Capítulo 9

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Ceremonia de fidelidad parte 1

Desperté de repente con un dolor en el brazo terrible.
Solté un quejido de dolor y me incorporé en la cama con los ojos cerrados y del lado derecho.

-¿Estás bien?- Preguntó una voz femenina. La identifiqué al instante. Dory.

Miré hacia el sofá en el que estaba mi hermano ayer por la noche.
Me senté en la cama.

-Sí, solo he movido el brazo de mala forma- Dije sin mirarla- ¿Qué haces aquí?

-Alguien necesitaba vigilarte- Contestó con una sonrisa. Vino hacia mí y se sentó en los pies de la cama.

-¿Y te ofreciste voluntaria? Qué bonito- Mi voz seductora dejó a Dory un poco nerviosa.

La verdad que estábamos en una situación un tanto curiosa. Ella sentada en los pies de la cama y yo semi-desnudo mirándola fijamente.
De verdad que si pudiera me encantaría besarla y desnudarla por completo.

-Dentro de poco yo también seré una Tinaja y la familia se ayuda- Contestó mirándome.

En ese momento me quedé unos segundos pensando, creía que solo se podía ser un Tinaja si no tenías familia y conocías el secreto.

-Pensaba que solo se podía ser un Tinaja si, bueno, si no tenías familia- Dije.

-No solo de esa forma, también si te casas con uno- Contestó.

En ese momento se me bajó todo de golpe. Es decir, que Dory se iba a casar con un Tinaja, lo que le convierte en una más de la familia.
Así que ahora tengo 0 posibilidades de estar con ella, aunque solo sea una noche.

-Oh, entiendo- Me aclaré la garganta y me levanté de la cama.

Ella me siguió con la mirada, podía jurar que me comía en su mente. Pero era obvio, se iba a casar y yo no quería problemas con nadie.

-Tienes que prepararte- Dijo levantándose también.

-¿Para qué?- Pregunté aún dándole la espalda y buscando mi ropa.

-Hoy es tu ceremonia de fidelidad a los Tinaja- La miré incrédulo.

Era la ceremonia que hizo Omar y supuse que mi hermano también la había hecho.

-Omar me dijo algo ayer de eso ¿Qué se supone que es?- Pregunté.

-Es una ceremonia, algo así como la comunión. También se celebra en la iglesia, los Tinaja son muy creyentes. El cura de la familia bendice tu alma y la limpia de cualquier cosa que hayas hecho antes. Pero antes tienes que explicar tu pecado más grande. Este se te perdona y luego te hacen prometer fidelidad- Explicó Dory- Por último te hacen el tatuaje oficial de los Tinaja.

En ese momento pensé en el tatuaje que tenía Braxxter en su abdomen. Debía pensar dónde hacérmelo.
Dory me dedicó una última sonrisa antes de irse.

Dejé la ropa, de nuevo, encima de la cómoda y me fui directo a la ducha.

En tan poco tiempo habían pasado cosas, un tanto extrañas. Me preguntaba a mí mismo si la vida como fugitivo me iba a ser los suficientemente rentable como para seguir como iba.

Una cosa tenía clara, no iba a abandonar a mi hermano, otra vez no.

Salí de la ducha y me cambié de ropa. Bajé las escaleras y allí estaban todos los Tinaja reunidos en la cocina desayunando.

-Buen día, payo- Carlos fue el primero en acercarse a mí- Ven que te cambio la venda y te desinfecto el brazo.

Ambos nos sentamos en el sofá de ayer. Aún seguía el botiquín ahí. Me quito la venda y se veía increíblemente mejor que ayer.

-Increíble...- Dije al verla, Carlos esbozó una sonrisa.

-El caldo de la mama, es el mejor remedio para las heridas- El acento gitano de Carlos era muy cerrado, debía ser de los que más tiempo llevaba en la familia.

Agarró el alcohol y una gasa. Solté un quejido de dolor, no era nada comparable al dolor a la hora de sacar la bala, pero sentía como el alcohol entraba en la herida y era horrible.

Carlos cambió la venda y justo llegó mi hermano por la puerta principal de la casa junto Ángel y Minguito. Los tres reían. Vi cómo Omar me traía algo para comer y beber.
Carlos se retiró después de oír de mi parte un «gracias».

Braxxter se sentó a mi lado al igual que Omar.

-¿Cómo te sientes Fargan?- Preguntó él.

-Bien, bastante bien de hecho- Contesté.

-Os aviso de que los dos policías que os perseguían a ti y a Dory murieron- Asentí mientras Omar me miraba.

-Dory consiguió pinchar las ruedas y acelerar a tiempo, antes de que el coche diera una vuelta de campana- Contesté.

-¿Estamos en busca y captura?- Preguntó Braxxter.

-Los policías que os perseguían a ti, a Ángel y a Minguito no pudieron ver vuestras caras o la ropa que teníais puesta, así que no creo que os encuentren- Dijo Omar.

-¿Cómo conseguisteis escapar?- Pregunté mirando a mi hermano.

-Ay, pues pinchando una rueda- Contestó Ángel.

-El coche de los policías se estrelló y no pudieron seguir detrás nuestro. Así que escapamos con el dinero- Contestó Braxxter.

-Y los policías sobrevivieron- Contestó Omar.

Todos asentimos.

[...]

Los Santos era prácticamente una ciudad sin ley, ahora empezaba a entender todo. Atracos casi cada día, mafias, droga y secuestros.

Volví a plantearme de nuevo si quedarme aquí o irme. Mis amigos estaban trabajando como todos los días. Yo no podía hacer nada por mi brazo así que me mantuve en las escaleras para llegar a la casa principal, ahí sentado bajo el Sol.

Vi cómo Dory estaba arreglando un coche algo apartada de los demás. Empecé a admirar su cara y su cuerpo. Era un chica preciosa, sin duda y totalmente mi tipo.

Pero algo me dejó sorprendido. Estaba arreglando un coche, pero a la vez, estaba muy distraída. Era como si estuviera pensando en algo.
Me levanté y fui hacia ella.

-Oye, Dory. Los dos policías que nos perseguían...- Ella me interrumpió mientras no apartaba la mirada del coche y lo seguía arreglando.

-Sí, escuché a Omar cuando os lo dijo y ya me imaginaba que no iban a sobrevivir- Contestó con toda la tranquilidad del mundo.

-¿Y no te he afectado?- Pregunté sorprendido.

Ella soltó un suspiro y paro de arreglar el coche. Pasó su mano por su mejilla un momento, supongo que para limpiarse el sudor pero lo único que consiguió fue ensuciarse más.

-Escucha Fargan, el de ayer no fue el primer atraco que hacía con Ángel y Minguito. Tampoco fue la primera vez que me llevé la vida de unos policías. Si piensas que estoy así por eso, ya puedes dejar de pensarlo- Dijo mirándome e indignada.

Nos quedamos en un silencio algo incómodo. Agarré un poco de papel y le limpié su cara. Ella se me quedó mirándome a los ojos. Tanto que me puse un poco nervioso.

Empecé a acercar mi cara a la suya, noté que ahora la nerviosa era ella. Terminé besándola, pero fue un beso muy corto, ya que mi hermano nos interrumpió.

Nos separamos enseguida y miré a Braxxter el cual estaba al otro lado llamándome para que fuera.

Miré un momento a Dory y ella me miró como si hubiéramos hecho algo mal.
Solté un suspiro y fui hacia mi hermano, dejando a Dory allí, aún sorprendida y tocándose los labios.

Continuará...

Callejeros [Fargan]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora