Y antes de rozar sus labios, de repente Dulce se aleja precipitadamente y se para.
- Lo... Lo sien... Lo siento, me tengo que... - los nervios se habían apoderado de ella. En una confusión casi indescriptible, solo atinó a tomar su bolso y salió corriendo de alli. Ni siquiera había terminado de hablar. ¿Qué había pasado? Mejor dicho ¿qué estaba por pasar? ¿En qué momento pasó el enojo? Las preguntas rebotaban en la cabeza de Dulce. Ni siquiera supo cómo salió de allí. Corrió hasta su coche, entro en él pero el cuerpo le dejó de funcionar cuando quiso arrancar. En el silencio de allí donde solo se escuchaba su respiración por tanto correr, apoyó los brazos en el volante y posó su cabeza en sus antebrazos. ¿Qué estaba por hacer? Apareció y reapareció esa pregunta en su cabeza. La confusión era inmensa, no hallaba tranquilidad. Trató de cerrar los ojos y poner la cabeza en frío. Sobresalta del asiento y grita "¡Estaba por besar a Christopher!" No caía en tal confesión que ya estaba predeterminada desde hace rato. Ahora más calmada, tocó sus labios y volvió a repetir "Estaba por besar a Christopher". No sólo la idea la llevaba a sentir un escalofrio por su espalda sino que la sensación de que lo iba a ser le garantizaba cosquillas en el estómago.
- ¿Qué estaba por hacer? - vuelve a preguntarse. La mezcla de sentimientos se hicieron notorios en ella y ante eso negó totalmente con la cabeza sin dejarse permitir algún planteamiento de sentir. Juntó la fuerza posible para darle funcionamiento a su cuerpo que se encontraba en total paralización, arrancó el coche y desapareció de allí.
Christopher quedó congelado, estaba inmóvil, incapaz de producir siquiera una mueca. El recuerdo de aquel momento se reproducía cuantas veces se podía imaginar. Sentir tan cerca a Dulce le había llevado a una sensación extraña en él, una sensación que le gustaba. Negó con la cabeza tan solo pensarlo. No, claro que él no podía sentir algo extraño por Dulce que no sea una sensación de... ¿De qué? ¿De amistad? La cabeza le daba vuelta a tantos planteamientos. Como pudo, se levantó de allí y salió disparando hasta llegar a su coche. Casi podría decirse que en un minuto llegó. ¿Qué había pasado? Christopher se planteaba una pregunta distinta a la de Dulce. Claramente hablaba de "aquello" que lo empujó a casi cometer lo que más tarde se podría arrepentir. ¿Se arrepentiría? Dejó de tormentarse con tantas preguntas porque ninguna hallaba una respuesta. Sólo se planteó la sensación y las ganas de besarla. A diferencia de Dulce, Christopher reconocía sus ganas de besarla en aquel momento. Decidió arrancar el coche y también desapareció de allí.
Minutos después estacionó frente a su edificio y subió sin siquiera darse cuenta de su alrededor, de lo que hacía. Estaba como si el cuerpo se movia sin estar conectado a su cabeza porque claramente su cabeza estaba ocupada repitiendo una y mil veces aquel momento. Pero no sólo lo que iba a pasar sino lo que sintió en aquel momento. En un abrir y cerrar de ojos se encontraba en frente de la puerta de su departamento, metió la llave al cerrojo y en dos giros la abrió. Entró totalmente distraído, es que no podía pensar en otra cosa. Cayó rendido al sillón y se tapó el rostro con ambas manos. En aquel silencio, una voz sobresalió de allí. No era de Christopher, sino de Natalia.
- ¡Amor! - exclamó y se tiró encima de él.
Christopher la miró y antes de emitir una palabra, los labios de Natalia estaban con los suyos. Quedó inmovil sintiendo como los labios de Natalia buscaban los de él pero este no podía reaccionar.
- ¿Dónde andabas? - preguntó Natalia separándose un poco de él pero no lo suficiente.
Christopher la miraba y no podía hablar, parecía que los ratones le habían comido la lengua. Pero no, aquello que había sucedido o mejor dicho lo que iba a suceder, le había robado los 5 sentidos.
- ¿Estás bien? - insistió, no entendía la inmovilidad Christopher.
Trató de conectar la cabeza con la boca y al fin pudo decir algo. - Hola -.
Natalia lo miró extrañada. - Bebé, ¿estás bien? - volvió a preguntar.
Decidió reaccionar, cerró los ojos y se concentró. - Hola amor, si estoy bien - forzó una sonrisa.
- ¿Seguro? Estás como si te hubiese pasado algo - explicó aún encima de él.
Christopher no entendía por qué tanto tormento, hasta la había robado la atención. Se acomodó como pudo ya que tenía a Natalia arriba de él y le sonrió. - Sisi, no me pasó nada. ¿Qué haces tu aquí? - le preguntó al percatar la presencia de Natalia en su departamento.
- Recuerda que tengo tus llaves de aqui y tu de mi casa. Te quise dar una sorpresa, estoy preparando algo muy rico - sonrió y le guiñó el ojo.
- ¿Ah si? ¿Qué? - preguntó lo más disimulado.
- Acompáñame a la cocina - se levantó de él, tomó su mano y lo elevó hasta llevarlo a la cocina. Christopher no protestó en ningún momento, mejor que Natalia no sospechara. Pero si no había hecho nada, sentía la culpa invadiendo en él.
Dulce llegó a su departamento, dejó sus cosas encima del sillón y corrió a su cuarto. Se tumbó en la cama y trató de dejar de pensar. ¿Por qué se atormetaba tanto? Si de todos modos no había pasado o justamente el pensamiento la atormetaba porque quería que pasara. Estaba confundida pero no por sus sentimientos, tenía en claro que a Christopher lo quería como un hermano ¿o no? Otra vez volvían las preguntas. Apartó a aquellos para centrarse en lo que más le importaba. Cuando juntó el valor que necesitaba se preguntó: ¿Por qué tenía ganas de besar a Christopher?. Cayó en lo que venía evitando hasta ese momento, lo que más le preocupaba y atormentaba era el hecho de que tenía ganas de besar a Christopher.
- No, no, no, a mi no me gusta Christopher. No, claro que no. Yo amo a Rodrigo. Si, amo a Rodrigo y me voy a casar con él. Desear puede ser temporal pero amar no. Claro que no. - Cuanto más lo negaba, más le entraba la duda.
Tanto Dulce como Christopher estaban en un mar de confusiones dificiles de salir ¿o no? Por el solo hecho de pensar lo que hubiera sucedido, la confusión se hacía más grande y esta vez el corazón era quien estraba en juego llevando al peligro muchas cosas.
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Volver a ti.
FanfictionLuego de 6 años de su separación, ninguno ha vuelto a contactarse mutuamente. Cada uno continuó con su carrera y algunos han triunfado y otros no corrieron con la misma suerte. Este año se cumplirían 10 años de su creación y su creador estaba ansios...