Capítulo 12 - Yo te evitaré a ti.

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La tarde continuó con repasos a coreografías viejas como Cariño Mío, Qué hay detrás, Empezar desde cero, No puedo olvidarte, y por supuesto... Rebelde. Pedro les había informado que solo algunas canciones del último disco de RBD se integrarían a los shows y cada uno de ellos debía elegir dos canciones de sus discos solistas que se sumarían también. Analía ya tenía preparada las coreografías de Camino al Sol, Quien te crees y entre otras pero prefirió enseñárselas cuando estuvieran los seis. Dulce terminó con la última grabación del programa ya que sería eliminada, por una parte se sentía relajada ya que tendría más tiempo para RBD.

El día había pasado muy rápido, los seis estuvieron trabajando sin parar que cuando cayó la noche sólo anhelaban sus camas. Dulce había recibido varios mensajes por parte de Rodrigo, por un momento le había sorprendido ya que unos explicaban lo bonita que se veía en el día de la entrevista, otros lo mucho que la extrañaba y otros simplemente eran sin sentido. Dulce optó por no responder ninguno, Rodrigo le había pedido distancia y ella iba a cumplir con ello, su orgullo le ganaría esta vez. Aunque no podía negar que lo extrañaba, necesitaba de su compañía y hablar con él. Cuando abrió la puerta de su departamento, la cerró tras ella y corrió hasta el sillón haciendo caer todo su cuerpo en él. Tomó su celular que estaba en el bolsillo de su pantalón y decidió por llamar a Christopher. No había tenido tiempo de hablar con ellos así que este sería el momento de hablar con uno, por lo menos. Sonó una vez... Sonó otra vez, tres, cuatro hasta que la operadora saltó en su oreja. Cortó y volvió a marcar. Al tercer tono, la llamada se abre.

-¿Bueno? - dice una voz detrás del celular.

- ¿Christopher? Soy Dul - dijo.

El silencio permaneció por unos segundos hasta que Dulce insistió - ¿Chris? ¿estas ahi? -.

- Si - musitó.

- Pensé que se había cortado... ¿Cómo estás? - preguntó.

- Bien y ¿tu? -.

- Bien, hoy no he podido llamarles... estuve muy ocupada - suelta un suspiro de cansancio.

<¿Con quién hablas?> se escucha una voz femenina detrás del celular.

- ¿Llamé en mal momento? - preguntó Dulce.

Christopher tardó en responder. - Si, perdón pero ahora estoy ocupado. - se limitó a decir.

- No hay problema, lamento llamar en este momento. Nos vemos mañana, besos - dijo arrepentida y cortó enseguida.

Quedó mirando su celular por unos segundos, le llamó la atención lo extraño que escuchaba a Christopher. Negó con la cabeza y se dirigió rápidamente al baño, necesitaba relajarse bajo el agua.




El reloj marcaba las 8:30 am cuando Poncho, Maite, Anahi, Christopher, Christian y Dulce se encontraban en el salón de ensayos. Anahi ya le había explicado a Dulce lo que habían hecho el día anterior y los temas que se ensayarían. Todos se encontraban sentados haciendo una ronda y recordando viejas anécdotas, las risas eran lo que menos faltaba allí. Habían vuelto a ser esos niños adolescentes cuando todo comenzó.

Luego de unos minutos llegó Pedro junto con Analía, y los seis se pararon a saludarlos. Dulce corrió hacia Analía y se fundieron en un cálido abrazo. Hacía mucho que no se veían, ambas se tenian mucho cariño.

- ¿Cómo estás mi pelirroja? - siempre la había llamado así.

- Bien y ¿tu? Te he echado de menos Anita - sonrió feliz.

- Pues ahora muy bien de verte - soltó una risa - has crecido pelirroja -observándola desde arriba a abajo.

- Pues no mucho - rió.

- ¡Qué lindo volver a verte! - giró a ver a todos - ¡Qué lindo volver a verlos juntos otra vez! ¡Estoy feliz! - dijo mientras posó un brazo en el hombro de Dulce.

- ¡Y nosotros de tenerte otra vez! - dijo Pedro. - Pongámosnos ya a trabajar - indicó y caminó hasta un costado donde había un escritorio y allí se sentó.

- Pues manos a la obra. Vamos a empezar con la coreo de Cariño mio, Pedro me dijo que sería el comienzo de los shows así que viene perfectamente - explicó. - Ahora pongánse en parejas y comencemos - indicó y caminó hasta el equipo de música y comenzó a buscar la canción.

Poncho y Anahi se colocaron en el medio, Christopher y Dulce a la derecha de ellos y Christian y Maite, a la izquierda. Segundos después comienzó a sonar la canción y con un micrófono invisible Poncho expresó las primeras líneas...

Analía los había parado varias veces ya que Dulce había olvidado algunos pasos. Luego de varios minutos, pudieron terminar la canción. Empezar desde cero fue la segunda canción que empezó a sonar, otra vez bailaban en pareja. Dulce se dio cuenta que Christopher apenas la tocaba y cuando ella le dedicaba una sonrisa, él apenas hacía una mueca en su rostro. Luego de varias repeticiones de Cariño mio y Empezar desde cero, Analía les dio 20 minutos para que descansen. Poncho, Anahi, Christian y Maite cayeron rendidos al piso, no daban más de cansados. Enseguida Christopher toma su celular y sale del salón apurado y muy extraño por lo que esa actitud llamó la atención de Dulce, hacía rato que se lo veía raro y apenas le había dirigido la palabra a ella. Decidió por seguirlo así que les dijo a los chicos que iría al baño y salió rápidamente.

Caminó por el pasillo del estudio tratando de ubicar a Christopher pero no lo encontraba, dio unos pasos más hasta que se detuvo cuando escuchó una voz que provenía del estudio de grabación. Sin hacer ruido caminó hasta allí y para su suerte la puerta estaba a media abierta por lo que pudo ver a Christopher parado allí hablando por celular.

- Acabo de terminar de ensayar las primeras canciones, no sé a qué hora terminaré - explicó a la otra persona detrás del celular. - Si, tranquila que la he evitado... Claro que no estoy mintiendo... Amor, te he dicho que ni siquiera le hablé... Mi amor... Haré todo lo posible por nuestra relación ¿si? Si eso implica que deje de hablar con Dulce, pues lo haré porque te quiero, mi amor. Te mando besos, adios -.

De repente la puerta se abre del todo haciendo que Christopher girara enseguida. Su rostro se tornó en blanco cuando vio parada allí a Dulce con una mirada furiosa. Trago saliva y atinó a pronunciar algunas palabras.

-¿Qué... Qué haces... Aqui? - dijo nervioso.

- Nada, de repente pasaba para el baño y escucho mi nombre... ¿tienes algo qué decirme? - preguntó desafiante pero intentó de disimularlo.

- ¿Qué escuchaste? - preguntó.

- Dime tu... - respondió.

Christopher la miró y no sabía qué decirle. Tragó, tragó y tragó saliva sin quitarle la mirada, los nervios lo consumían. Dulce al notar que no decia nada se acercó a él.

- ¿Sabes qué, Chris? - dijo mientras apoyó una mano en el hombro de él. - ¿Te puedo decir algo? - le preguntó.

Christopher la miró y asintió con la cabeza.

- Cuando en la pareja uno empieza a controlar al otro ya deja de ser una pareja... Y tu pasas a ser su perro faldero... Me das lástima. - Palmeó tres veces a la espalda de Christopher. Negó con la cabeza y comenzó a caminar hasta la salida pero antes se detuvo. - Y dile a tu novia que se quede tranquila... Yo te evitaré a ti - le guiñó el ojo y se fue allí con una lágrima rodando en su mejilla.

Christopher sólo observó como desapareció de allí y de repente se sintió mal, culpable, arrepentido, triste. Dulce había escuchado más de lo que él creía y hasta desconocía al Christopher que estaba ahí. Acababa de herir a Dulce de una manera inexplicable, ella nunca había insinuado nada hacia a él más que una amistad. Se dejó caer en el sillón y apoyando su cabeza en ambas manos sintió ganas de llorar y así lo hizo.

Volver a ti.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora