– Para esto voy a necesitar la colaboración de todos– comencé a hablar.
Cornelius, Cedric, Emily, Destiny y Gordic me observaban en silencio. Sabía que todos eran escépticos a escuchar lo que saliese de mi boca, pero Cedric les había explicado por qué era importante ayudar a Gary y que realmente necesitaba toda la ayuda posible.
– Debemos lograr que Gary se sienta... Como un niño humano– continué– necesita pasatiempos, amigos con los que distraerse, cosas nuevas... Necesita lo mismo que cualquier niño de doce años–
– Él no es un niño humano, no necesita eso– me recordó Cornelis cruzando los brazos– ninguno de nosotros fue criado como un humano y pudimos controlarnos a la perfección–
– Sí, pero ninguno de nosotros tuvo el mismo problema– le recordó Cedric- que haga otras cosas no lo hará menos vampiro, solo tenemos que intentarlo–
– ¿Y qué propones? – preguntó el padre con rostro irritado.
– Dentro de dos días será su cumpleaños ¿No? – dije rascándome la frente– le armaremos una fiesta... Con vampiros, pero vampiros de su edad, no de cien años–
– Nosotros no festejamos así los cumpleaños– me interrumpió Destiny– debería ser un cóctel elegante en el que se invitan a las mejores familias. Deberían hacerlo, especialmente ahora que su familia está última en la lista de casas-
– Estamos últimos, de todas formas, nadie querrá venir. Si logramos que, aunque sea se acerquen las familias con chicos de la edad de Gary, sería un primer paso para escalar– le recordó Cedric.
– ¿Cómo se supone que festejan un cumpleaños de trece los humanos? – preguntó Godric, algo desconcertado.
– Depende... ¿De cuánto dinero disponen? – dije con una sonrisa diabólica.
– El que sea necesario– suspiró Cornelius con resignación.
– Bien, entonces... Destiny ¿Puedes encargarte de mandar una invitación a todos los niños vampiro? –
– Puedo hacerla elegante o tiene que ser una tarjeta de dibujos animados– preguntó enarcando una ceja.
– Hazlas como prefieras y envíalas– asentí, cediéndole algo de terreno para que no se sintiera tan contrariada.
– Godric... ¿Podrías decorar? –
– Tendré que comprar más rosas, las del jardín las usamos todas este fin de semana– respondió él mientras tomaba el móvil, buscando quién sabe qué.
– No....– lo dediqué una mueca– es un niño ¿Por qué querría rosas como decoración? –
– Es elegante...– Destiny parecía a punto de colapsar, solo de pensar en hacer algo sin demasiado glamour.
– No tiene que ser una fiesta elegante. Godric, descubre qué le gusta a Gary y conviértelo en el tema de la fiesta– él asintió, mirando a su hermana, al borde del desmayo.
– Cornelius... Podrías ir a comprar... ¿Algunas cosas? – era incómodo pedirle algo, incluso si era algo para su hijo y aunque me habían pedido expresamente ayuda.
– ¿Qué hay que conseguir? – preguntó pasándose una mano llena de anillos por el cabello.
Escribí rápidamente en una hoja de papel, todo lo que necesitábamos y se la entregué. Él la revisó, frunció el ceño, apretó los labios y decidió que sería mejor no decir nada.
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Luna de Sangre
VampireApril Fontaine estuvo siempre segura de que los vampiros eran monstruos horribles. Cedric Leblanc siempre pensó que los humanos solo eran un alimento. Pero obligados a convivir... ¿Pueden cambiar sus prejuicios?