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Se miraban sin decir nada, Taiki tocaba con delicadeza la piel del castaño, mientras que Eren se mantenía trazando líneas en el pecho de el azabache.

Taiki: ¿Estas bien?

Eren: Sí, todo perfecto.

Taiki sonrió, tomo con delicadeza el rostro del castaño dejando un beso en su mejilla, se volvieron a mirar hasta que el castaño suspiro.

Eren: Taiki.

Taiki: ¿Si?

Eren: Me gustas.

Taiki miro con asombro al castaño, sonrió después de repetir mentalmente lo que el castaño le había dicho.

Taiki: También me gustas.

Eren sonrió,  beso al azabache mientras se colocaba sobre el.

Taiki tomo la cintura de el castaño, entre caricias y jadeos terminaron en una nueva ronda más intensa que la anterior.







El sonido del timbre lo hizo abrir los ojos, vio a Taiki completamente dormido, ante la insistencia de alguien tocando su puerta, busco algo con que cubrir su cuerpo y ver quien estaba por tirar su puerta.

Sus ojos se abrieron en sorpresa al ver a Jean y Marco ahí, miro hacia su habitación esperando que Taiki no saliera.

Jean: Eren, venimos por ti.

Marco: Saldremos está noche y pensamos en que tal vez nos querías acompañar.

Eren: No.

La pareja miro al castaño, Eren se veía agitado, Marco entendió lo que pasaba al ver una pequeña marca en el cuello del ojiverde.

Marco: Jean recordé que hoy Eren tenía que hacer unas cosas.

Eren: ¡Si!, aún no terminó.

Jean: Esta bien, entoces nosotros nos vamos.

Jean se despidió de el castaño, Marco lo miro antes de dejar algo en su mano.

Marco: No olvides tomarla, no creo que Alois este preparado para un hermano.

No es amor.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora