Capítulo 12

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El trío temible descansaba en los aposentos de Armitage mientras ideaban la forma perfecta para pedirle matrimonio a Rose.

- Hay muchas ideas, no sé cuál elegir - se acostó en su cama poniendo sus manos en el rostro.

- Armi, sólo piensa cual le gustaría a ella más - opinó Poe, mientras comía uvas.

- Si tan solo estuviera Millicent aquí - suspiró tristemente - la extraño. Ella me ayudaría a tener inspiración.

- ¿Dónde está? Creí que la traerías como a otros viajes - preguntó Ben, asombrado de qué Hux no la hubiera llevado consigo.

- Está bien cuidada en Alderaan, o eso espero. Si alguno de los sirvientes le hace daño a mi preciosa gata, sufrirá las consecuencias - respondió alterado.

- Tranquilo, Huxie. Es solo una gata.

- ¿Qué dijiste? - cuestionó Armitage enojado - Ella no es solo una gata, es parte de la familia y lo más preciado para mí.

- Tranquilo, Armi. Está bien. - Poe posó sus manos frente a él, intentando calmarlo.

- No la traje ya que este viaje era por más tiempo de lo normal, así que no quería que algo le pasara o el viaje la estresara.

- Sí que amas a Millicent - Ben y Poe estaban sorprendidos - y ¿Qué pasaría si a Rose no le agrada Millicent? - preguntó Ben, tomando de su copa de vino.

- No había pensado en eso - suspiró - pero el punto es que a Millicent le agrade ella. Se ve que a Rose le gustan los animales, así no hay problema con ella.

- Puede que a Millicent le agrade Rose - Ben se encogió de hombros - o al menos podría comportarse como  cuando me ve. No le agradado pero al menos no intenta morderme, solamente me ve como si me juzgara.

- ¿Qué? ¿No te muerde? A mí siempre intenta morderme - dijo indignado - ¡Hux! Deberías controlar más a tu gata.

- No es mi problema si le caes mal - se levantó de la cama  y Poe lo miraba con el ceño fruncido - Oh, y ahora que recuerdo - se acercó al escritorio donde estaba sentado Poe - las cartas - las tomó y se las dio a Ben.

- Gracias, las leeré cuando esté en mis aposentos. - las miró por unos segundos.

- Cuando termines nos cuentas que decían - habló Poe interesado.

Armitage lo miró y negó con la cabeza, mientas Ben lo miraba con una mezcla de nervios y seriedad.

- Realmente tengo miedo de su contenido - confesó Ben.

- Primero deberás comenzar con la carta de la reina, tu madre, y luego tendrás que abrir la carta con el sello real de Hapes - mencionó Armitage quien se sentó en la orilla de la cama.

- Gracias, Armi - contestó Ben.

Se levantó de la silla y dio un último trago a su vino, después le dio una palmada de agradecimiento a Hux en la espalda y salió del lugar. Armitage y Poe lo vieron salir y mejor siguieron concentrándose en la propuesta de matrimonio ya que el pelirrojo esperaba pedírselo pronto, antes de que alguien más lo hiciera.

Ben entró a sus aposentos, se sentó en su cama, iba a abrir la carta de su madre pero su miedo causó que no lo hiciera, se acostó y cerró los ojos imaginando que podría haber en esa carta. Antes de darse cuenta, ya estaba dormido.

*

Rey caminaba por los pasillos de aquel gran castillo seguida de sus damas luego del desayuno con su abuelo, el cual como siempre era silencioso e incómodo para ella. Esperaba encontrarse con Ben, cosa que no sucedió, en su lugar se encontró con Geralt, quien la saludó cortésmente y ella hizo lo mismo.

En otra vida te encontraréDonde viven las historias. Descúbrelo ahora