tóxico ; jaedo

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- ¿Es él?

- Qué sí,  Yujin. Te lo estoy diciendo desde hace diez minutos.

- Es guapo.

- Ni te ilusiones; es gay.

Doyoung suspiro, la conversación de ambas chicas que caminaban atrás de él, siguiéndolo, lo estaba comenzando a incomodar.

- Pero ¿Estás segura? - Yujin hablo de forma insistente.- De repente te estás confundiendo.

- Es él. Él es el que vivía con mi oppa.

- Pero se ve bonito, tal vez a él le gusta y-

- Pero mi oppa no es gay, él lo acosa.

Doyoung detuvo su paso, sintiendo como el par de chicas chocaban con su espalda.

Volteó a observar a Yuna, quien se ponía en defensa rápidamente y ubicaba a su amiga atrás de ella.

- ¿Quieres dejar de hablar literalmente a mis espaldas? - su voz sonó tan profunda que hasta él se asustó.- Y deja de seguirme.

- No te estoy siguiendo.- Yuna le saco la lengua.- Tú eres el que se está metiendo en mi camino.

- Tú nunca caminas por acá. No seas mentirosa.

- Tú tampoco.- la admiradora de Jaehyun lo miro de forma altanera.- La casa de Hyuck queda al lado contrario, pero tú de seguro te estás yendo al departamento de mi oppa, ¿Qué quieres? ¿Seducirlo? Mi oppa-

- Deja de decir "mi oppa". Jaehyun no es tuyo.- Doyoung apretó con fuerza las tiras de su mochila.

Se estaba saliendo de control con solo mirar el rostro de aquella molesta chica.

- Tampoco es tuyo, pero de seguro te ofreces para que lo sea.

- Unnie, no diga eso.- murmuró Yoobin desde atrás.

- ¿Y eso qué? - Doyoung sintió el enojo llenarlo, manteniendo una voz fría.- ¿En qué te afecta si yo me ofrezco?

La chica lo miro con recelo, sintiendo su brazo ser ligeramente jalado por la menor que quería irse al tener miedo.

- Eres tal como una zorra.- escupió Yuna con desprecio.- Seguro te la metió y te la sigue metiendo como si fueras una maldita perra.

-  Wow, ¿Qué pasó con la dedicada Yuna? - Doyoung sonrió con ironía.- ¿Te soy sincero? Jaehyun ya me la metió.

- Eres un descarado.

- Me la metió. Se corrió en mi. Jaehyun ya me beso tantas veces como no tienes ideas, y me follo la boca también.- Doyoung se sentía tan fuera de casillas, ni siquiera sabía que estaba diciendo algo con el enojo cegandolo.- Él me desea, algo que no aplica contigo. A ti te ve como un duende molesto, como un perro pidiendo atención. ¿No te da vergüenza, Yuna?

Y tal como la vez que se conocieron, el ardor en su mejilla llegó, la menor le tiró una cachetada.

Sus fosas nasales se prendieron. Él estaba por tirarse encima de aquella muchacha, pero una pequeña se interpuso,  protegiendo está vez ella a su amiga.

- No, no.- dijo con miedo, tomando fuertemente la mano de Yuna.- Perdón, ella no molestará más. ¿Verdad, unnie?

La admiradora de Jaehyun se quedó en silencio, observándolo con enojo y furia.

- Ajá, no lo volverá a hacer.- terminó Yujin, mordiéndose el labio nerviosa.- Ella solo está con fiebre, pobrecita, está enferma.

- Yo no-