Volver a ti.

Capítulo 19 - El beso.

El día había pasado rápido para ambos. Dulce dejó distraer su mente con una llamada de Pedro. Le había informado que en dos días tenía el lanzamiento de la reedición de su libro, cosa que hizo que Dulce se pusiera feliz y comenzara a preparar ese día tan esperado. Había llamado a Iliana para que la ayudara.

Por otra parte, Christopher estuvo todo el día con Natalia. A veces distraía su mente, otras no dejaba de pensar en ello.

Eran las 9 am cuando Dulce llegó al estudio. No había nadie. Se sorprendi9 ya que siempre la que llegaba tarde era ella. Entró al estudio de grabación y se sentó en el sillón. En aquel sillón, como por arte de magia el recuerdo volvió. Apoyó los codos en sus piernas y sostuvo su cabeza con ambas manos. Pensó y pensó ¿qué es lo que había pasado? Más se le presentó la idea de que ahora vería a Christopher. ¿Cómo iba a reaccionar? ¿Y él? ¿Le diría algo? Borró totalmente aquellas preguntas y se dijo a ella misma  que dejara de hacer un mar en una gota. No había y no iba a pasar nada. Creó asegurarlo hasta que de repente gira la cabeza y ve una media silueta de una persona que estaba parada allí. Era Christopher. Él la miraba y una media sonrisa se dibujó en sus labios. Lentamente Dulce se levanta y camina a él, sin dejarlo de mirar.

Tragó saliva. - Hola - dijo cuando estaba enfrente de él.

Christopher recorrió el rostro de Dulce con su mirada que podría decirse seductora y volvió a sonreír. - Hola Dul - dijo tranquilo.

- Creo que somos los únicos que llegamos temprano - dijo tratando de alivianar el momento ya que bastante tenso estaba o así lo sentía ella.

- Mejor - contestó Christopher.

Dulce intensificó más su mirada hacia la de Christopher que saltaban chispas de entusiasmo y a la vez miedo. Frunzó el ceño. - ¿Por qué? - preguntó.

- Porque quiero hablar contigo - respondió sin dejar de mirarla.

- ¿Ah si? ¿De qué? - comenzó a cerrar círculos en la pared disimulando los nervios. Sabía de lo que Christopher quería hablar.

Tragó saliva y le tomó la mano que estaba haciendo círculos, Dulce sobresaltó. El contacto de piel había hecho estremecer su interior, sintió un calor recorriendo en ella, casi indescriptible. - Lo de ayer - contestó.

- ¿Ayer? - en un hilo de voz. Los nervios otra vez atacaban a Dulce. No entendía por qué se ponía así. De repente Christopher le causaba nervios.

- Si, y voy a ser lo más sincero que puedo. - Tragó saliva y ahora él estaba nervioso.

Dulce solo lo miró y la respiración se le entrecortó ¿Qué le iba a decir?.

- Dul, ayer iba a pasar algo que quizás hoy nos íbamos a arrepentir pero ahora te digo que no me importaban y no me importan las consecuencias. - explicó mirándola profundamente. Se acercó un poco más a ella.

- Chris... - tragó saliva. Sentía "aquello" que la impulsaba, casi podría decirse como una necesidad en ella. - a mi tampoco me importan las consecuencias - de repente dejó de pensar y se dejó llevar por aquel impulso que ayer la hizo detener. Se acercó a Christopher sintiendo su respiración y sin dejar de mirarlo sus labios se encontraron con los de él. Lentamente Christopher bajó sus brazos y le rodeó la cintura atrayéndola más a él y haciendo que el beso sea más profundo. Ambos se encontraron en terreno extraño y a la vez conocido. Aquellos labios que ya se conocían de tanto besarse en la novela y en los conciertos, hoy parecían dos bocas que se encontraron y que comenzaron a explorarse. Una sensación extraña recorrió en ambos pero que les gustaba, una sensación deliciosa que querían que sea así siempre. Se hundieron en un mar de peligro temiendo encontrar el amor.