Sarah Cooper
Es momento de hablar acerca de la persona que entró a nuestras vidas de forma tan inesperada. Una criatura cuya raza en ese entonces representaba a nuestro mayor enemigo, pero que llegó a salvarnos sin tener idea de quienes eramos, sin saber si algún día llegaríamos a confiar en ella o no.
Llegó como la esperanza que nunca se va y te recuerda que al final todos somos humanos, todos somos diferentes...Y que el mundo es un lugar cruel habitado por buenas y malas personas. Así fue como ella llegó a nosotros, educada y con una furia intensa que sólo reflejaba toda la bondad y la necesidad que había en su corazón de acabar con la maldad.
Así fue como poco a poco, para Kenna, esa necesidad fue convirtiéndose en querer pertenecer a algo, algo por lo que algún día lucharía, algo que después protegería desesperadamente.
Al igual que los miembros con más años de vida de nuestro clan, su pasado no era uno que le gustara recordar. Puesto que no había nacido siendo bruja, pero a diferencia de ellas, tampoco fue su voluntad convertirse en una.
La aldea en la que Kenna vivía era una sometido a la crueldad de un grupo de seres que utilizaban la magia negra, provocando que los humanos que la habitaban vivieran su día a día con temor. Hasta que un día, los habitantes de dicha aldea, desesperados por salvar sus vidas, ofrecieron un sacrificio para que los dejaran vivir en paz.
Con tan sólo ocho años de edad, Kenna fue llevada por sus abuelos ante la líder del aquelarre de las brujas, con la intención de ofrecer el alma de la pequeña como alimento a cambio de la libertad de la aldea. La bruja, que había sido la misma que había acabado con las vidas de los padres de Kenna cuando ella había nacido, aceptó el trato. Sin embargo, aquella calma duró sólo una semana en la aldea, cuando la bruja mostró cuan ofendida se había sentido, y destruyó la aldea completa, junto con todos los humanos que vivían en ella.
—Aquellos que arriesgan a los suyos por interés propio, no son dignos de llamarse humanos—Era lo que había dicho la bruja que lideraba el aquelarre, antes de dar la orden de ataque.
En vez de matar a la niña, como tenían pensado que harían sus abuelos, decidió conservarla y educarla como a una más de su aquelarre, convirtiendola en una bruja. Sin embargo, Kenna nunca vio esto como algo por lo que debía estar agradecida.
Ella lo tuvo claro desde un principio, había sido transformada en un monstruo que se dedicaba a robar la energía de alguien más y usarla para destruir a otros. Pero ella jamás imitaría la cruel forma en que las brujas conseguían su poder, ella jamás arrebataría la vida de alguien más a cambio su propia supervivencia. Ella no sería egoísta. Si bien ahora viviría siendo un monstruo, sería uno diferente.
Así que tuvo que vivir observando como las brujas acababan con las almas de las personas, tuvo que escuchar cada grito, sentir el sufrimiento de aquellos que no pudieron ni siquiera defenderse. Hasta que un día, todo su aquelarre fue atacado por uno más fuerte, específicamente, por el más fuerte de todos, liderado por la bruja más poderosa que había existido jamás.
Pudiendo matarla, la líder de ese aquelarre vio en ella algo diferente, la sed de sangre ausente en su corazón maldecido. Pero también se dio cuenta, que aun cuando Kenna consideraba su vida un infierno, acabarla no le traería nada de paz ni mucho menos liberación, Kenna estaba destinada sobrevivir en este mundo despiadado. Eso era lo único que tenía claro Tsalia Morengei, cuando sin siquiera preguntarselo, la convirtió en parte de su aquelarre.
Pero la historia que iba a brindarme la explicación que necesitaba no era esa, si no una que se remonta a hace apenas unos meses, cuando Kenna había alcanzado el límite del infierno y lo había cruzado para formar parte del clan del hijo de la misma bruja que la había reclutado cientos de años atrás.
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Dark Souls |TC3
Vampiros"Por los que seguimos aquí, y los que nunca se fueron" ---- ¡El desenlace de la trilogía The Creatures! Continua en esta aventura llena de magia, hechizos y...criaturas. Es necesario leer los dos anteriores para entender este. Esta obra me pertenece...