Capítulo 9: Apuntando al Siguiente reto.

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¡ROOAAR!

Maldecía estar viviendo esto de nuevo, era horrible percibir tan claramente el dolor y la desesperación de todos, la manera en que corren aunque eso no ayude en lo más mínimo, en el fondo saben que no tienen escapatoria, tal vez eso sea lo más doloroso.

No...

Lo más doloroso, es que eyl no puede hacer nada.

...

Y entonces despertó.

Sudaba como si la vida se le fuera en ello y jadeaba intensamente, sus pulmones apenas se acostumbraban a la idea de que todo estaba bien al igual que su corazón, el cual bombeaba sangre a toda potencia empeorando el asunto, él de verdad se asustó.

"Esta vez... Esta vez fue diferente." Se dijo a si mismo en pensamientos, mirando su mano derecha en un intento por confirmar que dónde estaba ahora en verdad es la realidad y no otra ilusión. Finalmente se convenció y trató de calmarse.

Miro hacia todas partes, aún era bastante temprano, recordando que el día anterior ayudaron a Akashi a entrenar un poco antes de que este retará al Gimnasio, donde al final sí que logró ganar, volvieron al centro Pokémon de Ciudad Hormigón para pasar la noche antes de seguir con su camino, pensando en que tenían muchas cosas que hacer, prefirió dejarlos descansar a sus amigos. Cosa diferente es que el pudiera volver a dormir, eso sí que no pasaría.

Sus Pokémon al parecer se percataron de su estado, ya que Gible que había dormido al lado suyo estaba igualmente despierto y mirándolo de una forma que le hacía saber su preocupación, por otro lado Charmander se removió aún dentro de su Pokéball como si quisiera salir a ver qué pasaba.

Ryū lo comprendió luego de unos segundos, al parecer era cierto que Humanos y Pokémon pueden crear lazos muy rápido, no lo creyó hasta este momento. De alguna manera se sintió feliz por eso.

-Siento haberlos preocupado.-Dijo en voz baja, acariciando un poco a Gible aunque se lastimara, y poniendo su mano libre sobre la Súper Ball de Charmander, haciendo que está dejara de moverse como si hubiese logrado calmarlo-Solo fue una pesadilla.

Gible estaba más tranquilo, pero no del todo convencido.

Aún así, se recostó denuevo a un lado de Ryū y se propuso volver a dormir.

Imitó al pequeño Dragón y volvió a acostarse, aunque era muy claro que se quedaría despierto hasta que saliera el sol, solo quería descansar un poco más y pensar.

"Esto está bien, todo estará bien."

...

Pasaron algunas horas y finalmente todos estaban despiertos y listos.

A Rouse le sorprendió a sobremanera encontrar al albino despierto, creyó que era algo imposible, pero al ver la cara de Ryū, prefirió no decir nada al respecto por el momento, pero si que le generaba curiosidad.

-Muy bien chicos, ¿A donde se supone que vamos ahora?.-Preguntó el pelirrojo acabando con el sepulcral silencio entre ellos.

-¿Saliste de viaje sin saber a dónde dirigirte?.

-Jeje, estaba muy emocionado y no escuché toda la información...

-...-La peliazul miró de reojo al albino y luego al pelirrojo nuevamente.-Ustedes dos son un desastre, parecen niños.

-Y tu una anciana.-Respondió Ryū ya con su usual cara de no importarle nada.

-¡¿Quieres morir?!

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