Sempiterno {Pablizza}

Capítulo 19

Después de que Mía le propusiera matrimonio a Manuel, una enfermera había entrado a la habitación interrumpiendo el importante momento, e impidiendo una respuesta concreta por parte de Manuel, quien no había podido pegar un ojo al volver a la casa.
Si, quería casarse con Mía. No dudaba de eso, pero una parte suya hubiera deseado otro tipo de proposición.
Entonces fue cuando se le ocurrió una gran idea, e inmediatamente llamó a Pablo.
Ahora, ambos se encontraban en el shopping recorriendo numerosas joyerías, en busca del anillo perfecto para Mia.
Hasta que por fin lo encontró; era un precioso anillo de oro blanco con una pequeña rosa de trece diamantes en el centro. 

- ¿Que opinas?.- preguntó Manuel, mientras observaba el pequeño anillo con atención.
- Es lindo.- respondió Pablo sin mucho importancia.
- ¿Lindo? Es perfecto.- Manuel estaba notablemente entusiasmado, aunque Pablo aún no conocía completamente lo que su amigo mexicano estaba planeando.
Manuel se dirigió a realizar el pago, mientras que Pablo lo miraba con cierta intriga.
- ¿Ahora que sigue?
- Vamos a la clínica.

Al subir al auto de Manuel, en el asiento trasero reposaba una guitarra junto con un ramo de   rosas amarillas. Esas flores simbolizan la alegría de vivir, el optimismo y la energía, y también son las favoritas de Mia.
Manuel había pasado toda la noche planeando su proposición de matrimonio, o mejor dicho la respuesta, y había llegado a la conclusión de que la persona indicada para ayudarlo era Pablo.

- ¿Conoces esta canción?.- le tendió una hoja con los acordes y la letra de la canción que había elegido para cantarle a Mia.
- Si obvio. ¿Pensas cantarle en la clínica?.- preguntó con tono de sorpresa
- Claro.- dijo Manuel con tranquilidad
- ¿Eso está permitido?
- No lo se, lo voy a descubrir ahora.

Efectivamente no estaba permitido.
Manuel estuvo un largo rato intentando convencer al hombre de seguridad para que lo dejara ingresar con la guitarra, y cuando lo había conseguido, tuvo que convencer a las enfermeras que se negaban rotundamente.
Sintió que su plan se estaba echando a perder, cuando Pablo decidió probar con lo último que, quizás, podría ablandar su corazón.

- Tiene cáncer.- dijo en tono de súplica acercándose a la enfermera que lo miraba seriamente.- su novia tiene cáncer, y podrían ser sus últimos meses. El solo quiere cumplir su deseo de casarse, antes de que se vaya de este mundo.- finalizó Pablo agachando su mirada con expresión triste, mientras que Manuel lo miraba anonadado por la escena que acababa de montar.
- Esta bien, pueden pasar. Pero solo porque me lo pediste vos.- dijo la enfermera con una sonrisa seductora, cediendo ante las palabras de Pablo.

Inmediatamente se dirigieron hacia la habitación, y luego de que Manuel le diera algunas indicaciones a Pablo, esté entro topándose con Marizza que había llevado a Candela esa mañana.
Su sonrisa desapareció de su rostro y, por algún extraño motivo, comenzó a ponerse nervioso.
Mia y Marizza lo observaban con extrañeza, ya que no había omitido palabra alguna desde que entró y solo estaba parado sosteniendo su guitarra.
Al mirar para su derecha, pudo ver a Manuel haciendo señas eufóricamente para que comenzara a tocar, y fue entonces cuando el comenzó a cantar.

Yo he pelia'o con cocodrilos
Me he balanceado sobre un hilo cargando más de quinientos kilos
Le he da'o la vuelta al mundo en menos de un segundo
He cruza'o cien laberintos y nunca me confundo
Respiro dentro y fuera del agua como las focas
Soy a prueba de fuego, agarro balas con la boca
Mi creatividad vuela como los aviones
Puedo construir un cerebro sin leer las instrucciones
Hablo todos los idiomas de todos los abecedarios
Tengo más vocabulario que cualquier diccionario
Tengo vista de águila, olfato de perro
Puedo caminar descalzo sobre clavos de hierro
Soy inmune a la muerte
No necesito bendiciones porque siempre tengo buena suerte
Ven conmigo a dar un paseo por el parque
Porque tengo más cuentos que contarte que García Marquez