Querido Profesor (Snarry)

✨ capitulo 26✨

Al notar el tamaño de ese regalo, no podía quedarse con la duda de que era exactamente. Sin más, decidió abrirlo y cual fue su sorpresa que dentro de esa enorme caja había una pequeña lechuza, negra con ojos color miel y un brillo en las plumas hermoso. Junto con ella había un carta, de dónde era la pequeña lechuza y sus comidas.

Remus, no te hubieras molestado.

No no Snape, no es molestia. Espero te guste, la escogí por el color y pensé que te gustaría- se acercó, abrazó a Snape y se sentó en un sillón tomando un whisky de fuego.

Vamos, aún hay más regalos por abrir... - exclamó Narcisa.

Pasaron un rato agradable abriendo los regalos de Snape, Harry muy cerca de él y los chicos sentados comiendo postres que habían de sobra para la ocasión a pesar que eran pocos invitados, no pasó mucho para que el comedor quedara vacío.  Mientras tanto Lucius hablaba con Draco y Hermione en su despacho acerca de su relación pero terminó aceptando la decisión de su pequeño dragón.
Por otro lado Neville y Ron decidieron irse a caminar por el patio de los Malfoy. Harry se quedó con Snape y Remus no tardó mucho en irse, ya era algo tarde y prefirió irse.

Snape se quedó con Harry en la sala platicando acerca de la fiesta.

¿Te la haz pasado bien?- preguntó Harry mientras le dedicaba una sonrisa.

Estando tu conmigo por supuesto que sí, eres mi mejor regalo y - tomó un poco de whisky- estar contigo es lo más importante. - se acercó a darle un beso en los labios.

Mmm... - Harry lamió sus labios.

¿Que pasa pequeño? ¿Te molesta el sabor?- dejó su trago en una mesilla de centro.

Quisiera probar más...

Claro pero solo un poco, quizá te caiga pesado porque es fuerte.- le dio un trago y Harry solo hizo una mueca

Algo fuerte, más que el vino que probé en tu casa, ¿Recuerdas?- una mirada traviesa salía a relucir.

Oh si si,- Snape se acomodó y abrió un poco más piernas- claro que lo recuerdo. Pero...

Sin dudarlo, Harry se levantó y tomó lo que quedaba en el vaso. Snape lo veía con asombro pero decidió no interferir. En su mente pensaba que quizá pasaría algo interesante, y quizá tenía razón.

Harry se subió a las piernas de Snape, lo besó de tal forma que no lo había echo antes, abrazó el cuello del hombre y lo pegó más a él. Severus no daba crédito a lo que estaba pasando pero siguió el beso de tal manera que introdujo su lengua en la boca del chico, era algo que siempre había anhelado hacer y por fin pasaba, ya no en sus sueños si no algo real.

Snape se separó un poco para que ambos tomaran aire.

Vayamos a la habitación, - Snape se levantó para dirigirse a la habitación con Harry adherido a su cuerpo- suéltate un poco, no querrás...

No me interesa, tu erección ya la sentí. Le habló al oído y lo mordía levemente- Y me provocas más, Severus...

Al pronunciar estás palabras Snape no soportó más, llegaron a la habitación y de inmediato soltó a Harry en la cama mientras con un movimiento de varita insonorizaba la puerta para que nadie se diera cuenta de lo que pasaría en la habitación, dejó su varita en el tocador y se dirigió con su amado.

Pequeño, ¿Estás listo?

Necesito de ti, solo quiero perderme en ti, puedes hacerme lo que quieras.