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" ᶜᵒʳᵃᶻᵒⁿᵉˢ ʳᵒᵗᵒˢ, ʸ ᵐᵘᶜʰᵃˢ ᵈᵉˢⁱˡᵘˢⁱᵒⁿᵉˢ."

Habia pasado una semana desde que Eren cuidra de la hija de Levi, el castaño habia notado que la actitud de la niña habia Alois y el habia cambiado, evitando preguntar dejo pasar las cosas.

No imagino que un pequeño problema se desataría esa misma noche...




Levi regresaba de Londres, habia sido una semana difícil, sobre todo con los constantes chantajes de su aun mujer, habia sido dificil obligarla a firmar el divorció, sobre todo cuando lo amenazó con dañar lo que el más amaba.

Cuando por fin llego al departamento de el castaño, el reloj marcaba las nueve con diez minutos de la noche, con tres golpes suaves llamo a la puerta.

No paso mucho para que alguien abriera, detras de la puerta se encontraba el castaño, Levi sonrio al verlo con el cabello desordenado y la cara llena de harina, seguía teniendo aquel toque juvenil de años atrás, y eso al azabache le encantaba.

Eren: Hola.

Levi: Hola.

Eren: Pasa, Aina esta lista.

Levi: Gracias.

Eren: No agradezcas, ¿todo bien?

Levi: Si.

Eren: ¡Aina tu padre llego!

Un par de pasos se escucho, en la sala aparecieron los pequeños, Aina de inmediato abrazo a su padre, mientras Alois se quedaba justo en su lugar jugando con el borde de su camiseta.

Levi: Es hora de irnos.

Aina: Si.

Levi: Agradece a Eren y Alois.

Aina: No.

Levi: Aina.

Aina: Papá, ¿es verdad lo que escuché?

Levi: ¿Que escuchaste?

Aina: Que Alois es tu hijo.

Levi miro a su hija, su vista viajo inmediatamente hasta Eren y despues a Alois.

El niño lo veía con sorpresa, en cuestion de segundos el pequeño comenzo a llorar.

Eren: Alois, pequeño.

Alois: Papi.

Eren: Ven aquí.

Alois corrio a brazos de su padre, Eren lo tomo de manera que su pequeño rostro quedara oculto, veía de mala manera a la niña.

Aina: Entonces son ellos la razon del porque jamás quisiste a mamá, ¡los odio!

Levi: Basta.

Aina: ¡Los odio!, ¡los odio!, ¡odio a Alois!

Tras esas palabras el llanto de Alois aumentó, Eren molesto no dudo en echarlos de su hogar.

Eren: Fuera.

Levi: Eren espera.

Eren: ¡Fuera!, ¡largate!

Dejando de tras de el a su pequeño Eren comenzo a empujar a Levi fuera de su departamento.

Eren: Más te vale mantenerte alejado de mi hijo, y a tu pequeña malcriada también, creme niña, el odio es muto.

Un azotón de puerta fue lo siguiente, con lagrimas bajando de su rostro Eren corrio para abrazar a su pequeño

Eren: Mirame, cariñito mio, mirame.

Alois: Papi, duele.

Eren: ¿Que te duele?

Alois: Aqui.

El pequeño señalo su pecho, Eren lo abrazo aun mas fuerte, se asusto al escuchar que a su niño le costaba respirar.

Eren: Bebé, respira.

Alois nego con la cabeza, sin importarle nada más que su hijo, el castaño salio de su departamento.

Esa sería la primera vez en años que Alois era llevado de nuevo a un hospital.

Dato nada interesante: Alois tiene un problema, más adelante lo explicaré.

Otro dato es que Alois tiene heterocromia parcial.

No es amor.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora