—Esta ceremonia es diferente.
JiMin miro a YoonGi, al mayor tenía el ceño ligeramente fruncido.
—Es diferente por que está es una ceremonia normal, sólo se siguen algunas costumbres de Brigton—respondió obvio, YoonGi frunció aún mas su ceño luciendo tan lindo que JiMin tuvo que morderse su labio para no besar la bonita nariz de su esposo, no frente a tanta gente.
Estaban en la parte trasera del palacio de Seller, justo a las orrilas del mar, todo estaba arreglado con bonitas y pequeñas flores blancas que bajaban por las altas columnas junto a los vides de color verde brillante que SeokJin había mandado a poner, por su parte Jungkook mantenía grandes esferas de agua flotando por el aire creando bonitos reflejos cuando la luz del sol les daba directamente.
Los invitados aún se estaban acomodando, no había sillas ya que sólo debían rodear a la pareja pues la ceremonia era realmente rápida sólo debían esperar hasta la puesta del sol, Jungkook y TaeHyung ya estaban cerca del mar, lo suficiente como para que el agua mojara sus pies, ambos llevaban trajes ligeros de color blanco que representaba su unión matrimonial, rojo, pues era el color representativo de Eviglod y de la familia Jeon, con decorados en color morado pues era el color de Giftenkker.
Su hermano sonreía y saludaba a los invitados, todos parecían querer acercarse a felicitar al rey, por su parte TaeHyung sonreía y asentía a todos, conversaba con algunas personas y parecía genuinamente interesado en lo que ellos decían. JiMin sonrió, su amigo siempre fue un buen actor, después de todo había aprendido del mejor.
SeokJin no estaba muy lejos de JiMin, sonreía y parecía tener una divertida conversación con la princesa Heena la esposa del príncipe Doyoon, el segundo en la línea de sucesión del reino de Syrum.
—¡YoonGi!
JiMin miró hacía el lugar de donde habían llamado a su esposo y se encontró con el rey Hoseok junto a su esposa. Ambos saludaron forma alegre a YoonGi e hicieron una inclinación ante JiMin. Según los protocolos en la realeza los reyes podían saludar informalmente a sus iguales, salvo al gran rey, que era JungKook, o su familia, que en este caso era JiMin, pues debían respeto ya que en la jerarquía de los reinos Eviglod posee mayor poder adquisitivo y territorial por lo que el resto de los reinos les debían respeto, pues se encontraban por encima de los demás reinos. Aunque se suponía eso no importaba pues se había casado con YoonGi, por ello ahora era rey de Vinterdod, claro que de igual manera el título de príncipe de Eviglod aún era parte de JiMin pues su nombre seguía en el registro real de Rikegisk por lo que su rango era más alto que el de los demás reyes, así que de cierta forma YoonGi era un rango inferior a él pese a que era rey por derecho y JiMin solo un príncipe.
—Hoseok—saludo alegre, YoonGi—. Creo que nos hemos visto más veces en estos meses que en los últimos cinco años.
Hoseok negó divertido. —Con los tratados y bodas que hemos celebrado era lógico que nos reuniremos más de lo acostumbrado.
—¿Por que siempre pareces más feliz de ver a mi esposo?—reclamó Yerin, la esposa del rey Hoseok, llegando junto al castaño—. Soy tu prima y sólo nos hemos visto el día de tu boda en este año.
YoonGi chasqueo la lengua con fastidio. —Viví contigo por muchos años así que tardó más en extrañarte, ya tuve suficiente de ti antes de que te casaras.
Yerin abrió la boca ofendida para después ver a YoonGi con molestia, un ligero borde rojo apareció en el iris de sus ojos, pero era demasiado leve.
JiMin sabía que los poderes de la familia Mim no eran heredados por todos sus miembros, incluso hubo una generación que no presentó el don, sabía que YoonGi lo tenía y que era realmente fuerte, más fuerte que cualquiera en las últimas tres generaciones de su familia, Soobin también poseía el don pero era, por mucho, más débil que el de YoonGi, el joven decía que por suerte lo tenía ya que bien podría haber nacido sin el, justo como su hermana.
ESTÁS LEYENDO
Rey de Cristal *Yoonmin*
FanfictionA un alma pura y un demonio el sol ha unido. La desgracia y la desdicha pavimentan su camino. Dolor y pérdida los marcarán, si no logran el amor encontrar. Ilusiones y promesas rotas los dañarán, y la más brillante joya el hielo perderá. Gotas de...