Al día siguiente Ben despertó, viendo a Rey profundamente dormida en su regazo, sonrió ante el recuerdo de aquella noche: ambos habían llegado a los aposentos de ella sin saber cómo, sólo sabían que los guardias no estaban y tomaron esa oportunidad para llegar hasta ahí, ambos comenzaron a besarse y de un momento a otro ese beso era mucho más apasionado, con mucho deseo y estaban acostados en la cama quitándose la ropa, las cosas se pusieron más intensas y tuvieron la mejor noche de sus vidas.
Ben se movió un poco para ponerse su ropa, ya estaba amaneciendo y en cualquier momento llegarían sus damas, lo que menos quería era que lo vieran desnudo. Cuando terminaba de ponerse su pantalón, Rey despertó y le sonrió medio adormilada.
- Hola - dijo él con una sonrisa.
- Hola - contestó y luego bostezó, estirándose un poco en la cama.
Ben se sentó para ponerse sus zapatos y ella se acercó a él con la sábana tapando su pecho, lo abrazó por la espalda y besó su hombro aún desnudo.
- Vaya forma de vestirte - rió - Creí que era primero la camisa antes que los zapatos.
- Cada quien tiene su forma, esta no es la mía, pero supuse que querrías admirar un poco más - sonrió pícaramente.
- Pues muchas gracias - recargó su mentón en el hombro recién besado.
- ¿Cómo saldré de aquí? - volteó un poco sus ojos hacia ella - En la noche tuvimos suerte, pero ahora no lo creo.
- Recuerda que siempre contamos con la ayuda de mis damas - guiñó el ojo y se separó de él para que pudiera ponerse su ropa de arriba - además, ¿no disfrutas de mi compañía? - se acomodó la sábana en su cuerpo y se levantó por su ropa para al menos ponerse su túnica blanca que era ropa interior y solía usar para dormir. Él volteó a verla y ambos se acercaron, tomó su mentón y la acercó a él para besarla, aquel beso era tierno y ambos sonrieron mientras seguían en aquel acto.
- Quisiera que esto no terminara - lo miró con tristeza y él acarició su mejilla con suma delicadeza.
- Yo también, aunque deberíamos aprovechar los momentos que nos quedan - besó su sien.
La puerta se abrió, haciendo que ambos se sobresaltaran y se separaran rápidamente. Voltearon hacia la puerta y vieron a Emma, Anne y Jannah delante de la puerta ya cerrada.
- Sus altezas - hicieron una reverencia y sonrieron
- Creí que se extrañarían de que él estuviera aquí - dijo Rey, incrédula y señalándolo.
- Mi lady, no es tan discreta como cree, además Jannah y yo la vimos salir junto a su alteza, el príncipe Solo, hacia acá y tuvimos que distraer a los guardias para que pudieran pase sin dificultad - explicó Emma con una gran sonrisa.
- ¿Fue su idea? - preguntó Ben totalmente sorprendido.
- Sí - dijeron al mismo tiempo
- Cuando salieron del salón - Jannah comenzó a contar lo sucedido - supimos sus intenciones, así que tuvimos que ir por el camino más rápido...
- Tuvimos que pasar por los jardines y terminamos con espinas en los brazos, pero valió la pena - interrumpió Emma.
- Y encontramos una manera de distraer a esos grandulones, lanzamos piedras desde un ángulo que pareciera fuera del castillo e hicimos diferentes ruidos, causando que se alejaran de sus puestos.
- Y cuando ustedes ya estuvieron dentro, nosotras nos quedamos afuera simulando que la habíamos ido a dejar, así que cuando ellos volvieron al pasillo, no se dieron cuenta de nada - terminó de explicar con entusiasmo Emma.
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En otra vida te encontraré
FanfictionEsta es una historia sobre una díada condenada a encontrarse en cada vida hasta por fin estar junta como siempre debió ser, teniendo varios obstáculos en el camino, volviendo casi imposible su unión. ¿Será que el amor es más fuerte que una alianza o...