⊶ 40

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–... ¿Y bien? ¿Por qué tanto alboroto?

Paris miró en todas las direcciones posibles, asegurándose que las únicas presencias en aquella habitación de hospital eran Michael y Hughes.

– ¿Estas seguro de que nadie sospechó nada?

– Son doctores Paris, no expertos en alquimia. ¿Que es lo que ocultas? – preguntó curioso acercándose a la cama en donde Paris estaba sentada.

La chica estaba cubierta en vendas. Algunos rasguños en sus brazos y al rededor de su cabeza. El daño había sido menor del que se aparentaba, y Michael había hecho un buen trabajo en darle primeros auxilios y tal vez reparando algunos huesos gracias a su alquimia. Al lado de ella, en un mueble de dos puestos Michael estaba allí tomando una siesta a pata suelta. Utilizar alquimia medicinal a tal rango y por tanto tiempo, le quitaba todas las energías de su cuerpo.

– N-no lo entendería teniente... – explicó Paris desviando su mirada. El de cabellos ceniza había hecho exactamente lo que Paris le pidió, y con suerte encontró a Hughes, el cual aceptó en ayudarla apenas escuchó sus pedidos. También supo que ella pediría algo así solo si ocultaba algo.

Hughes se cruzó de brazos sin quitar la mirada del orbe de Paris – Primero, soy tu superior. Te estoy ordenando a que me digas. – dijo seriamente, mandando un escalofrío por el cuerpo de la castaña – Segundo... ¿es que no confías en mi? Ah~ me duele Paris... ¡me duele! – cambió su actitud en un abrir y cerrar de ojos a una infantil y fingiendo estar dolido. – ¡¿Es que acaso Roy no te habla bien de mi?! – exclamó exageradamente.

A Paris le salió un tic nervioso en su ceja »Si tan solo supieras...« pensó irónicamente. – ¿Y-y los hermanos? ¿Como están? ¿Escaparon el derrumbe verdad? – preguntó intentando desviar la conversación.

Hughes se calmó en un instante y regresó a una posición relajada – Están bien. Están en este mismo hospital. Los iré a visitar una vez que termine otros asuntos... – dijo, notando una expresión de alivio en el semblante de Paris. – ¿Quieres ir a verlos? – preguntó, tomando por sorpresa a la castaña.

– N-no creo que sea buena idea...

– ¡¿Como que no es una buena idea?! ¡Si aquí todos somos amigos! – exclamó riendo amistoso. Paris suspiró rendida, sabía que Hughes era difícil de tratar, pero por buenas razones. – Aún así, – de nuevo relajó su expresión, mirando más calmado a la muchacha – tienes que decirme que estás ocultando. No puedes esperar a que haga todo eso por ti y que no me digas ni por qué lo hice.

Paris lo vió indecisa. Ella sabía que Hughes era un hombre brillante, inteligente y perspicaz. No solo eso, pero era de confiar. Pero... su situación no era algo que tomar a la ligera. Frunció su ceño, bajó la vista y negó levemente – Lo siento... no puedo.

El de ojos verdes se le quedó viendo fijamente. Estudiaba su lenguaje corporal. Podía notar que la chica más que ocultar algo, estaba asustada y apenada de decirlo. Estaba indecisa. Soltó un suspiro rendido y puso sus manos en sus caderas – Bien. Esta vez te sales con la tuya. Pero que sepas... de ahora en adelante no te quitaré el ojo de encima, ¿entendido?

Paris subió su vista de nuevo encontrándose con los orbes verdosos de Hughes, y asintió tímidamente – Si, teniente coronel.

El nombrado sonrió alegremente y dió por terminada aquella conversación. – Bien. Irás a ver a los hermanos, ¿verdad? ¿Estas bien o necesitas ayuda para caminar? – preguntó amigablemente, a lo que la castaña negó rápidamente.

– No no... estoy perfectamente. Adelántese por favor – pidió amablemente, a lo que Hughes asintió y se fue de la habitación mientras le decía el número de habitación en donde los hermanos estaban.

Future Nostalgia [FMAB•Edward x OC]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora