11

408 53 15
                                    

Eren terminaba de hacer dormir a su pequeño, lo dejo acotado en la cuna que horas atrás Kuchel había conseguido para que su nieto durmiera comodo.

Eren sin nada más que hacer por esa noche se recostó en la cama cerrando los ojos y durmiendo al instante.

Kuchel terminaba de tomar una tasa de té cuando la puerta de su habitación fue abierta, suspiro al ver a su hijo ahí.

Kuchel: Levi.

Levi: Madre.

Kuchel: Ven aquí.

El azabache entro cerrando la puerta, tomo asiento junto a su madre quien no dudo en darle un golpe en la cabeza.

Levi: No hagas eso.

Kuchel: Lo haré cada que actúes como un idiota.

Levi: Lo siento.

Kuchel: Hijo, hijo mío, lo tenías todo junto a Eren, ¿por qué traicionarlo así?

Levi: Por idiota.

Kuchel vio a su hijo, el azabache se mantenía con la vista en el suelo.

Levi: Aun lo amo.

Kuchel: Pero y si el ya no te ama, el se encargo de contarme que hace meses conoció al padre de su hijo, lo conoció el día que se fue.

Levi: Miente.

Kuchel: ¿Por qué estas tan seguro?

Levi: Lo conozco, el sería incapaz de hacer ese tipo de cosas, el no es...

Kuchel: ¿Como tú?

Levi: Si, el no es una basura como yo.

Kuchel miro a su hijo, Levi solo se dedicó a ver a la nada hasta que su madre hablo de nuevo.

Kuchel: Se que Eren, muy en el fondo aun te ama, dale tiempo, no fuerces las cosas.

Levi: Esta bien.

Kuchel: Ven mañana a la hora de el desayuno, e intenta hablar con el.

Levi: Gracias.

Kuchel: Cual gracias, si no empiezas a hacer las cosas bien te voy a desheredar y dejo de reconocer que eres mi hijo.

No es amor.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora