Volver a ti.

Capítulo 17 - Te extrañé.

En medio del almuerzo los chicos habían recibido la llamada de Pedro quien les comunicaba que ya no habría ensayo en lo que quedaba del día. Por ende, a Maite le quedó justo para ir a reunirse con varios empresarios para emprender su empresa de ropa. Esta idea ya la tenía planeada desde hace mucho y no la iba a abandonar. Christian decidió ir a lo de su familia, Christopher a aprovechar el día descansando en su departamento, mientras que Poncho y Anahi decidieron por ir al cine como en los viejos tiempos.

Dulce y Rodrigo también terminaron su almuerzo romántico en donde las risas, los abrazos y besos no faltaron. Mas tarde Rodrigo dejó a Dulce en su casa y él se fue a trabajar. Dulce se sentía tranquila ya que su compromiso seguía en pie cosa que la tenía preocupada. La compañía de Rodrigo era muy importante para ella, todos sus noviazgos se habían basado de actores o cantantes y nunca de alguien fuera de este medio. Rodrigo era el único que había soportado toda esta movida y estaría dispuesto de soportar estos meses con RBD... Era lo que suponía Dulce. Llegó a su departamento y comenzó a leer los mensajes de sus fans. La mayoría estaba feliz de la vuelta de RBD pero otros lo lamentaban, querían que Dulce volviera a ser solista y continúe la gira de Sin Fronteras. Decidió dejarles un mensaje en twitter que decía "Aprovechemos las oportunidades :)" y emprendió camino hacia la ducha que continuaría con una siesta.

Cuidadosamente Poncho y Anahi llegaron a un cine cerca del restaurante pero antes de entrar se camuflaron para evitar la invasión de fotógrafos y malos entendidos que después surgirían. Anahi se colocó unos lentes enormes que cubrían más de la mitad de su rostro y se recogió el cabello; Poncho también se colocó unos lentes y ambos trataron de cambiar sus voces.

- Buenas tardes, ¿Dos entradas para "La poesía del Doctor"? - dijo Poncho disimulando con una voz suave.

La vendedora los miró a ambos extrañadamente y le entregó las entradas. - Que disfruten la película - dijo sin dejar de mirarlos.

- Gracias - respondió Poncho.

Cuando llegaron a la sala para su suerte solo había 4 personas, y comenzaron a reir ante el acting de hace unos segundos.

- Te queda bien el pelo recogido, güera - dijo mientras tomaron asiento en el final de la sala.

- Gracias - rió - Y a ti esa voz muy suave - lo imitó haciendo reir a Poncho.

- ¿Te gustó? - la miró divertido.

- Mmm... No - soltó una risa.

- Me ofendes güera - disimuló.

- Ay no bebé... - le tomó de las mejillas y las apretó suavemente - No se me ofenda gatito bebé - con voz de bebé, como siempre lo hacía.

Poncho soltó una risa y la abrazó - Claro que no me ofendes - le dió un beso en la frente - Te he echado de menos... Anduviste muy desaparecida - dijo sereno.

- Pues si, pero ya estoy aquí para disfrutar de estos meses con mis amigos y en especial contigo gatito bebé - volvió a hablar como bebé.

- Eres una güera muy linda. Te quiero Annie - la abrazó más y le dio un beso en la cabeza. Cinco minutos después, la película comenzó.

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Esa misma noche cada uno había recibido una llamada de Pedro comunicándoles que el día de mañana los ensayos se suspenderían por lo tanto tendrían el día libre.

Dulce decidió ir al estudio de todos modos ya que quería sentirse en la música, componer, cantar.

Estacionó su auto y caminó hasta el edificio...

- Buenos días señorita. ¿El señor Pedro no le avisó que hoy no había ensayo? - preguntó el recepcionista del edificio.

- Buenos días. Si pero he decidido venir de todos modos ¿No hay molestia no? - dijo amablemente.