sin fin.

—Hola.—Ella saludó cuando el joven entró en el coche.

—No has venido hasta la entrada.

—¿Prefieres que vaya?

—Prefiero que no estés aquí en general.—Justo como una estaca se clavó en el pecho de ______ y él se dio cuenta.—Lo siento, sigo muy dolido.

—Está bien.

—No, no está bien porque no es justo, ¡parece como si mi madre tuviera preferencia por ti que por Marinette!—Cuando el chico se dio cuenta de lo que había dicho trató de recuperar su compostura.—Me refiero, no te conoce de casi nada y...

—Te entiendo si mi madre preferiría defender a una desconocida que a mi propia pareja yo también estaría como tú.—Trató de hablar sin que ese nudo en el estómago subiese a la garganta.—Sé que no te agrado, no quieres que me metas en tu vida privada y lo respeto. Pero quiero este trabajo y me da igual lo que pienses, necesito quedarme, respetaré tu espacio personal, no seguiré tratando de ser tu amiga ni te molestaré aunque tú a cambio tienes que ser amable contigo.

—¿Solo eso?—Cuestionó el de ojos verdes, más calmado.

—Y que dejes de joderme.

—Está bien, somos adultos y lo hemos resuelto como tal, además sino lo hago Chat Noir se enfadará conmigo, que dolor de cabeza.—Lo último lo dijo con un casi suspiro y se recostó sobre el asiento de cuero blanco.

La latina bajó primero del coche y esperó con una sonrisa a que apareciera Chat Noir.

—¡_______!¡_______!¿Sabes quién va a venir?—Dijo entusiasmado el "niño".

—¿Quién?

—¡Axel!¡El primo Axel!

—¿Así? ¿Tiene tu edad o qué?

—En realidad—Agreste no terminó de hablar porque en el pequeño trayecto del jardín a la entrada principal _______ cayó de bruces.

—Joder, piedra de mierda.—Maldijo mientras se sujetaba la pierna, se había roto el pantalón.

—¿Estás bien?—Preguntó otra persona, pero ella no lo vio por estar concentrada en su pierna.

—Sí, sí, gracias.—Contestó cabreada.

—¡Axel!—Fue cuando la joven miró hacia arriba encontrándose con un joven de ojos azules claro, cabello oscuro color carbón, llevaba un camiseta de botones color cielo remangada, unos vaqueros negros y aunque parecía formal a su vez parecía informal.

"Santa madre de la papaya, ¿por qué me la pasó haciendo el ganso frente a chicos guapos?"

—¿Te duele mucho?

"Más me duele el flechazo que me acabas de pegar"

—Sí...digo no, está todo correcto.—"Uff que no se noten los nervios"

—Estoy estudiando medicina déjame revisar si te has hecho daño.

"Ay papito lindo conviértete en mi doctor pero de amor"

—¿Eh? No, no, no estoy bien no es nada.—"Jodidos nervios, pero un momento, ¿por qué? Es el puto reflejo de Adrien pero con diferente color de ojos y cabello."

—¿Tienes fiebre?—Preguntó preocupado Chat Noir.—Tienes la cara roja y caliente.—Dijo mientras le tocaba las mejillas a la chica.

—Está todo bien, todo correcto, entremos es hora de merender, ¿te parece?—El niño enseguida se olvidó del tema y entraron.

"Qué vergüenza..."

FELIZ FIN DE AÑO, NAVIDAD Y REYES.
Después de un montón de tiempo reapareci, se que estáis mazo enfadadas, que no actualicé desde vete tú a saber y lo entiendo.
Pero os digo la verdad entre que me han pasado cosas raras y sin imaginación a sido COLPASO.

Si alguna quiere saber que pasó escribirme por privado y os lo cuentos, jurao no sé si es para reír o llorar.