16. REGRESO

9.5K 1.1K 175
                                    


16. REGRESO

No estaba de humor. De ninguna de las maneras. Lo único bueno que le había reportado el nuevo día era comprobar que su Secta había sido una de las que más presas había cazado durante la noche. Al menos aquello lo satisfacía.

Pero cuando cerca del mediodía, cuando la actividad en Torre Jinlin empezaba a despertar después del evento más esperado de la Conferencia, la cacería nocturna, y él disfrutaba de un desayuno tardío, frugal pero apetecible después de tantas horas cazando y supervisando durante la tarde y la noche, unos golpes en la puerta reclamaron su atención.

Jiang Cheng dio la venia y la puerta se abrió. Jin Ling, vestido con todo el boato y pompa de la Secta Lanling Jin entró.

-Buenos días, Tío.

-Vaya, debo felicitarte, tu Secta ha tenido un buen desempeño durante la cacería nocturna.

-Sí, no nos ha ido tan mal –respondió el joven con cierta satisfacción y arrogancia implícita en su voz.

El Líder de la Secta Yunmeng Jiang entrecerró los ojos. Darse cuenta que Jin Ling no era ya tan niño y que crecía día a día y se transformaba en un adulto no le agradaba. Lo había criado desde que se había quedado huérfano. Y sentía un poco de pérdida cada vez que el muchacho demostraba que llegaría un día no muy lejano en el que sus caminos se separarían... y no sería en Yunmeng Jiang donde se transformaría en un adulto con responsabilidades. Sería en Lanling Jin.

Se sirvió un poco de té en una taza.

-¿Y qué quieres? ¿No tienes nada mejor que hacer que molestar al Líder de otra Secta? ¿No tienes peleles vestidos de amarillo a los que mandar y torturar un poco?

Jin Ling arqueó una ceja. Pero aquella era la respuesta propia de su tío: mostrarse arisco y molesto.

-Tío, ¿es verdad que Yu ZiHuo va a viajar hasta el Muelle del Loto pronto para que su hermana tenga una cita contigo?

Lo siguiente que se oyó a las palabras de Jin Ling en la habitación que ocupaba Jiang Cheng fue cómo la taza de té que tenía en su mano derecha se estrellaba contra el suelo cuando la dejó caer y el alfa de Yunmeng Jiang clavó una mirada furibunda a su sobrino.

El joven Líder de Lanling Jin lo miró sorprendido, pero no echó a correr. Mientras Zidian no chisporroteara, no había peligro real.

-¿Quién demonios te ha dicho eso? –reclamó.

No estaba de humor. Apenas había dormido después de la cacería nocturna. Los rumores sobre la presencia de Wei WuXian se habían extendido como una centella por todo Lanling porque no era el único que había reconocido a Suibian danzando en el bosque y ahora, antes del mediodía, su sobrino le soltaba aquella pregunta.

-Pues... Jin Chan la oyó durante la cacería nocturna.

-¡Voy a matar a HuaiSang! –estalló -. ¡Y a ese estúpido de Jin Chan!

-Pero, ¿es verdad o no? ¿Realmente vas a concertar una cita con la hermana del Líder de la Secta Meishan Yu? –reiteró.

-Será sólo una visita de cortesía –replicó con gesto airado.

-Dicen que es una omega muy hermosa... Si va a ser tu prometida, podrías avisarme antes, que me entere de estas cosas por terceras personas es algo molesto –declaró con cierto tono de recriminación implícito.

-¡Tonterías! –estalló finalmente -. ¿Acaso tengo que dar todo tipo de explicaciones cada vez que recibo una visita en mi casa? ¿Tan sorprendente es?

CortesíaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora