HEREDEROS II: La princesa del Hielo.

Capítulo 1. Más allá de la muerte.

Una tremenda explosión resonó y por el bosque y golpeó las montañas mientras un resplandor iluminó la oscuridad nocturna...

-----AIKO!!,-----Llamó el zorro saliendo de su aturdimiento y apresurándose al encuentro de la peliblanca a quien la explosión la había lanzado al agua corriente de la cascada.
Tiró de ella con fuerza y la llevó a tierra firme, dejándola recobrar el aliento...

------Mierda!-----Maldijo la joven peliblanca. ------Eso estuvo cerca...

-----Cerca?!?!-----Reprendía el zorro. ------ De lo único que estuviste cerca fue de morir!!!

-----No...créeme...-----Decía Aiko poniéndose de pie. -----Está vez pude mantenerlo más tiempo. Lo pude sentir, tío. En verdad estuve cerca...

------Pero cerca de que, Aiko?!?!? Ni siquiera sabes a dónde tienes que ir exactamente!!

------Mi padre me dijo... Que mi hermano fue derrotado por una espada de hielo que se destruyó junto con el... -----Explicaba la joven jadeante. ------ Estoy segura de que esa espada es la clave para traerlo de vuelta. Solo tengo que encontrarla...

------Y como?!??! Esa espada ya se destruyó!!

------En el presente si, pero en el pasado... Antes de esa batalla...antes de la invasión esa espada existía... Eso es lo que he tratado de hacer todos estos meses, abrir alguna puerta hacia el pasado lo suficientemente lejano para encontrar esa espada...

------Aiko...-----El zorro pelirrojo suspiró pesadamente...------Escúchame...yo... Sé que te prometí que te ayudaría. Y no solo yo, Totosai y tu abuela están contigo en esto, lo sé. Pero... No teníamos idea de lo peligroso que iba a ser para ti! -----Shippo tomó con suavidad el rostro de la hermosa joven y la miró a los ojos...------ Sabemos cuánto extrañas a Yûdai... Todos lo extrañamos. Todos daríamos cualquier cosa para que regresara. Pero...perderte a ti en un intento de traerlo de regreso no lo vale, Aiko... La vida de Yûdai no valía más ni menos que la tuya...

La peliblanca apartó la mano del zorro y la fiereza se reflejó en su rostro...

------ No. Ustedes no saben cuánto lo extraño. Ustedes no tienen idea. No tienen idea de nada!! Nadie la tiene! ------Reclamó. ------La única que estoy segura de que me entiende es Halin... Ella lleva al hijo de mi hermano y ese es un recordatorio permanente de todo lo que pudo ser. Pero todos ustedes... No lo entenderían aunque quisieran. Ni siquiera mis padres. Ellos al igual que tú ahora están más preocupados en no perderme a mí, en lugar de mantener las esperanzas en que puedo traerlo de vuelta!

-------Aiko, llevas más de cuatro meses intentando!!! Y si, es verdad que has estado cerca de.,, de lo que sea, pero has avanzado mucho. Pero incluso Kagome y la misma Halin lo confirmaron: te estás debilitando. Con cada bórtice que abres pierdes más y más energía demoníaca. Por dios!! A veces te quedas como humana por días hasta que llega la luna llena! Sin tu condición Yokai posiblemente puedas seguir abriendo vórtices, pero no sobrevivirás al traslado. Incluso Halin te ha suplicado que pares!!!

------- Tienen que confiar en mí. Voy a estar bien. Sé que puedo hacerlo...

-------No es que no confiemos en ti. Es que vemos claramente el precio tan alto que ésto está cobrando. No queremos perderte a ti también.

------No lo harán...

----Aiko...

------Halin dará a luz cualquier día de las siguientes semanas... Déjenme intentar hasta entonces. Si para cuando el bebé nazca no estoy si quiera un poco más cerca, prometo dejarlo, bien?

Shippo suspiró pesadamente...

------Júralo Aiko. Jura por ese bebé que si para cuando él llegue no has logrado nada, no seguirás con esto.

------Lo juro.

El zorro suspiró de nuevo...

------Bien...------Shippo miró hacia el cielo estrellado, con la gran luna redonda y plateada en el medio...------Ya es hora de irnos. Lo mejor será que tomes un descanso mañana.

------Bien. ------Aiko guardó su daga en su funda y sus kunai en una bolsa de tela. -----Vuelve tú, tío. Me daré un baño antes de irme a casa.

------Está bien, pero dame esas armas. No quiero que sigas intentándolo cuando me vaya.

------Pero que desconfiado! ----Rió la joven Taisho entregándole al pelirrojo sus armas.

------Gracias. -----Sonrió Shippo. ------Te veo luego entonces.

------Si. Descansa, tío.

-----Saluda a tu madre de mi parte. ----Se despidió pasando a perderse en el bosque.

------Gracias. Lo haré.

Así pues, la joven se quedo sola en aquel apacible lugar,
Contempló el agua y la cascada varios minutos de forma pensativa antes de pasar a sacarse la ropa y sambullirse.

Nadó hasta donde la cascada caía y ahí se paró en la superficie, dejando que el agua la cubriera por sobre el pecho.

Lavó entonces su larga y abundante cabellera platinada, su rostro y el resto de su cuerpo.
Miró la gran luna sobre ella y en voz alta pensó:

------Se que ya estoy cerca... Solo falta una cosa...-----Se dejó caer de espaldas, dejándose flotar en el agua completamente inherte...-------Pero qué es??

Repasó en su mente una y otra vez cada día, cada minuto y cada segundo de los últimos meses...
Durante todo ese tiempo había estado utilizando la naturaleza de transportación enérgica inmediata de la técnica SHAZAM para viajar a travez del espacio y ciertamente lo había conseguido bien... El problema era el tiempo. La barrera invisible del tiempo le estaba haciendo la vida de cuadros. No había logrado atravesarla si quiera un poco... Estaba segura de estar cerca de ella y la mejor prueba que tenía era su misma pérdida de energía... Era como si cada vez una parte de ella se quedara en algún sitio, debilitándola más y más cada vez.
La energía que se pierde al recorrer cierta distancia en un lapso razonable de tiempo es recuperable, pero la energía que se pierde con el paso de los años no lo es.
Por eso ella sabía que el límite del tiempo la había estado rozando, pero como toparse con ella y penetrarla?
Su abuela le había brindado su ayuda con la piedra Meidō. Pero esta solo ayudaba a abrir portales dentro de la misma línea de tiempo. Podía abrir puertas al inframundo, pero sobre el mismo presente real.
Hacía falta una pieza en el rompecabezas. La pieza que abriera las puertas de las distintas líneas del tiempo y sus ramificaciones...
Pero cuál era esa pieza?

Sabía perfectamente que aquella misión que ella misma se había impuesto era más peligrosa de lo que en un principio había pensado... Pero haber perdido a Yûdai le había quitado todo miedo así como todo interés por la vida, porque había una parte de ella que no estaba y sinceramente, aprender a vivir sin la mitad de su cuerpo no era una opción...

Cerró los ojos mientras permanecía flotando de espaldas en el agua... Tal vez solo necesitaba relajarse. Despejarse un poco.
Tal vez... La respuesta estaba ante sus ojos...