Narra Facundo
El molesto sonido de una llamada en mi teléfono me hizo despertar, abrí los ojos lentamente para encontrarme con rayos de sol pegando justo a mí rostro.
Tomé el teléfono sin molestarme en ver quien era y conteste.
Facundo: Alô?! Murmure
Mili: Fafa, cariño! La voz alegre y chillona de Mili sonó en mi teléfono, qué hacia Mili llamándome?Facundo: Mili?
Mili: La misma! La escuche reír. - Estoy en el aeropuerto, crees que podrías venir por mí? Te invitaré a comer, venga! Ya sabes que odio los táxi.Aeropuerto? Ir por ella?
Mili: Alô, Facundo! Sigues ahí?
Facundo: Sí, sí! Claro. Dame unos minutos tomaré una ducha y me voyMili: Excelente! Te espero, no se preocupe. Chao.
Me senté sobre la cama tirando las sabanas a un lado. Qué hacia Mili en Ibiza? Trabajo? Purre?
Por qué llamaba a mi y no a él? Le envié una mensaje a Purre y apague la pantalla.
" Sabias que Mili vendría?"
Narra Pilar
El sonido de una puerta abriéndose me hizo despertar, un olor desagradable invadió mi nariz. Abrí lentamente mis ojos para encontrarme en una habitación color crema, las paredes eran de ese color, las cortina y ventanas eran de ese color, las sabanas que me cubrían hasta al pecho eran de ese color. Comencé a sentirme mareada otra vez. La habitación era pequeña, muy pequeña.
Un pequeño grito de susto escapo de mis labios cuando termine de recorrer la habitación con mi mirada y encontré, al lado de mi cama, a Purre observándome desde un asiento.
Pilar: En dónde estamos? Chillé. La Luz del sol entraba a través de la cortina. Era el día siguiente. Qué había pasado la noche anterior? Por qué tenía tanto calor? Quite las sabanas encima de mí, llevaba lo mismo vestido de la noche anterior y no tenía idea donde estaba mis zapatos.
Purre: Buenos días para tí también. Purre tenía en su mano un vaso con café del que estaba tomando, mientras veía malhumorado. - Como te sientes? Dejó el café a un lado para sentarse conmigo en la misma cama. Retrocedí instintivamente. Él frunció el ceño. - Salve tu vida ayer por la noche, deberías estar besándome no teniéndome miedo, Pilar.
Pilar: Mmm.. Lo mire. Tenía muy poco de conocerlo y de repente aparecía en una habitación en un lugar que no era nada cerca de casa? Qué él esperaba? - Qué pasó ayer en la noche? Me siento un poco mal.
Confesé. Tenía un pequeño dolor de cabeza y sentía demasiado calor.Purre: Aún no es hora de tu medicina! Él observo tu reloj en la mano. - Primero tienes que desayunar algo.
Pilar: Qué horas son? Pregunte sintiéndome aturdida, no sabía a qué se refería con medicina
Purre: Casi mediodía. Ayer te desmayaste, por qué no me dijiste que estaba enferma?
Me lleve la mano a la cabeza, tenía sudor. Odiaba sudor. Necesitaba salir de ese lugar y tomar una ducha en mi habitación del hotel.
Pilar: Por qué no lo estoy
Intente levantarme de cama con cuidado.
Purre: Qué haces? Purre estaba a mi lado en cuestión de segundos, me había tomado por la cintura intentando que no me cayera.Pilar: Quiero irme de aquí. No entiendo nada.
Purre: Pilar has tenido fiebre toda la noche no voy a te dejar ir así.
Su voz sonó duraPilar: Suéltame! Chille intentando salirme de sus brazos.
Purre: No me jodas Pilar! Él me miro a los ojos. Podía ver el cansancio en su rostro, tenía ojeras debajo de los ojos y se miraba pálido.Pilar: Dije que me sueltes! Por qué no me llevaste de vuelta al hotel?
Sabía que no debía enfadarme con él, se había preocupado por mí, incluso me había comprado algo de medicina. Pero, nada de eso hubiera pasado sí me hubiera dejado en paz la noche anterior, estaba harta del drama con él ya.
Me dolía el cuerpo, el lugar apestada, quería irme.
Él no respondió, así que deshice de sus brazos a mi alrededor y camine por la habitación.
Purre: Tú teléfono y zapatos están en la gaveta. Asentí con la cabeza y tome mis cosas, no tenia carga en mi teléfono.
Pilar: Y tú teléfono?
Purre: Cargando, compre un cargador pero lo olvide, recién lo conecte.
Pilar: Fantástico. Murmure. - Me voy.Camine hacia la puerta con mis zapatos en la mano, no tenía idea de que iba a hacer pero quería irme ahora de ahí. Sí él fuera honesto conmigo y dejarse de hacerse el coqueto o interesante a cada situación posible, nunca hubiéramos acabado en ese lugar. En realidad aún no sabía cómo me había llevado de ahí y tampoco quería saberlo. Me sentía estúpida y irresponsable.
Purre: Que mierda te pasa? Escuche la voz de Purre detrás de mí mientras abría la puerta.
Pilar: Que mierda te pasa a tí? Actúas como si me conociera toda la vida! Y resulta que no sé nada de ti. Me gire para verlo, el estaba tremendamente cerca de mi. - Y no me hagas hablar de cómo me miras y sonríes cuando tú... tú! Mierda, Purre! Tú tienes una relación, maldita sea!
Purre: Qué tiene a ver con eso? Vi como su expresión cambiada. Él tenía razón. Qué rayos había dicho?
Entonces Purre retrocedió unos pasos y comenzó a reírse. Pero tú risa es amarga, no había ni una pisca de gracia en ella.
Purre: No me digas, Pilar! Tú misma he dicho, yo coqueto con todas las chicas. No me interesas, Pilar. Purre escupía cada una de sus palabras. - Eres igual a mí, cuánto ego no? Solo quería cuidarte estaba enferma, en la próxima vez dejaré que se cuide sola. Por favor. Te vaya, solo estaba sendo amable, no veía tratarme así.
Mi corazón dio un vuelco. Él siguió hablando pero no quería escuchar nada más. Me di la vuelta y salí al pasillo. Mi corazón volvió a estrujarse en cuando vi Renata y Santiago parados afuera de la habitación.
Excelente, lo que me faltaba.
Los ignore y seguí caminando, me dolía el pecho. Era esa la sensación que mamá me dijo que sentiría alguna vez por tener a autoestima tan alta?
Bueno, si era eso, era una pura basura.
Se sentia como un golpe bajo.Sentía mis ojos escocerse, nadie nunca me había humillado así. Cuál era su problema conmigo?
Baje las gradas intentando ser rápida, sentíaque en cualquier momento me desmayaría otra vez. Escuche pasos detrás de mí, pero seguí bajando, necesitaba estar lo más lejos posible.