Ardo en Deseo

Capitulo 6 ARDO de DOLOR

Estaba destrozada, mi corazón latía por momentos al pensar en José Ángel, luego creí que se paraba, no dejaba de llorar ¡era insoportable el dolor que llevaba en mi interior! su silencio... no entendía nada, el me amaba, ¿porque se comportaba de esta forma?, si quería echar un polvo y ya esta, no hacia falta tanta parafernalia ni jugar con mis sentimientos, porque me parecía un hombre atractivo, hubiera practicado sexo con él sin pensarlo.

Me ha tomado el pelo... ha jugado conmigo, me ha traicionado, supongo que esto es el karma que todo vuelve por engañar a mi esposo, me lo tenia merecido, lo único que no sentía haber hecho nada malo, pues me enamore de José Ángel y con respecto a Tomas ya no sentía nada, mi destino era sufrir siempre por amor, como si de una maldición se tratará. ¿No iba a ser jamás feliz en el amor? José Ángel era la escapatoria de mi cárcel, la llave hacia la libertad, eso creí, además de que estaba totalmente segura de sus sentimientos, pero me equivoque, aunque no quería admitir en estos momentos que realmente me había tomado el pelo, seguía pensando que él me amaba y tenía alguna extraña razón por la cual no se había puesto en contacto conmigo, quería excusar su comportamiento hacia mí.

 31 de agosto

10:59 Te seguiré queriendo por siempre y para siempre, a pesar de tu silencio. Eso va a quedar en mí eternamente. Y como se que algo tienes dentro, espero algún día que lo saques fuera, y que me lo puedas contar, yo siempre voy a estar aquí. Solo quería que lo supieras. Yo sí creo que esto ha sido verdad, y también creo que tú lo has sentido de verdad, porque eso no se puede actuar. Vi como me mirabas, como sonreías, como estabas conmigo, como temblabas al tocarme, eso no puede ser mentira. Yo sí me lo creo a pesar de tu silencio, y sé que algún día vendrás y me lo aclararas. Aquí estaré, porque sé que si mereces la pena.

 1 de septiembre

23:59 Hola vida mía, ¿cómo tienes tu rodilla? Espero que mejor. Te echo de menos, ¿cuándo nos vamos a ver? Si estuvieras en Murcia, yo semana que viene tengo que ir allí por trabajo y podríamos vernos. Tengo tantas ganas de volver a besarte amor.

2 de septiembre

18:29 Coge el teléfono o responde, creo que lo merezco, si quieres te dejo en paz, dímelo. Pero el silencio y no responder, ¿a ti te gustarías que te lo hiciese? ¿Tienes corazón? ¿Porque me haces esto? ¿Quieres que te odie? ¿Es eso? Pues no soy una persona que sepa odiar, así me hagan daño. Porque mi corazón no sabe lo que es eso.

 4 de septiembre

Al fin me responde con una postal deseándome los buenos días, con unas mariposas, y me recordó a una conversación que tuvimos donde el me dijo que eso era lo que sentía en su interior, como unas mariposillas que le invadían el estomago. Y yo le respondí con otra postal que decía "Si de verdad le importas a alguien, no deberías estar luchando por su atención"

Y entonces se me ocurrió escribir en una hoja de estas perfumadas que llevaba un dibujo de flores muy bonito, con una letra como antigua "El amor se demuestra con hechos no con palabras". ¡Claro yo a estas alturas estaba hasta las narices de su no respuesta! Al mismo tiempo que esta postal me gusto. Pero ya no le escribí nada mas, ni le mande nada más, a lo que él me respondió con una foto de una pareja besándose. Y yo al día siguiente le respondí con otra foto de una pareja en actitud pasional, y él me volvió a contestar con otra postal de amor, y a la mañana siguiente con una postal de amor de buenos días. Y a eso yo le respondí con una foto mía donde ponía "Sonreiré y seré feliz, siempre que me cuides, protejas, defiendas, me ames de verdad. Así todos los días serán Buenos días a ti también.

 Le envíe una foto de mi cuadro que al fin lo había terminado, y él me contesto que le gustaba mucho, y se alegraba por mí. Y también me dijo –te echo de menos.

Yo le respondí –llámame por teléfono. Ahora estoy disponible, puedes llamarme.

—Vale deseo escucharte, Sara.

— ¿Me vas a llamar? Ahora mismo puedo hablar un momento. Y si no ya a partir de las once o mañana.

—Ahora mismo no puedo llamarte Sara.

—Vale pues cuando puedas.

—Sí, te llamaré en cuanto pueda, te lo diré primero.

 No me llamo esa tarde, ni tampoco esa noche, ni tampoco al día siguiente, se limito a darme unos buenos días escuetos, tras enviarle una postal de una pareja haciendo sexo en la ducha y con un comentario que le puse "Nos queda cumplir tu fantasía juntos. Buenos días. Y convertirla en nuestras fantasía".

Yo quise insistir y le dije que si quedábamos para vernos, que lo echaba de menos, y que podía llamarme en ese momento para hablar. Nunca llego esa llamada.

7 septiembre

José Ángel me envía una tarjeta dándome los buenos días con un comentario que ni recuerdo en este momento, a lo que yo le respondí.

—Buenos días, aunque no sé si eres tú, o alguien ha cogido tu teléfono, envíame un audio, si quieres, porque últimamente no haces nada de lo que yo quiero, como llamarme ni coger mis llamadas.

Y entonces se hizo el milagro y me envío un audio, que hizo que se me derritieran las bragas, con esa voz que tiene y con lo que me dijo –Buenos días preciosa, si soy yo, ¿Cómo te encuentras, estas bien? –de fondo se escuchaba como pitidos de mensajes que él estaba recibiendo en ese momento. 

Yo le envíe otro mensaje por audio –¿a qué estás jugando conmigo? No me llamas, no me contestas, no me coges las llamadas...

—Sara no pienses mal... que no es nada malo... te lo contare a la cara.

—¿Cuándo?

—Esta semana iré a Murcia

—Vale José Ángel, perfecto vienes y hablamos y me explicas. Pero llámame o envíame un mensaje. Me dijiste que me ibas a llamar y no lo has hecho, yo creí que eras un hombre que cumplía lo que decías, ahora me dices que vienes a Murcia, pero ¿vendrás y hablaras conmigo?

—Quiero verte en persona, eso quiero.

—Pues hazlo, cumple tu palabra.

—Sara, lo voy a hacer.

—Eso espero para poder creerte.