Capítulo 22

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Al llegar a la base Starkiller, Kylo llevo a la chatarrera en sus brazos hasta una de las salas de interrogaciones, donde la ató de manos y pies para que le fuera imposible escapar. Ordenó que los stormtroopers lo dejaran solo con ella y se sentó alejado de ella, esperando a que despertara pronto.

Cuando Rey despertó, lo primero que vio fue a aquel hombre enmascarado mirándola o al menos eso parecía. Él al darse cuenta que estaba despierta decidió hablar para comenzar el interrogatorio.

-¿Dónde estoy?- ella preguntó con hostilidad.

- Eres mi invitada. – se escuchó la voz desde la máscara. 

- ¿Dónde están los demás?

- ¿Te refieres a los traidores, ladrones y asesinos a los que llamas "amigos"? Te sentirás aliviada de saber que no tengo la menor idea. – contestó con desdén y Rey sólo lo miró – Aún quieres matarme.

- Eso sucede cuando eres atrapada por una criatura con una máscara.

Él sostuvo la mirada fija en ella así como ella con él, después con sus manos enguantadas se quitó la máscara dejando ver a un hombre joven, pero con la mirada de alguien viejo, con unos ojos ancestrales como alguna vez habría dicho su padre Han. Sus labios y cabello negro contrastaban con su tez pálida, una que al parecer no había visto el sol en bastante tiempo.

-Cuéntame del droide. – dijo él.

- Es una unidad BB con procesador de selenio y vindicador de hiperescaneo termal.

- Trae la sección de una carta de navegación, ya tenemos el resto, se recuperó de los archivos del Imperio pero falta una pieza. De algún modo convenciste al droide de enseñártela. Tú... una carroñera, puedo extraerte lo que yo desee. – dicho eso, la mano enguantada de él se posó cerca del rostro de Rey y utilizó la fuerza para entrar en su mente.

Rey intentó crear una barrera mental para que él no pudiera adentrarse en su mente.

-Te sientes tan sola, tienes miedo de irte. En la noche, desesperada por dormir, imaginas un océano. Lo veo. Veo la isla. Y a Han Solo, sientes que es el padre que no tuviste.

- ¡Sal de mi cabeza! – Gritó llena de ira.

- Sé que has visto el mapa, está ahí dentro y vas revelármelo.

Volvió a meterse en su mente, pero Rey intentaba poner aquella barrera de nuevo.

- No hay por qué temer, yo también lo siento.

-No voy a revelarte nada.

- Ya lo harás.

Siguió buscando dentro y Rey comenzó a sentir algo que no provenía de ella. Comenzó a concentrarse y de pronto ella estaba en la mente de Kylo. Cuando ambos conectaron con la mente del otro, algo sucedió, una extraña sensación que los llevó hacia destellos de antiguos recuerdos.

Rey vio un recuerdo desde la perspectiva de aquel muchacho, la ropa se veía extraña ante sus ojos ya que nunca había visto algo así y el lugar era enorme, lleno de personas. 

Ben caminaba entre toda la muchedumbre que bailaba plácidamente en aquel gran salón, hasta que se encontró a lo lejos a una chica que llamó sus atención, estaba de espaldas pero su precioso cabello rojizo que se movía de un lado al otro mientras bailaba se le hacia conocido, la admiró por unos segundos y decidió bailar para ver si en algún momento lograba toparse con ella y descubrir quien era y conocer al fin su nombre.

Por su parte, Kylo vio un recuerdo diferente en la mente de aquella chica. 

Aquel hombre de cabello largo y negro como la noche con el que al parecer había hablado Rey, dio la media vuelta y se alejó de ella, perdiéndose entre la multitud. Su porte y caminar asimilaba al de alguien de la realeza y resaltaba entre toda aquella multitud, tal vez no por su ropa negra, pero sí por su altura y sedoso cabello.

En otra vida te encontraréDonde viven las historias. Descúbrelo ahora