Suddenly

Capítulo 43: Algo sale bien

Caminé hasta la cafetería con Jackson, según él y mi padre, me convenía comer algo a pesar de que yo no quería moverme del lado de mi padre. Para sorpresa de ambos, nos encontramos ahí abajo con Maica y su padre.

-¿_____?-dijo al mismo tiempo que yo la llamaba a ella.

-¿Ha sucedido algo?-pregunté preocupada al llegar a la mesa donde ambos estaban tomando lo que parecían ser cafés.- ¿Estás bien?

-Ella sí, pero su novio ha sufrido un leve accidente, así que le hemos traído inmediatamente-me quedé perpleja. ¿Novio? Me fijé en que la rubia estaba sonriendo con algo de rojo en sus finas y blancas mejillas, ¿Acaso se estaban refiriendo a Taylor?

-¿Taylor?-Jackson se me adelantó, tanto Maica como su padre asintieron.

-¿Qué ha pasado?

FLASH BACK

Después de varias visitas de Taylor a casa de los Benson para tratar de hablar con Steve y dejarle salir con su hija, todas ellas sin éxito alguno, el moreno volvía a querer intentarlo, esta vez presentándose frente a la iglesia donde el que quería que fuera su suegro ejercía de pastor.

            Steve evidentemente se mantuvo impasible, no quería tener nada que ver con un Lautner, sus familias llevaban años odiándose. Lo más probable es que ni tan siquiera recordaran ya el motivo de su encarnizado odio. El  estricto pastor mantenía a su hija tras de sí, no quería tan siquiera que hubiera contacto visual entre ellos.

-No te quiero cerca de mi hija Lautner.

-Señor por favor entienda que quiero a su hija

-Encontrará a alguien mejor que tú-Steve no estaba dispuesto a dar su brazo a torcer, eso estaba quedando más que claro. –Maica vete a casa.

-Pero… papá.

-Ahora-dijo el señor Benson mirándola a través de su hombro. Su mirada denotó que no pensaba dejarle alternativa a su hija. La rubia suspiró mirando hacia el suelo para empezar a caminar. Se detuvo unos segundos cuando se quedó al lado de Taylor, segundos que ambos aprovecharon para mirarse profundamente, de una manera que hacía bastante no podían repetir. La rubia ni siquiera miraba al camino cuando retomó su camino a casa, igual que su padre, pero por suerte, Taylor sí pudo hacerlo y también pudo ver el coche que se dirigía zigzagueando sin control hacia su chica.

            No tardó nada en salir corriendo hacia la rubia, a la que empujó fuera del camino justo cuando el coche pasaba, de modo que el moreno fue el que se llevó un pequeño revolcón.

FIN FLASH BACK

Después de estar conversando todos un rato, la rubia subió hacia la habitación 248, donde se encontraba Taylor. Estaba leve, pero según el doctor, había sido mejor llevarle y prevenir que lamentarse más tarde. El moreno le sonrió al verla entrar en la habitación, ella corrió hacia su chico y le besó antes de que él pudiera decir una sola palabra.

-Adivina cómo te acaba de denominar mi padre-dijo ella sonriente apoyándose en el pecho de Taylor, quien se encogió de hombros- novio. Creo que le has demostrado muchísimo.

-Me alegro… de veras, me alegro de que pueda estar contigo. Me estaba matando el que no me dejaran estar cerca de ti.