By Your Side

Capítulo 39

Writer's POV's

1 semana después...

Había pasado tan solo una semana y Namjoon no había faltado ningún solo día para visitarla. Quería asegurarse que ella estuviera bien, pero lo que él aún no podía entender; es que ella nunca estaría bien.

Su dolor, su agonía y la más cruda verdad le habían robado el alma. Que hasta por un momento había preferido ser engañada por su venganza, que ser su hermana. 

Cailin no había perdido de vista la acera, camina sin rumbo con la única compañía que era verdad: la soledad. 

Había pasado una lenta y dolorosa semana en la cual no había vuelvo a saber de Jin, había intentado los mensajes y llamadas, pero Jin la había ignorado. 

Suspiro y se detuvo de golpe y alzo la mirada. —Mis padres—susurro y una pequeña sonrisa se iluminó. 

Claro que tenía el derecho de saber dónde estaban sus padres ahora, sabía que habían muerto, pero ella no podía odiar a su familia cuando esta no tenía culpa alguna. 

Sabía que ella no podría averiguarlo sola y quizá muy en el fondo esto era solo una excusa, pero tenía que preguntarle a Jin. 

Era sábado y la fría tarde no era impedimento para que ella apresurara el paso para llegar a donde Jin vivía. La extraña sensación la acompaño todo el tiempo y se duplicó cuando llego frente a la inmensa casa en la cual alguna vez estuvo.Suspiro y se acercó lentamente a la puerta del gran zaguán de color blanco y antes de poder tocar el timbre la puerta se abrió lentamente hasta dejar ver con más claridad la casa.... 

 ¿Cómo es que puede dejar la puerta abierta? Se preguntó y sin pensarlo dos veces entro a la casa.Camino por el vestíbulo mirando a su alrededor. 

Todo seguía igual que la última vez, nada había cambiado. Camino al lado de la sala y paso el borde del sofá lentamente con la yema de sus dedos apreciando el color y el aroma... un poco, tan solo un poco de vida podía sentir al estar dentro de la casa donde, su hermano vivía. 

Un hermano que amaba de la manera más incorrecta.Cerró los ojos con fuerza tratando de volver a repetir "hermano" tantas veces que no pudiera olvidarlo. 

Camino hasta llegar al inmenso y solitario comedor. Su mirada palidece, sus piernas tambalean pero aún es capaz de moverse hasta acercarse a la mesa y mira atentamente; una caja de color negra y de pequeño tamaño resalta más que todo a su alrededor."Jimin" decía en la parte central de la caja, esto no era verdad, no es posible. 

Se repetía tantas veces, intentando comprenderlo. ¿Jimin estaba muerto?La puerta principal se cerró de repente con tanta fuerza que Cailin salto sobre su lugar y giro lentamente sobre sus talones y trago con dificultad. 

El dolor de verle frente a ella podía ser tolerable al darse cuenta de que él estaba bien, había deseado tanto verlo de nuevo que todo parecía un sueño... ¿Oh una pesadilla? 

Jin le miro intentando asegurarse que esa pequeña figura se trataba de la mujer de la cual estaba enamorado. Aparto la mirada unos segundos y se volvió a ella, quito la mochila de su hombro y la dejo caer con torpeza en el suelo para después meter las manos en los bolsillos de su chamarra, aún le era imposible creer que ella estaba ahí.

Cailin le observo y el corazón se aplastó sobre su pecho, tenía la barba crecida y el cabello un poco más largo y descuidado al igual que la ropa. No era lo que alguna vez había visto, era otra persona. 

Trato de mantener la postura sin pretender alejar su mirada de la suya al menos quería recordar esos preciosos ojos que tanto amaba. 

— ¿Qué haces aquí? —pregunto con dientes apretados. 

 Ella agitó la cabeza e inhalo profundamente antes de encontrar su voz. 

— ¿Quién mato a Jimin? —quiso saber.

Jin le sonrió camino lentamente hacia ella acortando su distancia y él dijo: 

—Fue nuestro tío, el bastardo infeliz de nuestro tío. 

Cailin bajo la mirada y trato de concentrarse, no debía seguir este juego ella solo necesitaba saber una cosa. 

—Donde están nuestros padres, quiero verlos. 

Jin frunció el ceño y le miro con tanta intensidad que casi podría derretirse, guardo silencio y después de segundos volvió a contestar. 

—No voy a decirte nada de ellos, porque son mi familia yo estuve más tiempo con ellos que tú. 

siseo. 

—Tengo derecho, no puedes negarme ese derecho—gruñó tratando de pasar el nudo que estaba sobre su garganta. —y si no me dices donde están voy a seguirte fastidiando hasta que me lo digas. 

—Pues si tú insistes, me iré a otro lugar para no volverte a encontrar. 

Cailin guardo silencio y le miro con ojos cristalizados, aun después de todo tal parece que a él le sigue dando satisfacción verle sufrir. 

Jin se acercó hasta quedar frente a ella y le miro. — ¿Por qué no olvidas quienes son nuestros padres? ¿Ah? —le dijo con cierto tono de burla en su voz, guardo silencio antes de continuar —, soy un completo infeliz, un bastardo sin alma... que importa si eres mi hermana. 

Cailin trago con dificultad, mirado al hombre que tenía enfrente y lo maldito que se estaba comportando. 

¿Cuándo pararía de hacerle daño? 

Jin sonrió con descaro y subió sus manos hasta acunar la cara de Cailin sobre ellas y continuo

—¿Qué te parece salir de nuevo? Pero esta vez de verdad. Podría besarte y follarte, que importa que seas mi hermana... olvídalo. ¿Sí? 

Cailin abrió los labios para reprochar, pero el nudo en su garganta lo impidió, sus lágrimas no pudieron ser contenidas y se deslizaron por el borde de sus mejillas. 

¿Cómo podía ser tan cruel? ¿Cómo podía ser así? ... Apretó sus labios en una ligera línea y aparto con fuerza las manos de Jin. 

Dio un paso atrás y le miro con el odio palpable en sus ojos antes de salir de la casa, dejándolo completamente solo.Pero lo que ella no sabía, era que lo único que él deseaba era ser odiado y olvidado de la peor forma posible...