Dark Souls |TC3

Capítulo 82: Lo más poderoso

Adelí Mathews

"Al final de todo, ¿Qué es lo más poderoso que existe en el universo?"

Si lo pienso mucho, todavía puedo recordar perfectamente el vacío que sentía cada vez que me preguntaba aquello. Caminando en los pasillos de la prisión de Emmily Cooper, mis pies moviéndose hacia direcciones que yo ni siquiera quería averiguar, como si fuesen guiados por grilletes apretando mis tobillos. Así es como se sentía ser poseído por la Droga del Corazón.

Controlado, sin sentimiento que pudieras rebuscar, nada que te causara alguna emoción ante las situaciones que pasaran ante tus ojos. Simplemente nada te importaba, solo sentías y hacías lo que los demás te decían, y eso para ti no estaba ni mal ni bien, porque no podías sentir nada que no fuera necesario.

Era peor que ser una marioneta, porque ni siquiera te sentías controlado... Era como ser, un peón, solo actuabas cuando te manipulaban y movían en el tablero, y a veces simplemente... llegaba la hora de que te devorasen.

¿Entonces la persona que controla las piezas es lo más poderoso que existe en el universo?

En ese entonces pensaba que si se lo preguntaba a la mismísima Emmily Cooper, su respuesta a "¿Qué es lo más poderoso?" Sería el poder en sí. Y ella al ser alguien que siempre busca tener más poder que todos, sería al final, el resultado de lo más poderoso.

Pero aún siendo un peón sin sentimientos ni juicio, yo no estaba convencida.

—Lo más poderoso del universo, debe ser algo que nadie pueda tocar—me recuerdo a mí diciendo esas palabras—. Porque si nadie puede tocarlo, entonces nadie puede vencerlo.

¿El tiempo? Este sigue corriendo sin importar lo que suceda, nadie puede tocarlo ni manipularlo, así que contaría como algo invencible... Sin embargo, hay algo aun más poderoso que el tiempo. Y es que mientras que unos pueden acabar con el tiempo de otros, existe una cosa con la que nunca podrán acabar.

Miro hacia el cielo y obervo las aves gigantescas transformandose en Vookers, saltando hacia la cima del risco, hacia donde Sarah y yo corremos tambien. Y detrás de nosotras, el ejército entero de criaturas sobrenaturales, que emiten gruñidos de furia y gritos de guerra, sus armas de vamperus empuñadas y listas para arrancar carne, tomar venganza y acabar con la existencia del ser más odiado por todos.

Al final Emmily Cooper no fue lo más invencible, pues habíamos encontrado su debilidad.

Sarah sigue corriendo, sus ojos azules emitiendo mas brillo que nunca, sus pisadas firmes al igual que sus puños listos para luchar. No existe ningún atisbo de duda en ella ahora, está segura de que tendrá que asesinar a su hermana para salvarnos a todos, y está dispuesta a hacerlo.

Emmily Cooper mientras tanto, ya se encuentra al acecho de otras criaturas que gracias a su poder y a que el ejercito de Emmily está congelado, se nos adelantaron y fueron directo hacia ella.

Pero las sombras se hicieron mas grandes, y los latigos oscuros fueron lanzando criatura tras criatura, dejándonos en claro que ella seguía siendo más fuerte.

Pero eso a nadie le importó.

Las pisadas siguieron sonando sin cesar, el suelo temblando y los gritos de guerra aumentando. En mi mente cuento los segundos que faltan para que revivan los condenados que Sarah congeló, hasta entonces todas las criaturas aliadas irán a por Emmily, todos contra uno.

No, el tiempo no es lo más poderoso que existe, tampoco Emmily, ni siquiera James Black. Hay algo mucho más poderoso.

Y aquel que lo tiene puede adquirir todavía más poder.