Dark Souls |TC3

Capítulo 4: El inicio del misterio

Doble Publicación! Debes leer el "Capítulo 3: Las Desapariciones" antes de leer este 😁

Sarah Cooper

Durante los seis meses que pasé en la universidad, no hubo ninguna de las clases, ninguno de los maestros, absolutamente nada que me hiciera sentir más confundida de lo que me hacía sentir James Black. Y era increíble que todo en mi cabeza estuviera revuelto y que al mismo tiempo esta estuviera en blanco, mientras lo veía alejarse y desvanecer uno que otro árbol para que él pudiera caminar sin problemas.

—¿Qué le cuesta esquivarlos?—murmura Alex a mi lado.

—¿Y cuánto tiempo suelen durar esas reuniones?—pregunta Monique.

—Horas, minutos, depende del motivo de la reunión—le responde Dalia.

—Parecía algo importante—digo.

—De lo que más hablan es sobre pequeños disturbios que ocurren entre Criaturas a las que aún les cuesta acostumbrarse a la alianza, por lo general brujas y hechiceros, pero son la minoría.

—¿Y quienes suelen estar en estas reuniones?—pregunta Alex.

—Es sólo para los líderes de cada raza aliada, a veces también llaman a los lideres de los clanes—se encoge de hombros—. Lo que sea que hagan ahí debe ser súper aburrido, es mejor quedarse aquí y hablar de cosas estúpidas como mi fracaso en la prueba de hoy.

Una platica sobre la reciente carrera inicia entre los presentes, pero yo ya no presto atención. Miro a Alex a mi lado, que permanece con la mirada en la nada, igual de desconcertado que yo. Ninguno de los dos sabe lo que es, pero es evidente que algo pasa, el tipo de las noticias y la extraña actitud de James lo demuestran, pero lo más extraño es que al parecer, sólo él y Kenna lo saben.

«Vamos con ellos».

Salgo corriendo con Alex a mis espaldas, y llegamos hasta la casa. Afortunadamente alcanzamos a James y Kenna cuando están a punto de subirse a la Jeep, algo extraño ya que ambos bien pueden irse corriendo o aparecer mágicamente en donde sea que vaya a ser esa reunión.

—¡Espera un minuto!—trato de detenerlo. James se vuelve hacia nosotros, sosteniendo la puerta del copiloto—. ¿Podemos acompañarlos?

—Es una reunión sólo de líderes.

—¿Por qué?—frunzo el ceño—. ¿Ya nos guardan secretos James? Se supone que somos parte de tu clan—le digo—. ¿Está pasando algo, cierto? Y tiene que ver con las desapariciones.

Sé que las probabilidades que tengo de que conteste alguna de mis preguntas es menor que cero, también sé lo mucho que lo irrita que lo ataque con mis preguntas, pero es mejor que quedarme desesperada y sin conocer una pizca de la verdad.

—¿Acaso la reunión tiene algo que ver con eso?—lo miro, recelosa.

James entorna los ojos y con eso sé que lo he hecho enfadar. Suelta un bufido y se vuelve hacia Kenna, que nos mira algo alterada desde el interior del auto.

—Lo de las desapariciones no tiene nada que ver con las criaturas Sarah, y no estoy ocultándoles nada—le hace una seña a Kenna y esta asiente una vez con la cabeza. Abre la guantera y le pasa un sobre de papel—. A Andrew y a Liar les gustan mucho estas reuniones, más que informativas son como un descanso para ellos. Liar tiene Vookers de niveles bajos a los que debe enseñar a controlarse, y a los hechiceros aún les cuesta convivir con las otras criaturas, pasaron miles de años de odio para que por fin hubiera una tregua entre nosotros, algo así es difícil de superarse, pero sé que si trabajamos juntos...—coloca una mano sobre mi hombro y extiende la otra para entregarme el sobre de papel—. Podremos afrontar lo que sea—dice con expresión seria—. Espero que no se molesten, necesito hacerles unos encargos mientras no estoy—me suelta para subirse a la camioneta—. Por su bien, es mejor que ya le has enseñado por lo menos unos cuantos de tus trucos de selecto a Sarah, sé que a Dalia le gusta merodear en las mentes de los demás y supongo que querrán tener privacidad en algunos momentos.