Sin Límites | Pokémon |

Capítulo 53: La cima antes de tiempo.

—Rayos... Me duele todo...

A un lado de él su madre lloraba.

—¡Pero qué demonios pasa contigo!

—Lo siento, lo siento, ya me disculpé... Varias veces.

El doctor encargado de Ryū entró a la habitación y lo que encontró fue a la madre del chico llorando a mares mientras el trataba de calmarla.

Era gracioso que él fuese el herido pero ella estuviese pasando todo el dolor como si fuese suyo... Cosas de madres al parecer.

—Ehh, perdonen...

—¡UWAAAAH-!

—¡Mamá cálmate de una vez, estoy bien!

—¡Mientes!

—¡No... Bueno si, pero!... Okay ya no tengo argumentos para defenderme, continua.

—Gracias.—Sigue llorando.

—El doctor estaba considerando seriamente dejar la habitación.—Perdonen...

—¡Ah, Doctor, dígame cómo está mi hijo!—Aun llorando de forma totalmente exagerada fue y lo sujetó de su bata para comenzar a sacudirlo insistentemente.—¡¿Estará bien verdad?! ¡¿Le pasa algo malo?! ¡Hableme doctor, hableme!

—Alguien por favor dele un golpe en la cabeza...—Decía Ryū tapándose los oídos.

—¡AAAAAH-!

Minutos después, cuando por fin ambos consiguieron hacer que Mirai se calmara... Bueno, en realidad fue necesario que llegaran al extremo de tener que sedarla para que eso sucediera, pero el asunto es que ahora todos estaban a fuerzas tranquilos.

—Haa, muy bien, muy bien...—El doctor suspiró, viendo que ahora sí podía hablar.—Vine aquí para hacerles un informe de su situación, ayer cuando llegaron no pude decir mucho además de lo que se veía a simple vista pero ahora, a falta de algunos exámenes por realizar ya puedo darles una idea más clara de por lo que estás pasando.

—Adelante.

—Pues bien.

Aún sedada Mirai se preocupó al ver al hombre tomarse un momento para comenzar a hablar, luego de que abriera el expediente que tenía en sus manos.

—El paciente fue registrado con tres costillas rotas, una de ellas llegó a perforar el pulmón, por fortuna no fue demasiado grave pero aún así debe tener mucho cuidado en las siguientes semanas para una recuperación satisfactoria.

Sobra decir que el sedante comenzó a dejar de hacer efecto, o más bien, los nervios de Mirai contrarestaban la cantidad del mismo aplicado.

—Tambien se le detectó una fisura en una de sus vertebras, no sé cómo sucedió, pero seguramente fue por algún golpe muy fuerte.

—...

—Recomiendo que se mantenga en reposo total por una semana o dos, mientras se recupera lo suficiente como para moverse sin problemas.

"Hijole... Yo creo que eso no se va a poder." Y ya estaba mentalmente preparado para ignorar por completo todo lo que diría de ahora en adelante acerca de cuidarse, descansar y todo ese tipo de cosas.

—Y a parte de los hematomas en diferentes lugares de su cuerpo... La herida de cuchillo en su abdomen era considerablemente profunda...

—¡Kh-!

—El albino suspiró al ver a su madre apunto de tener de colapso nervioso.—Ya fue suficiente, no vale la pena que continúe si de todos modos ya lo sé.