Capítulo 30.

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Como en un sueño, Lan Wangji miró fijamente aquellas lámparas con forma de loto, que para aquella especial ocasión adornaban todo el salón principal de la secta Jiang.

Con recuerdos vagos de algo que en su mente podía ser o no un sueño, Lan Wangji recordó que una vez hace mucho tiempo, ese mismo salón también lo habían adornado con hermosos faroles con forma de lotos y un gran banquete.

"Lan Zhan, abre la boca, déjame alimentarte..."

Cerrando los ojos con dolor, intentando concentrarse, Lan Wangji escuchó esas palabras en sus oídos claramente. Con un tono de voz dulce pero nada afeminado, una vez su destinado había estado sentado a su lado en ese mismo salón, celebrando a su lado que algún día se casarían. Ni siquiera recordaba bien las palabras dichas por el mayor en ese entonces, teniendo recuerdos borrosos que había querido olvidar sin lograrlo, solo podía repetir en su mente una y otra vez aquello que no regresaría.

"Hanguang-Jun, te amo..."

Sentándose al lado de su hermano con preocupación, Lan Huan toco suavemente su hombro, mirándolo a los ojos: "Wangji".

Forzándose a sí mismo a recomponerse, Lan Zhan abrió los ojos y miro a su hermano, susurrando: "Mmm".

Después de desembarcar en los muelles de Yunmeng, toda la comitiva de la secta Lan fue llevada a los aposentos que ocuparían por esas fechas tan importantes. Después de vestirse con túnicas apropiadas, llevando los regalos que habían traído para el festejo, la pequeña comitiva de los Lan se dirigió al salón principal de Lotus Pier.

"¿Te encuentras bien?" Preguntó Lan Xichen, mirando al menor tan serio.

"Si hermano".

Por el festejo, Lotus Pier tenía invitados muy importantes.

Desde la secta Jin el próximo líder había asistido junto a su adorada esposa, mientras que acompañando a la pareja, Jin Guangshan y su mujer madam Jin visitaban Lotus Pier después de mucho tiempo.

Por otro lado, recién casados y después de su luna de miel, el líder de la secta Nie había asistido con su esposo, Meng Yao; siendo acompañados en esa ocasión especial por su hermano menor y el siguiente en la línea de sucesión de la secta Nie, el joven cultivador Nie Huaisang.

Y como invitados de honor estaba la secta Lan, representada por los jades de Gusu, Lan Xichen y Lan Wangji, además de una pequeña comitiva de algunos ancianos de su consejo y otros jóvenes alfa como acompañantes.

Todos los poderosos invitados al festejo estaban sentados en la parte frontal del salón, en diferentes mesas para cada familia, conversaban amenamente entre ellos. Todos ellos excepto Lan Wangji, el cual sentado en el centro de la mesa reservada para la familia Lan, al lado de su deslumbrante hermano mayor, no había pronunciado palabra, luciendo frio y serio para todos los demás.

"¿Estás seguro?" Insistió Lan Huan, dándose cuenta de que en realidad algo muy malo sucedía con su hermano menor.

Sin necesidad de palabras, Lan Wangji asintió y volvió a mirar al frente, distrayéndose con los adornos de aquel lujoso salón, perdiéndose en la pena y la infinidad de sus recuerdos.

El resto del gran salón estaba dividido en otras mesas un poco más pequeñas para el resto de asistentes, ya fueran familias de Yunmeng menos pudientes que la secta Jiang, y miembros de la propia secta que asistirían a la ceremonia. Teniendo entre esta una mesa que resaltaba para todos los alfas, ubicada en un lugar central y muy cerca de las mesas principales, tenían un lugar dispuesto únicamente para omegas los cuales reían y charlaban entre ellos.

Mi joven amanteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora