Capítulo 53: Pryscilla, la mente indomable

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Pregunta de keyfran17
💙 Rihanna, tobías se te hace atractivo?7w7 💙

Rihanna responde: ¿Eh, Tobías?...Bueno, es un gato bastante lindo. Verás, cuando le sugerí que se pusiera el pelaje gris sabía que se vería bien porque es mi color favorito...

Adelí *interviene*: Idiota, no se refiere a eso.

Rihanna: ¿Ah, no?

Adelí: Tú sabes de qué habla, no te hagas la tonta, quiere decir que si Tobías te parece un chico guapo, físicamente atractivo, ya sabes.

Rihanna *Entra en un estado de pánico*: ¡¿Ehh?!...Bueno...lo cierto es que bueno...Sí tiene una cara linda y hay momentos en que luce hasta tierno...Y cada vez que salimos a comprar, las chicas se le quedan mirando y eso es tan...

Adelí: Así que te pone celosa, muy bien...Ahí está tu respuesta.

Rihanna: ¡Espera, no es lo que quise decir!

Adelí: ¡Gracias a todos por leernos, continúen con la lectura!

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Sarah Cooper

Yo estaba soñando.

¿Con qué estoy soñando?

Todo es oscuro, no veo nada en lo absoluto así que supongo que sólo estoy dormida, pero siento como si estuviera flotando sobre el agua, rodeada de nada más que negro.

—Sarah, resistan por favor...

No supe exactamente la razón, pero oir aquella voz en mi cabeza, en vez de hacerme sentir miedo o preocupación...Me hizo sonreír. Tal vez incluso, me reí en voz alta, no me escuché, pero sentía un confortable calor en el pecho expandiendose, eliminando la tensión de mis hombros.

—Tienes que protegerlos, Sarah...—le oí decirme, con suavidad.

Y esas simples palabras, comenzaron a darme una energía que no habría podido sacar de ningúna otra parte. Y de pronto, ya ni siquiera me preocupaba el hecho...De no saber en qué momento me había quedado dormida.

—¡Sarah despierta!

Abro los ojos de golpe, encontrando a Alex en mi campo de visión, mirandome angustiado. Todo se ve distorsionado, la habitación gris, el suelo sobre el que estoy sentada y la pared sobre la que por alguna desconocida razón estoy recostada.

—Alex...—susurro, parpadeando lentamente.

Siento los ojos pesados, y el cuerpo caliente. Trato de mirar a Alex a los ojos, pero me es difícil debido a que los míos parecen no poder enfocar nada. Logro mirarlo sólo un poco, viendolo abrir los suyos completamente, su expresión alarmada y desesperada.

—Alex...—vuelvo a susurrar, ni siquiera puedo hablar, como si estuviera cansada—. ¿Qué fue lo que...?—Alex no me deja terminar cuando planta sus labios en los míos.

¡¿Qué rayos?!

Abro los ojos como platos, pasmada por su manera de interrumpirme.

«Alex, este no es el lugar ni el momento para esto».

Dark Souls |TC3Donde viven las historias. Descúbrelo ahora