Last Pure Alpha ©

8. Soluciones drásticas.

- ¿Cómo? -

- Así como lo escuchas. -

- Estoy seguro de que esa Alpha tuvo algo que ver con su muerte. - Hein en su lugar de brazos cruzados negaba.

- No creo que el tío fuera tan tonto, él sabría si ella lo estaba intentando asesinar. -

- Que traigan su cuerpo, quiero que nuestros forenses realicen las pruebas necesarias. -

- ¿Y si encuentran las pruebas? ¿Qué vas a hacer con ella? -

- Reduciré su manada a cenizas, y luego haré que todos ellos me sirvan como castigo. También tomaré ese pequeño territorio. -

- Estas yendo demasiado lejos, no creo que ella... -

- Se hace lo que yo digo y lo que creo necesario, más bien lo mejor para nuestra manada. - Elevó la voz. - Y en estos tiempos actuales, querido primo, o estás con mi manada o en mi contra. -

Enfureció Jerome dando un ultimátum a su primo, porque para él contradecir su palabra era traición, y la razón de tener una mente tan cerrada en una era tan moderna, era que eso es lo que precisamente había protegido a su linaje y manada durante tantos años.

Porque su manada a diferencia de muchas otras era muy antigua, y él haría que eso siguiera así al menos mientras viviera.

●●●

- ¿Y ahora que hacemos? - Ria decía desconcertada en una silla frente al escritorio de su amiga Alpha y protegida.

- No tengo idea. - Negó Annelien con un dolor de cabeza queriendo invadirla, porque no, el testamento de Hanns no decía nada acerca de su fortuna, pero lastimosamente no podría cobrar su herencia por su parte por una ridícula clausula.

- No eres su esposa oficialmente... -

- Pues los papeles dicen lo contrario... - Renegó Annelien.

- Te harán un examén, y a menos que tengas pruebas concretas, porque casi todo el mundo sabía que nunca su matrimonio fue... -

- Habla de una vez Koen, no te vayas por las ramas. -

-  Nunca lo consumaron así que pondrán eso como excusa, y así hacer que no heredes nada. -

- ¿A quién pasaría ese dinero entonces? -

- ¿A quién más? El siguiente heredero va a ser su propia manada? -

- ¿Él puso algo más en el testamento? -

- Aunque según tengo entendido no tenía hijos, había algo sobre dejarle el dinero a sus hijos. -

- ¿Y si te embarazas? - Koen y Annelien vieron sin entender a Ria. - Me refiero a que nadie va a notarlo si buscas a alguien  parecido. - Annelien suspiró sin saber como salir verdaderamente de eso, pero bueno tal vez tenía razón.

- ¿Algún candidato? ¿Quien se parecía a Hanns? -

- Su sobrino menor... - Habló Ria, pero Koen negó de inmediato.

- Aunque sea mucho más fácil embarazarte de él, sabrán que no es su hijo fácilmente. - Annelien lo vio sin entender.

- ¿Porque? -

- No es un Alpha sangre pura. -

- Aunque consiguieramos a un Alpha sangre pura a última hora para que me dejé embarazada... - Suspiró Annelien ni siquiera creyendo lo que decía. - ¿Si sabes que no soy tan fértil como una Omega? -

- Con una inyección de un potente afrodisíaco para Alphas será suficiente para hacerte entrar en celo un corto periodo de tiempo para que quedes en cinta, pero eso debe pasar pronto, porque sino dudarán de que el bebé sea de Hanns. - Annelien suspiró y asintió, seduciría una sola noche a Hein y tendría lo que quería.

- ¿Entonces? ¿Qué esperamos? Hay que traer a Hein de invitado o ir a su manada está misma noche. - Anne se levantó de su escritorio, pero el llamado de Koen la interrumpió.

- Tiene que ser un sangre pura Annelien... -

- Entonces ve tu mismo y pídele a un Sangre pura que te done su esperma yo aquí te espero. - Ria río un poco.

- Vas a tener que ordeñarlo como si fuera una vaca. - Carcajeó haciéndola desencajado el rostro, porque no entendía lo que sus servidores querían decir.

- ¿Cómo? -

- Tienen un nudo, se tienen que aparear, ellos no pueden sólo soltar su semilla como el resto de Lobos. - Aquella conversación le estaba pareciendo más que asquerosa.

- Asco. - Negó ella durante un sólo momento. - Saltemonos esa parte asquerosa. ¿De dónde van a sacar a otro Alpha sangre pura? -

- Uno que tal vez no se parezca a Hanns, pero si que tiene los genes de un sangre pura, un linaje intacto. -

- ¿Ah? ¿Quien es ese? -

- Jerome Ashka. -

- Ni lo sueñes. -

- Es la única alternativa si quieres retener tú puesto y dinero para tu manada también, además de que tendrías el hijo de un fuerte Alpha, estoy seguro que tu descendencia será más fuerte y nuestra manada tendrá un mejor futuro. - Contestó Koen.

Annelien lo pensó mejor, era cierto que un hijo con un sangre pura le aseguraría una mejor descendencia a su especie casi extinta, felinos.

- Supongamos que soportó aparearme con él ¿Qué quieres que haga? ¿Voy y le pido directamente ahora mismo que me de un hijo de gratis? - Murmuró de brazos cruzados con un dolor agudo amenazando su cabeza.

- No, pero podemos hacer esto. - Koen sabía lo que se avecinaba, y a lo que se afrontarían. Así que sacó su pequeño maletín con un par de pastillas aromas e inyecciones.

- ¿Qué es eso? - Koen sonrió.

- Aroma a beta, vamos a pasar la frontera, y vamos a tomar prestado al Alpha un par de días con esto. - Anne observó la clase de droga que pensaba usar en Jerome.

- ¿Seguro que hará efecto? -

- Lo suficiente como para ponerlo a dormir que ni siquiera recuerde nada a los días siguientes. -

- Supongamos que accedo ¿Crees que no tendrá guardias? -

- Tiene el complejo de un sangre pura, cree que no los necesita. -

- No los necesita porque sabe que hará cenizas a sus enemigos si intentan algo... - Murmuró Annelien. - ¿Qué hay de esa tonta Omega "Me creo perfecta"? -

- No son una pareja oficial y según escuché, hace un par de semana dejó que otro Alpha amigo de Hein la anudará. Así que no hará estorbo. - Koen y Ria se vieron entre sí al ver que Annelien se estaba tardando en tomar una decisión y si querían cruzar la frontera pronto debía ser antes que se llegará la noche y la seguridad aumentará.

- ¿Dónde voy a hacer que me dejé en cinta? -

- En el lago que está cerca de su mansión hay un viejo castillo abandonado, será suficiente para que pasemos la noche y tú hagas el trabajo. - Annelien quería reírse de sí misma porque realmente lo estaba pensando.

Volteó a ver a Koen y sus ojos no mentían cuando decía que sí, su madre había visto a Annelien embarazada de un sangre pura y ese tal vez era Jerome, quién aunque no tenía hijos y estaba segura que ni los quería, ni siquiera se daría cuenta que ella había sido.

Porque si, Koen era muy bueno en químicos y pastillas, confiaba en él y en su lealtad a su manada, así que tuvo que asentir.

- Esta bien hagámoslo. - Annelien asintió, sentándose y esperando que Koen le pasará las pastillas que disfrazarían su aroma y no dejaría rastros en la otra manada.

Cuán equivocados estaban todos.