No es amor.

16

"Al primer o segundo flechazo."

Nota: Este capitulo hace referencia a como se conocieron Eren y Levi.

20 de mayo.

El calor esa mañana era agradable,un joven de castaños cabellos se preparaba para comenzar su día de trabajo en la pequeña y conocida florería de el centro de la ciudad.

Con todo listo para empezar a trabajar armando diversos arreglos florales, la pequeña campana que anunciaba a los clientes se dejo escuchar, el joven con su mejor sonrisa recibió al cliente, el silencio se apoderó de el ambiente,  con un suabe carraspeo el castaño llamo la atencion de el hombre frente a el.

No era una buena mañana, el azabache lo supo al despertar y ver que ese día era el cumpleaños de su madre, no entendía como había podido olvidar algo tan importante, din tener un regalo para ese día decidió buscar un lugar donde conseguir algo lindo que le gustase a su madre, sonrio al ver que como sugerencia aparecía la pequeña floreria cercana a su departamento.

Salió animado y pasando en pedir un enorme arreglo de flores para la mujer de su vida, al llegar al lugar no dudo en entrar, ahí el olor de las flores y sus colores llamaron su atención, al igual que el hermoso ángel que le sonreía detras de el mostrador.

Anonadado miro al joven hasta que este llamo su atención, apenado miro al chico quien seguía sonriendo de manera amable.

- Buen día, ¿en que puedo ayudarle?

- Hola, necesito un arreglo, el más grande y lindo que tengas.

- ¿Alguna flor en específico?

- No soy bueno con las flores, ¿podrías ayudarme a decidir?

- Claro.

El joven salio detras de el mostrador, el azabache siguió con la mirada al joven, era algunos centímetros más bajo que el, delgado pero con piernas lindas, siguió viendo al chico hasta que este se giró a verlo.

- Venga, le mostraré flores y usted me dirá si le gustan o no.

El azabache asintió, siguió al joven, tras venite mimitos eligiendo un sin fin de flores, el castaño se apresuro en armar el arreglo.

- Espero le guste a su novia, cualquiera ama los detalles.

- No es para mi novia, es para mi madre.

- Entonces, estoy seguro que le gustará mucho.

Cuando el castaño ternino su trabajo, hubo otro silencio que se vio interrumpido cuando el teléfono de la floreria sono,  despidiéndose de el castaño, el azabache se encaminó a casa de su madre, la azabache quedo encantada con el regalo, y el azabache de haber conocido a tan hermoso ser.

Un par de semanas despues ambos se habían encontrado de nuevo en un evento de caridad donde el castaño trabajaba como mesero, ese día el azabache no perdió la oportunidad de pedir una cita, cita a la que el castaño accedió.

Despues de todo Cupido había hecho ya de las suyas.