Connor.
- Gancho derecho. - Golpeé la almohadilla en la mano de Derek - ¡Joder Connor, más fuerte!
Volví a golpearlo con más fuerza y sacudió su mano con una sonrisa victoriosa.
- Saben lo necesario. - Nos miró a todos, Zoey terminaba de enseñarle a Lara como dar una buena patada en los testículos.
Mi mejor amiga se acercó al pelirrojo y besó su mejilla. Además de eso entrelazó sus dedos y me miró con una sonrisa; no me convence del todo ese tal Derek, pero si la hace feliz debo aceptarlo.
- Ahora viene la parte difícil. - Zoey se recogió el cabello - Tenemos que hallar una forma de entrar.
- Creo que yo puedo ayudar... - Noah estaba boca abajo en el piso, aprendió lo que pudo pero es que la verdad ese chico para los deportes sirve menos que yo para las matemáticas.
- También yo. - Lara sonrió y sacó de su bolso sus lentes de lectura, luego la laptop y por último un cuaderno y un lápiz.
Todos caminamos hasta una banca. Nos encontramos en el apartamento de Derek, mejor dicho la puta mansión, creo que es el triple de grande que el mío. Tal vez por el hecho de que le pedí a mamá no ser tan exagerada con el lugar, a ésto me refería.
- Hey, traje el agua. - Apareció Athan sonriente con muchas botellas en los brazos, cada quien tomó una y Lara comenzó a dibujar líneas por todo el cuaderno.
- Son planos. - Nos dijo con una sonrisa, todos respondimos con un "oh" y siguió con su dibujo, le había quedado idéntico a los que estaban en la computadora.
- ¿Qué haremos con ésto? - Preguntó Derek cuando Lara le entregó la hoja.
- Pues entrar a la universidad neandertal. - El alzó una ceja y Lara ajustó sus gafas - Pienso marcar con círculos rojos los lugares donde estén los oficiales, y les estaré avisando por micrófono la dirección que van a tomar para evadirlos.
- ¿Y si no podemos evadirlos? - Preguntó Athan.
Noah arrojó uno de sus cuchillos y éste lo atrapó con algo de dificultad.
- Hay que herirlos. - Le dijo y Athan pareció palidecer.
Nos miramos entre nosotros y sin más nos levantamos. Comenzó entonces el recorrido, fuimos a todos los talleres y ferreterías. Compramos los micrófonos, chalecos antibalas por seguridad, unos cascos y pasamontañas para que nadie pueda reconocernos.
Llegamos esa misma tarde de nuevo a la casa de Derek, todas las cosas quedaron sobre la enorme mesa del comedor. Cada quien miraba los objetos un poco cohibidos, ¿Enserio haríamos ésto?
Me acerqué y tomé el cuchillo decidido, yo si estoy completamente seguro de que haré lo que sea para liberar a Adeline de las manos del puto director.
Son las seis de la tarde, prácticamente terminó el día y ya es lunes. Adele tiene tres días encerrada, ni un mensaje, ni una llamada, absolutamente nada que pudiera decirnos cómo está y eso en lo personal me tiene más aterrado.
- ¡Chicos! - Gritó Noah corriendo como un idiota en nuestra dirección. Sujetaba la laptop con fuerza en su mano izquierda y una patata de la cena en la derecha.
- Estamos ocupados nerd, ¿No ves? - Le respondió Derek y golpeé su mano logrando hacerlo retroceder.
- Cose tu boca míster músculo. - Me acerqué y lo miré intimidante - Es mi mejor amigo con quien te metes.
No respondió y todos nos acercamos a Noah, comenzó a teclear como loco y nos enseñó el perfil de una persona con la pantalla de color gris.
- ¿Quién es el? - Preguntó Zoey.
- Es el padre del director. - Respondió Noah - Estuve investigando y hace muchos años, cuando el era el director, la universidad estuvo cerrada exactamente tres semanas también, al parecer dijeron que fué por una plaga de ratas, pero ahora no creo mucho esa mierda.
- ¿Cómo conseguiste esa información? - Preguntó Athan.
- TheArtPassion es una universidad muy prestigiosa, cara y antigua. Es lógico que hay mucha información de ella en Internet, pero ésta... - Puso su dedo en la pantalla -... Estaba muy bien oculta, incluso bloqueada, tuve que instalar varios virus para poderla leer.
- ¿Y que sugieres que hagamos? - Le pregunté a Noah y éste rascó su nuca.
- Tal vez ese viejo pueda ayudarnos a persuadir al director, no lo sé, algo como un trueque.
- ¿Quieres secuestrarlo? - Preguntó Derek asombrado.
- No lo llames secuestrar... - Puso una mano en la barbilla -... Dile reclutar, si exacto, suena mucho mejor.
- ¿Cómo haremos eso? - Preguntó Lara moviendo su cabello. Noah la miró embobado y tuve que golpear su hombro.
- Pues, el hombre está en un asilo de ancianos. Al parecer tiene sesenta y ocho años, según la planilla de ingreso está diagnosticado con esquizofrenia. Es leve, pero suele tornarse agresivo.
- Genial, La versión de Rokie que está mal de la cabeza. - Comentó Zoey y Derek la miró con una sonrisa burlona.
- Tenemos que encontrarlo y sacarlo. Sólo así podremos persuadir al director y tal vez evitar el enfrentamiento con los oficiales.
- De acuerdo, iremos mañana por la noche, debemos ser discretos. Llevaremos los cuchillos pero hay que evitar usarlos. - Habló Derek como un macho alpha.
- Hay otra cosa... - Susurró Noah y todos le prestamos atención -... La gente del asilo le informa todo al director, encontré los correos.
- ¿Y que quieres decir con eso? - Le pregunté y me miró con un poco de miedo.
- En cuanto saquemos a su padre, seremos un jodido blanco para él.
Tragué saliva y el resto de los presentes se pusieron nerviosos.
◇
Adeline.
Desperté y mi vista era borrosa. Delante de mi estaba la mesa con un pedazo de pan y a su lado un vaso de leche, miré hacia atrás y no había nada. Todo estaba oscuro, sólo un as de luz que me proporcionaba a mi y a la comida.
Me levanté al notar que no estaba atada, miré a mi alrededor y no podía ver nada. La oscuridad era abrumadora y el frío insoportable, mis labios temblaron.
Comencé a correr hacia alguna parte, me tropecé y caí, mi rodilla sangrando. Pero al tocar el suelo me di cuenta que eran unas escaleras, ¡Las escaleras de la salida!
Una leve sonrisa se me escapó y traté de subir pero mi cuerpo estaba muy débil.
De la nada sentí un fuerte ardor en la espalda, tan fuerte que me hizo gritar del dolor. Caí al suelo y la luz de la habitación comenzó a aclararse, frente a mí estaba el director con una sonrisa enfermiza y un látigo en su mano derecha. ¿Me había dado un latigazo?
- Debes comportarte preciosa... - Susurró cerca de mi cara, lo escupí.
Se limpió la saliva de la barbilla y me levantó apretando mi cabello con fuerza, me hizo caminar hasta la mesa y me arrojó sobre la silla.
- Creí que ahora nos teníamos más confianza, pero ya veo que no. - Se agachó y me puso esposas en los tobillos.
Mi piel ardía en sobremanera, sentí cada hueso de la espalda doler y mi respiración estaba entrecortada.
- ¡Come! - Gritó con fuerzas - Necesitas energía para darme otro espectáculo como el de ayer.
Sentí ganas de vomitar al recordar cuando baile y delante de mi comenzó a masturbarse. Fue asqueroso y enfermo, pero cada vez que quise detenerme se acercaba y me ofrecía una bofetada. Tuve que bailar viéndolo hacer eso.
Una lágrima se deslizó por mi mejilla y con lentitud le di una mordida al pedazo de pan.

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Blood Dreams ©
Novela JuvenilEse día hizo un frío escalofriante, me desperté más temprano de lo normal y quité la alarma que sonaría en unos minutos. Preparé mi desayuno como siempre lo he hecho, mi madre ya no se encontraba en casa, seguramente ya se había ido a trabajar. Cuan...