🎶Vamos a casa🎶

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Nota: Perdón por no actualizar antes... Estuve MUY ocupada ayer😭 Pero trataré de escribir más capítulos hoy.

SASUKE

-¿Vuelves después de un mes y medio, Sasuke?

-Hmp...

Kakashi siguió viéndome con un semblante serio y amenazante. Luego, se recargó en su sillón y lanzó un suspiro cansado.

-No se me da eso de la mirada de hokage... Ya no importa.

-Parecías más un padre celoso.

-Dejé que te llevarás a la kunoichi más fuerte ¿Qué esperabas?

-No te lo pedí, Kakashi.

-Respétame, al menos una vez.-pidió con una risa relajada- Pero no te molestó ¿verdad?

Lo miré y nos enfrentamos en una pelea de voluntades. No iba perder ante el sexto hokage.

-Pareces tener un agradable humor hoy, Sasuke. Dime... ¿pasó algo anoche?

Desvíe la mirada casi al instante. Sin percatarme dejé que el ex ANBU descubriera algo que usaría para torturarme por mucho tiempo.

-Así que pasó algo... El Uchiha es alguien del cual temer, quizás incluso sea un perver--

-Sacas conclusiones con facilidad, Kakashi, ya te lo dije.-interrumpí.

-Y dije que me respetaras, pero algunas cosas no pueden cumplirse ¿verdad, Sasuke?

Entrelazó sus dedos, mientras sonreía detrás de su máscara. Sus ojos se habían achinado por la gran sonrisa, que seguramente, escondía.

-Respecto al clan Fujimoto...-traté de cambiar de tema.

-Ryu Fujimoto está fuera del juego, necesitamos derrotar los otros tres puntos de poder.-analizó el hokage con un semblante serio- Lo pensé y tengo un buen plan.

-¿Por qué tienes seguridad de que funcionará, Kakashi?

-Es un presentimiento.

-Lo supuse... ¿Cuál es tu estrategia?

-Tú y Sakura irán tras Takeshi Fujimoto en el este, mandaré otro grupo al oeste con Yuki Fujimoto. Mandé algunos ANBU custodiar el pueblo que ayudaron; ya no desconfío tanto en ellos, aunque siempre estoy alerta. Cuando ambos equipos derroten a sus respectivos enemigos, irán al norte y finalmente destruirán al líder Kaito Fujimoto.

-Pedí que investigaras la relación entre ese clan y el fracaso del resurgimiento de Akatsuki ¿tienes algún dato relevante, Kakashi?

-Lo descubrí, Sasuke. De hecho, son intereses económicos y cuestión de poder. El clan necesitaba financiamiento y usó la imagen de Akatsuki, además generaba terror y miedo. Fue muy fácil para ellos y no necesitaban ninjas fuertes sino no podrían controlarlos, esa es la razón por la que fue fácil para ti derrotarlos.

-Entiendo.

-Entonces, ya tenemos un plan. Partirán mañana por la tarde, tienes tiempo para prepararte.

-¿Cuál es el otro equipo?

Rio ligeramente y sus hombros se sacudieron en el proceso. Ocultaba algo y tenía una vaga idea de lo que se trataba. Lamentablemente.

-Dime que no es Naruto.

-Es Naruto y su esposa-corrigió infantilmente.

-Necesita quedarse aquí-contradije.

-En realidad no, tiene vacaciones.

-¿Cómo un ninja tiene descanso, hokage?-remarqué la última palabra con algo de brusquedad.

-Solo acéptalo, Sasuke. Quiso ir al instante que se escuchó "Sakura estuvo herida".

-Ella es fuerte. La kunoichi más fuerte ¿verdad, Kakashi?

-Últimamente hablas demasiado, era mejor cuando lo único que decías era "hmp" y "tsk".

Guardé silencio por un largo rato. Era inútil pretender que Kakashi cambiara de opinión y lo que era peor era absolutamente imposible que Naruto se rindiera.

-Me voy.-finalicé yendo a la salida de la oficina.

-¿No quieres hablar de Sakura, Sasuke?

-No te incumbe.

Después de haberme ido, escuché su risa relajada de lejos. Se divertía a mi costa y bufé. El sexto hokage siempre sería extraño.

Recorrí brevemente las calles de Konoha en aquella tarde. Seguramente Sakura estaría en el hospital ayudando provisionalmente a los médicos, conociéndola se estaría llenando de trabajo sin darse cuenta.

Desvié mi camino y mis pasos iban hacia el hospital de la Hoja. La gente me miraba de reojo, tratando de averiguar como tratarme. Como un héroe o un traidor.

Ya no importaba. Mis pecados no podían olvidarse incluso después de años.

-¡Sasuke! ¿Qué haces aquí?

La miré fijamente, quizás preguntándome por que seguía aquí a mi lado.

No era alguien agradable, ni mucho menos expresivo.

Ella era mejor que yo. Era amable con sus pacientes, además amaba con intensidad. Me amaba.

A mí.

-Vamos a casa-susurró con una sonrisa.

-¿Dónde es eso?-pregunté.

Mi hogar era ella, no había otro lugar para mí.

-Es donde estemos los dos, cariño. Para mí cualquier lugar donde estés... Es mi hogar.


Te veré la próxima vezDonde viven las historias. Descúbrelo ahora