𝕱𝖎𝖗𝖊 𝕬𝖓𝖉 𝕴𝖈𝖊『I』☾⃟ N. Mikaelson [ᴇsᴘᴀɴ̃ᴏʟ ]

Prólogo

★彡 ❆ 彡★

Una madre se sentó en su cabaña cargada con el temor de proteger a sus hijos. La madre, habiendo ya sentido el dolor de perder a dos de sus hijos, recurrió a la magia negra para garantizar la seguridad de su familia, ya que esta madre también era una bruja.

Su marido, orgulloso y controlador, exigió a la bruja que hiciera intocables a sus hijos. Deseaba ser superior a los que les hacían daño: donde las bestias podían morder, su familia mordería más fuerte, donde tenían velocidad, su familia sería más rápida, su fuerza sin rivalidad. Y así los hizo inmortales.

Vampiros.

Los primeros de su clase.

Como resultado, la bruja y su familia fueron rechazados. Sus amigos les dieron la espalda, los vecinos pudieron dejarlos fuera. Porque lo que la bruja había provocado era una maldición.

-Una abominación.

Un engaño de la muerte.

Mientras que el don de la inmortalidad protegía a su familia contra la enfermedad y la muerte, trajo consigo un deseo cegador y hambre de sangre. Había convertido a sus hijos en monstruos. Es a través de esto que su mayor vergüenza fue revelada. Uno de sus hijos fue concebido por otro.

Un bastardo nacido de una infidelidad.

Mitad bestia, mitad vampiro.

En represalia, su marido obligó a la bruja a despojar al niño de su naturaleza de hombre lobo, encerrando una parte de él, y rechazándolo por un crimen del que no formaba parte. La bruja se sintió culpable. Amaba a sus hijos, pero era demasiado cobarde para negarse a su marido. Así que lanzó el hechizo, y con él, la bruja unió la vida de su hijo a otra para asegurarse de que nunca estaría solo.

Una alma gemela.

Una amiga.

Aunque no había forma de saber cuándo su hijo conocería a su alma gemela, la bruja pidió un último favor a las brujas, pidiendo que fuera en el momento en que su hijo la necesitara más. Sin saberlo, el hijo se sintió traicionado y no amado. Cegado por la rabia, que sólo se intensificó como resultado de su nueva inmortalidad, el hijo masacró a la bruja sin remordimientos.

Fue esta traición la que puso al híbrido inmortal en su oscuro camino, con una sola persona que podía traerle la salvación. Pero con un pasado como el suyo, ¿cómo podría verlo como algo más que una bestia?

Un monstruo.

Una abominación.