Capítulo 3

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Ben estaba solo y aburrido en su habitación  ya que Armitage estaba en sus deberes ayudando a su padre con el entrenamiento de la armada Alderiana. Su amigo tendría su descanso hasta dentro de dos horas y eso lo tenía muy aburrido, quería salir de ahí pero sabía que si se llegaba a encontrar a su madre, tal vez lo regañaría por travesuras pasadas o lo haría hacer algunos deberes y ahorita no estaba de humor para hacerlos, iría con su padre, Han, pero ese día había ido a cazar desde muy temprano y no  lo había sabido ya que él fue a despedir a Poe. 

Pasaron aquellas dos horas de forma lenta según Ben, fue a donde estaba Armitage y decidieron ir a su lugar secreto, donde "el trio temible" suele juntarse, ambos estaban terminando de comer cuando a Hux se le ocurrió hablar de chicas. 

- Algún te van a casar con alguna princesa, duquesa o algo así, ¿cómo te sientes al respecto? - preguntó terminándose su último bocado.

- Gracias por recordarmelo, Armi - contestó de manera sarcástica. - la verdad no me gusta pensar sobre eso, desearía casarme con alguien que yo amara pero debido a mi posición obviamente no puedo. - ahora sí contestó de forma seria. - pero, ¿por qué la pregunta?

- Suelo pensar que alguna vez me tendré que casar, pero es algo de lo que mi padre solo ha mencionado como 3 veces en mi vida. Me ha educado para sucederlo algún día como jefe de armas pero nunca me ha enseñado como cortejar a alguna mujer, pero bueno, el punto es que al igual que tú, yo tampoco creo poder casarme por amor, por mi posición sería con una condesa, baronesa o no sé.

- O puedes encontrar a alguien en Naboo, tal vez alguna dama de compañía de la princesa Palpatine - insinuó - son mujeres de casas nobles, podría funcionar - alzó los hombros.

- No creo que ninguna se pudiera fijar en mí, o yo en alguna de ellas. - confesó el pelirrojo.

- No digas eso Armi, cualquier chica querría casarse con un Conde - Ben le dio un codazo amistoso. - Ya verás que si podrás conseguir una esposa en Naboo, y si no, hay muchos otros reinos en los cuales fijarse - ambos rieron. - No perdamos más el tiempo hablando de chicas, mejor ya párate y vete a seguir con tus deberes. Nos vemos cuando termines con tu trabajo o mañana cuando salga para Naboo.

- Nos vemos al rato, el entrenamiento está siendo eficaz y todos ponen de su parte, así que espero terminar pronto. - ambos se despidieron y cada quien tomó su rumbo.

*

Rey se estaba preparando para salir a montar a caballo, una de sus damas estaba haciendole una trenza en el cabello, otra estaba maquillandola de manera simple como Rey había pedido, mientras las otras dos estaban arreglando el vestido que usaría y los zapatos.

- Al fin saldré a montar luego de dos semanas de no hacerlo - dijo emocionada. 

- Me alegro que se sienta feliz, mi lady - habló Rose.

- Aunque en dos semanas la celebración de compromiso se llevara a cabo - respondió Rey de manera seria.

- No piense en eso por ahora, mejor piense en las cosas que hará durante estos días. - dijo Emma.

- Creo que durante estas dos semanas me la pasaré en el lago o cabalgando... - pensó en voz alta - o podría estar en el campo oliendo esas bellas flores, me encanta la naturaleza. - sonrió.

-Eso es mi lady, nos gusta verla sonreír - habló Jannah.

- Ya terminamos de arreglarla, ya puede ir a los establos. - interrumpió Anne.

-Gracias - contestó Rey. - esta vez solo llevaré a una de ustedes, Rose ven conmigo - tomó su mano y salieron de la habitación.

Rey y Rose fueron a los establos donde la pelirroja montó un bello caballo blanco y su amiga y dama de compañía montaba uno café con pequeñas manchas, mientras las demás damas acomodaban todo el lugar el cual estaba hecho un desastre causado por elegir un vestido.

En otra vida te encontraréDonde viven las historias. Descúbrelo ahora