Capitulo 28 ❦ Baño en las montañas ❦

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Mi cuerpo húmedo y no producto del agua, en este lugar y en este momento puedo dejar escapar mi voz a gusto, los gemelos pueden hacer con mi cuerpo un estrago y nadie nos va a interrumpir.

Los besos eran tan compartidos que llegaba a parecer una ilusión, por un segundo mi boca estaba ocupada con Ethan y al siguiente con Evan, nuestros labios no se separaban por más de un segundo y solo para besar al otro, mi cuerpo se calentaba pero no por el agua caliente, sino que por sus caricias.

Evan e Ethan estaban uno a cada lado de mi cuerpo, cada uno jugando a su ritmo, besaban cada parte, si yo fuera un lienzo ahora no habría ningún lugar en blanco.

Sus manos recorriendo cada centímetro de mi cuerpo, suspiro tras suspiro de placer y excitación.

- Vamos al agua preciosa Elizabeth - tome la mano de Ethan y junto con Evan nos metimos a la gran tina tipo jacuzzi con el agua hasta los bordes

Se sintió delicioso, el agua estaba caliente y con los gemelos en el mismo lugar todo iba a estar todavía más caliente.

Cuando me senté Ethan se puso detrás de mi, en mi espalda mientras que Evan enfrente.

- Soy un sándwich de Roberts - dije en broma con una sonrisa

- ¿Que sería yo? El pan...¿O el queso? - dijo Evan riéndose

- Me tostarias...o me derretirias...¿Cuál sería? - me rei de nuevo ante las palabras de Ethan

- Creo que en realidad son mi mayonesa saben...me dan sabor y yo soy los ingredientes, porque pueden ponerme como quieran y en el orden que sea - alcé una ceja tratando de poner la expresión más coqueta del mundo después de tan estúpida comparativa

- Pero vamos siempre sobre ti o debajo...- Evan me gano con esa frase tonta pero que me hizo sonrojar

- Dejemos de hablar de comida y pasamos a lo interesante - Ethan dió por finalizada la conversación.

Comenzó a besar mi cuello, mi punto débil, deje escapar un suspiro cargado de ansias. Evan en tanto tomo mis senos y comenzó a masajearlos, mis pezones ya estaban duros por sus caricias, los tomo entre sus dedos y los apretó solo lo suficiente para que yo dejara escapar un jadeo.

Me puse de rodillas en la enorme bañera, el cielo estaba oscuro fuera, los enormes ventanales dejaban ver el paisaje aunque mi concentración estaba en otro lado.

De rodillas tome la erección de Evan que estaba parado frente a mi, la bañera era suficientemente profunda como para cubrirlo hasta un poco más arriba de la rodilla, puse la punta en mis labios después con lentitud la lleve hasta dentro de mi boca, solo la punta, la saboree con mi lengua, como si estuviera chupando un dulce, Ethan en cambio también de rodilla aún en mi espalda, me tenía de piernas abiertas con sus dedos dentro de mi.

Lleve la erección de Evan hasta el fondo de mi garganta, no dejaba de mirarme directamente a los ojos lo que hacía todo mucho más excitante, comencé a jugar con mi lengua en si erección, succionaba y chupaba, los dedos de Ethan iban al mismo ritmo que yo, con su otra mano tiraba de mis pezones, sentía su erección golpeando mi espalda.

- Preciosa...- Ethan beso mi hombro mientras yo seguía dándole un oral a su hermano - lo quiero meter

No quería dejar ir la erección de Evan asique solo le asentí.

Pasó sus piernas por debajo de mi, ahora estaba prácticamente sobre el, sentí como rozaba mi entrada con su dureza, apreté más a Evan en mi boca, el sonrió, me encantaba como ambos podían complacerme y al mismo tiempo sentirse felices de complacerce a ellos mismos conmigo.

Ethan se introdujo en mi, deje ir a Evan por un segundo solo para dejar escapar un gemido voraz, estaba completamente dentro de mi.

- Tan mojada...tan apretada para mí - tome la erección de Evan otra vez con mi mano

Comencé a frotarlo de arriba a abajo, mis senos rebotaban por las estocadas de Ethan en mi, el agua se movía demasiado, solo podía escuchar el sonido provocado por nuestros cuerpos al chocar uno contra otro, Evan tomo mi rostro.

- Vamos linda Eli - acercó su erección a mi boca - no me dejes así, tu boca está caliente, me encanta...

Sonreí, volví a meterlo en mi boca, Ethan no relajaba el ritmo, sus estocadas tan profundas que hacen que arquee mi espalda, la erección de Evan que casi no me deja respirar de lo larga y grande que es, se introduce en mi boca sin tapujos, casi como si fuera mi intimidad, mi lengua acariciaba a Evan para volverlo loco, chupaba, apretaba, el sabor me encantaba, todo lo que los gemelos me hacen me encanta.

Cuando las manos de Ethan fueron a mis caderas supe que estaba por terminar, deje ir a Evan.

Comence a gemir sin control, veía como Evan se masturbaba frente a mi mientras mi espalda estaba pegada al pecho de Ethan, tenías mis senos en sus manos, apretaba mis pezones duros, sus estocadas eran más rápidas y profundas.

- Ethan, Ethan, Ethan...- jadeos, solo jadeos - Ethan...

- Te voy a llenar de mi Elizabeth...- voltee el rostro, su lengua se introdujo en mi boca

Danzaban en nuestras bocas, dos, tres estocadas, sentí como enterró sus dedos en mis caderas y como su corrida me llenaba. 

Un último beso entre nosotros, lo deje ir y fui a los brazos de Evan.

- Evan...- lo besé y fui correspondida - dámelo...- baje mi mano y acaricie su erección intacta

- No lo tendrás que pedir dos veces linda- con algo de rudeza pego mi cuerpo al suyo aún de rodilla.

Me tomo del trasero, lo apretó, me alzó en el aire, me hizo rodear su cadera con mis piernas, ahora estaba de pie y yo colgaba de el, llevo su erección a mi entrada y de una sola estocada la metió en mi interior, otro jadeo.

- Evan, Evan, Evan...- mis brazos rodeaban su cuello mientras salía y entraba de mi con rudeza y agilidad.

Tan caliente y excitado.

- Juntos Eli...- no podía escupir palabra, solo asentí, estaba cerca de venirme y el también

Gritos de placer inundaron el baño, dos, tres y ambos acabamos juntos. 

Los tres nos lavamos, nos secamos, fuimos a la habitación. 

Me lance a la cama con mi pijama que no era para nada provocativo, era de polar color rosa pastel, parecía un oso panda, a los gemelos no pareció molestarlos para nada, sus pijamas eran normales, pantalones a cuadrille, el de Evan era rojo y polera de mangas largas negras, el de Ethan era azul.

Ambos se acostaron a mis lados, al fin teníamos una cama enorme para descansar y estirar el cuerpo, entonces cómo es que los gemelos aún así se acurrucan cerca de mi como si no hubiera suficiente espacio.

- Mis párpados pesan...- dije - tengo sueño...

- Descansa preciosa - Ethan nos cubrió a todos cariñosamente

- Mañana será un gran día también - dijo Evan cerrando sus ojos mientras me estrechaba entre sus brazos

- Los adoro...- dije antes de cerrar los ojos y quedarme completamente dormida.

Tres corazones una relación ❦ PRIMER LIBRODonde viven las historias. Descúbrelo ahora