Nuevo integrante y los detectives

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Adeline.

- ¡Felicidades! - Una chica que no conozco me dió una palmada en la espalda.

- Si que eres la reina del ballet preciosa. - Ahora un extraño tipo con cabello trenzado.

Agradecí aunque no tuviera que hacerlo.

Los comentarios como esos fueron aumentando, el fin de semana lo pasé tranquila, pero lo que fue el lunes cuando llegué a la universidad todo se tornó diferente.

Es como si la envidia y la hipocresía caminaran juntos de la mano; así es, la relación más tóxica que verán alguna vez.

En eso se resumió el día de ayer. Hoy martes, han disminuido pero aún hay alguna que otra persona que comenta algo, ¿No pueden superarlo?, gané la puta audición.

- Quisiera golpearlos a todos. - Connor apareció y recuperé mi rostro de felicidad.

- No creo que debas. Ya hemos tenido demasiados encuentros con el director. - Asentí apretando los puños.

Entrelacé nuestros dedos como pude y ambos caminamos a uno de los bancos de color blanco que hay en el patio. Miradas a mi alrededor me hicieron sentir incómoda.

Cuando nos sentamos comenzamos a comer, Connor al pendiente de que nadie dijera nada inapropiado y yo concentrada en no derramar migajas en el suelo.

- Quiero proponerte algo. - Dijo mientras terminaba de introducir el sándwich en su boca.

- Pues dime. - Puse recta mi espalda y me dediqué a escuchar.

- Creo que Noah sería una gran ayuda con nuestra investigación. - Fruncí el ceño confundida -... Verás, el sabe mucho de tecnología y si tenemos suerte, tal vez, pueda descifrar como ver esos diez segundos tan importantes.

- ¿Enserio piensas que nos ayudará? - Asintió animadamente - ¿Y que guardará el secreto?

- Me aseguraré de eso... Pero tal vez tengas que hacerme un favor tú.

- ¿Qué favor? - Pregunté con una sonrisa cómplice.

- ¿Recuerdas a tu amiga Lara...?

*

- ¡Noah, mi amigo! - Connor saltó a su hombro - Perdona que no pudiera verte el viernes en la cafetería, tuve que hacer algo muy importante con Adeline.

- ¿Más importante que tu mejor amigo? - Dijo él acomodando sus gafas.

- Pues, precisamente te veníamos a contar que es eso tan importante. - Bien, creo que es mi turno de intervenir.

- Necesitamos tu ayuda. - Interrumpí la conversación "privada" de ambos.

Se cruzó de brazos.

- Te escucho. - Sonreí.

- Está aquí en mi laptop, pero debes prometer que no te vas a asustar. - Frunció el ceño y abrí la computadora, el vídeo se reprodució de inmediato.

Sus expresiones estaban mas relajadas de lo normal, tranquilo y sereno. Como si ver un asesinato fuera su día a día, me estremecí un poco al pensar en algo así.

- Faltan diez segundos. - Dijo Noah y yo abrí los ojos sorprendida, incluso yo, siendo tan detallista, tuve que ver el vídeo unas cuatro veces para notarlo.

- En eso precisamente necesitamos tu ayuda. - Le habló Connor un poco más serio que antes.

- Es difícil amigo... - Nos miró a ambos -... ¿Cómo consiguieron esa grabación?

Blood Dreams ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora