By Your Side

Capítulo 32

5:30 PM 

Me puse un vestido blanco tan sencillo que no era algo para impresionar. Alacié mi cabello y por primera vez puse un poco de maquillaje en mi rostro. Y sonreí al mirarme al espejo... 

Quizá no era algo llamativo, pero saber que esto era para casarme con la persona que más amaba en el mundo se convertía en un vestido demasiado maravilloso... El mejor del mundo. 

Guarde el velo de novia en una bolsa de mi chamarra de cuero y suspire. Camine al balcón y baje por las escaleras hasta llegar afuera de la casa, no podía darme el lujo de salir por la puerta principal cuando mi padre podría matarme antes de casarme... 

Había pedido un taxi y este tardo más de una hora y mi pecho se contrajo... Jin debe estar esperándome, joder, el taxi iba tan lento que podría jurar que hasta un transporte público le ganaría con todo y sus paradas continuas. Pasaron diez minutos más y llegué a su casa. 

Miré hacia arriba y sonreí de oreja a oreja como una tonta estaba a punto de casarme con Jin... ¡Con Jin! 

Camine lentamente por el pasillo que estaba en el jardín hasta llegar a la puerta principal que estaba abierta. Suspire y entre. Camine por el vestíbulo y antes de llegar a la sala, me quite la chamarra. Y le hablé: — ¿Jin? —guarde silencio y camine hacia la sala sin respuesta alguna. 

Me detuve cuando lo vi sentando en uno de los sillones con la mirada perdida en el suelo. 

— ¿pasa algo?

El alzo la mirada y su rostro se tensó, me miro y me recorrió con la mirada de arriba hacia abajo antes de aclarar la garganta... él estaba sorprendido, seguro nunca pensó que podría haber comprado un vestido. 

Le sonreí y el tenso la mandíbula. —¿Estás molesto porque llegue tarde? —me acerque hacia él ,— lamento eso, es que el taxista fue muy lento. 

Él no dijo nada y tenso más la mandíbula. Suspire. —Lo importante es que estamos aquí y... 

—Primero de enero del 2018 

Dijo entre dientes con la mirada perdida. Yo fruncí el ceño y mi cuerpo tembló... 

— ¿Qué? 

—Primero de enero del 2018—me miro con una sonrisa burlona—, ese fue el día en que murió tu madre... Katherine. 

Parpadee y agite mi cabeza tragando con dificultad. — Solo lo sabe mi familia... ¿Cómo sabes sobre eso? 

Él frunció el ceño y su mirada se transformó antes de dejar de sonreír para susurrar la cosa más asquerosa y escalofriante que nunca pude haber imaginado. 

—Yo sé esa fecha, porque yo mate a tu madre. 

Él volvió a repetir el día, lentamente sin despegar la mirada del suelo. Y comenzó a describirla con una ligera y cínica sonrisa que me partió el corazón: —Ella llevaba puesto un vestido blanco, tenía el cabello corto y una sonrisa encantadora. Comenzó a sacar bolsas del coche y se detuvo antes de cerrar con llave. Debí darle tiempo de entrar y dejar las bolsas en el patio de la casa, pero se veía demasiado entusiasmada que me jodió la noche... —el suspiro y me miro antes de volver a repetirlo—: esa noche yo la mate... 

Trague con dificultad y guarde el aire en mi garganta. Tenía que tener al menos el valor de seguirle mirando a la cara para asegurarme que esto no era una broma... Jin apoyo sus manos en sus rodillas y se puso de pie, camino lentamente hasta quedar parado frente a mí. 

Su mandíbula estaba tensa, sus manos se formaron en un puño a sus costados y su rostro se había transformado en un odio palpable. —La mate—continuo y alzo su labio superior a lo que parecía ser una sonrisa—, la mate de la manera en la que su padre mato a mi familia. 

 Saque el aire de golpe por la garganta y mi estómago se revolvió. Apreté mi labio en una ligera línea. Me había quedado muda, completamente paralizada sin tener la capacidad de preguntar oh al menos poder decidir si quería seguir escuchándolo.

—Soy Kim Seok Jin. Mi padre fue el mejor amigo de su padre —continuo—nuestras familias pertenecen a dos de las cinco familias de gánsteres más poderosas del mundo. Su maldito padre destruyo mi vida de la manera más cruel, le quito la empresa a mi familia la que ustedes tanto presumen. Mi pobre familia, mi pobre padre que confió en la persona equivocada. —trago con dificultad y apretó con tanta fuerza la mandíbula que sus dientes podían verse entre sus labios y siseo—: tenía que asegurarme que tu familia sufriera lo que yo sufrí, tenía que verlos arrastrase de dolor y mendigar como mis hermanos y yo hicimos. Y tú llegaste a facilitarme las cosas. Fue divertido cuando me pusiste a mí antes que, a tu familia, confiaste en mí antes que en ellos. Los traicionaste y fue divertido haberte hecho creer que me interesabas. Porque no te amo ¿Cómo pudiste pensar que hoy me casaría contigo? y aunque tu familia sea la culpable tú eres su hija y te odio, te aborrezco demasiado. Porque eres igual que ellos, una maldita miserable... tú mencionaste que el amor lo puede todo, que es maravilloso y que cura todo dolor que no puede lastimarte. Yo vi a mi madre ser violada antes de morir, vi a mi padre ser golpeado hasta fallecer y vi como mi tercer hermano desaparecía por la puerta siendo un bebe... ¡Tu familia destrozo mi vida! ¡¿Por qué mierda tenías que ser su hija?! —él me sujeto los brazos y me atrajo hacia él con tanta brusquedad que incline la cabeza hacia atrás y apreté mis ojos con fuerza antes de volver a mirarle —, Ahora dime ¿De que sirve el amor si termina traicionándote? Dile a tu padre que siente ser traicionada por la única persona que le diste toda tu confianza, tu única luz... ¡Díselo! Y tú, derrama un poco de las lágrimas que yo derrame por tu asquerosa familia... 

Él me soltó con brusquedad y me tambaleé cayendo de golpe sobre el suelo. Mis manos se apoyaron sobre el piso tratando de mantenerme sobre él. 

 Mis lágrimas inundaron mis mejillas. Apreté la mandíbula con fuerza y agité la cabeza lentamente, estaba perdida, no podía ser verdad.

Mi familia... no... no por favor... esto era una pesadilla. Mi mundo se iba, mi mundo se había derrumbado... me habían matado en vida, me había matado la persona que yo más amaba en el mundo. Jin se alejó pasando a un lado de mí, dejándome completamente sola en una casa que ahora aborrecía. 

Aguarde minutos que parecieron horas, controlando el llanto, la ira y el dolor. Que por culpa de mi padre yo me merecía. Me levante con dificultad, escuchando un golpeteo en la entrada principal, alce la mirada.

 ¿Jimin? Suspiré lentamente, di un paso y me detuve. Mi cuerpo pesaba más de lo normal y lo único que deseaba era despertarme de esta pesadilla. Suspiré y volví a caminar... 

—No sé qué te habrá dicho Jin—dijo Jimin frente a la entrada principal. 

 Me quede callada recordando cada minuto que pase de pie escuchándole decir lo mucho que me odiaba. Cerré los ojos y me volví a Jimin sin decir nada. 

 —Para Jin, su familia lo era todo. —Dijo Jimin—Como para cualquier niño, ni siquiera había cumplido los diez cuando presencio toda esa maldad. A pesar de que su familia era una de las familias de gánsteres, su padre y su madre se comprometieron a llevarlos por otro camino, alegándolos de esa vida de asesinos. Para Jin, su familia era su dios, su escudo... su todo. Y quizá él no hubiera hecho nada, pero mataron a su hermano mayor hace unos meses, fue ahí donde perdió la cabeza. Sufrió demasiado y el odio lo volvió completamente loco... te pido que lo reconsideres, y lo perdones... perdona a Jin te lo suplico.

 Sentí un nudo en la garganta, cuando Jimin junto sus manos en forma de plegaria y bajo la mirada al suelo... así que estaba pidiendo que perdonara a ese bastardo. Trague con dificultad y pase a su lado saliendo de la casa, camine con torpeza por todas las calles con la mirada perdida. Mi vida estaba deshecha y el dolor se apretaba con fuerza sobre mi pecho... esto no debe estar pasando. Esta pesadilla debe terminar para dejarme casar con el hombre de mi vida.