Narra Pilar
Purre es un idiota, yo soy una idiota.
Estaba demasiada concretada en mis pensamientos cuando la bocina de un carro me asusto. Eleve la mirada del suelo hacia la camioneta frente a mis ojos.
Lucas bajo para saludarme y abrir la puerta. El llevaba unos shorts café claro y una camiseta blanca. El cabello rubio rizado y despeinado. Tenía toda la imagen de un surfista, y lo era.
Lucas: Tienes hambre? Me preguntó mientras manejada.
Pilar: Sí, no he ni desayunado. Él me miro
Lucas: Como no? Despertarte y no desayuno?
Pilar: La verdad desperté casi ahora..
Una vocecita en el fondo de mi cabeza no dejaba de pensar y hablar de Purre. Pero la otra parte de mi cerebro estaba bastante concentrada en Lucas. Omiti las primeras impresiones que dijeron de él.
Condujo hasta un restaurante que yo no conocía, estaba frente al mar. Mientras comíamos le pregunté de su vida. No sabía nada de él, en eso Purre tenía razón.
Hice mi mayor esfuerzo por sacarlo de mi cabeza. Pasamos el resto de la tarde hablando en la playa, él me contó toda su vida en algunas horas. Lucas era muy inteligente al menos por las cosas que me contaba.
Lucas: Y que hay de ti? Me pregunto mientras estábamos sobre la arena. Sus ojos me observaban.
Pilar: Nada tan interesante. Me reí
Lucas: Vamos, debe haber algo
Pilar: No lo creo, estas vacaciones están siendo lo mejor que me ha pasado.
Después de un rato hablando, Lucas propuso que fuéramos a su casa a ver una película. Acepté. En mi cabeza sonaba la voz de Purre " No lo conoces" Pero que podía salir mal?
Su casa era muy similar a de Santi, me di cuenta de que vivían a una calle de distancia. Cuando llegamos me quede en la sala esperando, el dijo que iría por algo de beber.
Lucas: Limonada, está bien? Él apareció frente a mí con dos vasos con limonada, sonreí.
Él estaba sentado al lado mío, con su rostro más cerca de lo que me hubiera gustado. Yo estaba eligiendo una película en el control.
Lucas puso su mano en mi mejilla y en menos de lo que esperaba tenía me besado. Obligue a mis ojos cerrarse, luego tuve que obligar a moverse mi lengua. Cuando veces había estado en una situación como esa? Ya había besado a muchos chicos, por qué parecía tan desagradable?
Y nuevamente Purre estaba en mi cabeza.
Me separe de Lucas para que pudiéramos respirar un poco.
Pilar: Vaya. Murmure. - Creo que debería volver al hotel.
Lucas: De qué hablas? Él se rio. - No seas aburrida.
Él volvió a besarme, mis manos fueran en sus hombros para intentar apártalo de mi. En cuestión de segundos Lucas tenía unos de sus brazos apretándome con fuerza y el otro recorriendo por mi muslo.
Sentí asco, demasiado asco.
Pilar: SUELTAME! Grité, alejando sus labios de los míos. Lo observe rodar los ojos, inserte mis uñas en sus hombros y doble mi rodilla para golpearlo con ella.
No volví a verlo y salí de su casa lo más rápido que pude, corrí lejos cuando estuve en la calle. Me detuve para pensar, no estaba segura de a dónde deberías ir.
Mi pecho dolía, quería regresar a la casa y golpearlo con una silla el na cabeza. No recordaba la última vez que me había visto tan furiosa.
Un millón de cosas pasaron por mi cabeza y la única estúpida acción que se le ocurrió a mí cuerpo fue llorar.
Narra Facundo
Facundo: Vale, estoy a segundos de llegar! Deja de molestar Carolina! Me reí, había salido de la casa De Santiago unos minutos y me dirigí al hotel. Todos estaban ahí al parecer yo era el encargado de llevar la comida.
Carolina: Tenemos hambre! Colgué el teléfono iban a seguir molestándome todo el camino si no colgara.
Segui manejando hasta que alguien llamó mi atención, una chica en la acerca de la calle, estaba parada tapándose la cara con las manos, yo reconocía ese cabello, y quien era...
Aparque la camioneta del otro lado de la calle y camine hasta ella.
Facundo: Pilar?
Ella levantó el rostro y antes de que pudiera seguir caminando ella acortó la distancia entre ambos y me abrazo.
Facundo: Qué...? La escuche llorar en mí hombro y le devolví el abrazo. - Qué haces acá, Pili? Murmure. No obtuve respuesta de su parte.
Me aparte del abrazo para poder verla. Tenía la cara roja, tomé sus mejillas y sus ojos estaban azules llenos de enojo.
Facundo: Voy a levarte al hotel, está bien? Ella asintió con la cabeza.
No dijo ni una sola palabra no tenía idea de lo que estaba sucediendo pero no podía presionarla para obtener explicaciones.
Llegamos al hotel, camine con ella hasta mi habitación, estaba más tranquila, se sentó al borde de la cama y yo me senté a su lado.
Pilar: En donde están los demás? Me pregunto con un hilo de voz.
Facundo: Creo que en la habitación de Daniel. La miré, tenía la mirada fija en el suelo.
Pilar: Y.... Purre?
Facundo: No lo sé, dijo que saldría con..
Pilar: Su novia.
Eleve una ceja.
Pilar: Bien. No lo quiero regañándome. La vi sonreír. Volvió su rosto para verme. Lleve mi mano a su mejilla para quitar el maquillaje corrido de sus ojos.
Facundo: Vas a decirme qué sucedió?
Pilar: Salí con Lucas. Suspiró
Facundo: Tu y Lucas?
Pilar: Sí, Purre me advirtió que era un patán y yo pensé que...
Facundo: Pensaste?
Pilar: Pensé que Purre estaba siendo un idiota ya sabes, como siempre. Me reí
Facundo: Bueno, Purre sí que es un idiota, a veces. Pero, te aprecia Pilar, no quería que nada malo te pasara
Pilar: Y ahora si me ve, dirá que me lo advirtió y que yo me comporté como una niña.
Pili rodo los ojos y yo volví a reír. Me acerque para darle otro abrazo. No era su culpa actuar como una niña, basicamente todos los éramos. Después de unos minutos decidió a contarme a grandes rasgos lo que había pasado, Purre en serio no debía enterarse, iba a causar un desastre.
Facundo: No va a volver a acercarte, lo prometo. Le dije y ella sonrío.
Pilar: Si lo hace es un hombre muerto. Bufo. La mire y ella estaba con sus ojos llorosos y nariz estaba roja. - Lo siento, me molesta demasiado. Me dijo mientras se pasaba la mano por la cara.
Quería decirle que no tenía por qué disculparse pero entonces la puerta de mi habitación se abrió, Purre y Santiago estaban parados ahí. Observándonos
Purre: Qué estás pasando aquí?
