Capitulo 11

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Narra Pilar

Renata: Nos perdimos algo?

Renata me observaba curiosa desde la puerta, me incorporé sentándome sobre la cama mientras José se levantaba.
Pilar: No. Apressure a decir. - Todo en orden. A qué se debe la vista de todos a mi habitación?
Sonreí, nerviosa.

Era la segunda situación incómoda en menos de veinticuatro horas a la que tenía que enfrentarme. A diferencia es que ahora podría sentir mis mejillas arder. Renata y Daniel estaban más sorprendidos que cualquier cosa, Santiago y Carolina solo estaban incómodos como yo, y Facundo por otro lado había salido al pasillo en cuando mi miraba había se cruzado con él.

Santiago: Escuchamos risas desde afuera... No... pensamos que.. eh... ya sabes.
Miré a Santiago, necesitaba que se callara.
Pilar: Bueno, tengo que tomar una ducha. Pueden seguir vuestra reunión afuera.
Mire a José indicándole que saliera. Los empuje todos afuera de mi habitación y luego cerré con la llave.

Me apoye en la puerta y suspiré.
José era capaz de alterar todos y cada unos de mis sentidos y estar consciente de eso me hacia querer golpearme la cabeza. Aún podía sentir tus ojos sobre los míos con su rostro tan cercado al mío.
Aún podía sentir sus manos sobre mi abdomen haciéndome cosquillas, había estado riéndome demasiado pero eso no me quitaba de que todos mis sentidos se habían puesto en alerta.

Me lleve las manos en la cara, mis mejillas ardían. Necesitaba una ducha.
Así que tomé toda la valentía del mundo y metí mi cuerpo en un vestido corto y me puse un par de tenis. Salí al pasillo y fue a la habitación de Renata.
A los dos segundos ella me abrió la puerta.
Renata: Estas bien? Me preguntó y asentí
Pilar: Perfecto!
Sonreí entrando en la habitación.
Renata: Hmm más tarde a señora vas a explicarme todo.
Me reí.

Todos estaban sentados en la habitación de Renata charlando, incluso José estaba con ellos. Supuse que la situación ya había pasado a segundo plan así que actúe normal.
Santiago: Estábamos esperándote.
Él me sonrío y yo le sonríe de vuelta.
Pilar: Para hacer lo que?
Carolina: Pensábamos almorzar juntos, que dices? Carolina me miró con sus ojos tiernos, estaba sentada entre Daniel y Facundo.

Pilar: Me parece genial! A donde vamos?

Nos bajamos para ir a comer todos juntos. En la frente del hotel.
Minutos atras había tenido una riña con José que terminó cuando Facundo tomo las llaves de la camioneta sin que yo notara. José aún tenía mi teléfono y se negaba a devolvérmelo así que yo no pensaba en devolver las llaves de la camioneta.

Facundo tenía puesto unas oscuras lentes de sol que no me permitan saber lo que su mirada decía, pero no hablo conmigo desde lo ocorrido con José en mi habitación.
Yo pregunté cualquier cosa y me ignoraste.
Entre en la parte de trás sentándome al lado de Daniel, que me miraba extraño.
Dani: Que pasá con vos, Facundo y José?
Me encogí de hombros

Pilar: Yo no tengo idea.
Dije bajo.
Facundo hizo avanzar la camioneta y yo cerré los ojos, podía escuchar Carolina cantando amablemente su voz dulce y calma. Atras Santiago contando los chistes malos a que José burlaba. Sonreí y luego los observe, Renata sonría a cada palabra que Santiago le decía. Todos parecían divertirse excepto Daniel, me miraba curioso y enojado.
Me reí
Daniel: Todo en orden?
Pilar: Sí, que pasá?

Daniel: Vas a explicarme lo que pasó en tu habitación, ahora, o acaso no soy suficiente mejor amigo?
Rodé los ojos y le di un golpe suave en el brazo.
Pilar: No seas tonto Dani! Murmuré. No debía hablar fuerte, podía sentir la mirada y presencia de José en el asiento de trás. - En sério no pasa nada, no es lo que parece.

Daniel: Entonces que fue?
Pilar: Estábamos bromeando, le dije un par de cosas para molestarlo y él comenzó a hacerme cosquillas. Vamos, Dani, tú y yo hemos estado en esa situación muchas veces y no quiere decir nada.
Suspiré
Daniel: Creo que lo extraño es lo bien que se llevan aún con tan poco tiempo de conocerse.
Pilar: Todos aquí tenemos poco tiempo de conocernos, Daniel, además tú y Rena conoces. El drama con los chicos no es lo mío, y menos con chicos como ellos. Susurre.

Narra Carolina

Después de un par de horas de camino llegamos al que era nuestro lugar favorito con vista al mar. Observe como Daniel cargaba en su espalda a Pilar todo el tiempo, riendo uno al otro. No estaba segura de ella estaba cansada de caminar o era solo un juego. De todas las maneras aparte la vista, Facundo me rodó los ojos.

Facundo: Solo son amigos. Me sussurro al oído y yo eleve los pulgares en su dirección murmurando un" fantástico"

Facundo estaba obsesionado con la idea de que me gustara Daniel. Bajamos muchas gradas hasta llegar al restaurante. Daniel y Facundo se sentaron a mis lados en la mesa redonda en la que habían ubicado.

Daniel: Qué me recomiendas?
Salté sobre mi asiento girando mi rostro hacia el de ojos hermosos, su voz me había sobresaltado.

Carolina: Mmm! Que te gusta?
Le pregunté mientras tomaba un sorbo de agua.
Daniel: Tú! El agua que debía circular por mi garganta de repente estuvo de regresso en mi paladar y comencé a toser, con los ojos abiertos de par en par. Golpeé mi pecho mientras Daniel me preguntaba se estaba bien, yo solo asentía. - Ha sido una broma.
Me sonrío y yo puse mis esfuerzos en sonreír de vuelta.

Tremenda broma!
Carolina: La paella! Le dije como si unos segundos atrás no hubiera sacado el corazón do pecho. - Lleva una excelente combinación de mariscos.
Daniel: Bien. Me sonrío. - Estas segura que estás bien?
Carolina: Por supuesto que sí!

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