Sexo,Amor & Fotografia (Cameron Dallas & Tú)

Capítulo 105

-En Los Ángeles-

________: Mia, creo que tenemos que ir de compras.
Mia: Claro, ¿a dónde quieres ir?
________: Amm... No sé, nunca había pasado por esta situación.
Mia: Pero si compramos ropa cada semana, ¿cómo que nunca has pasado por esta situación?
________: Bueno, sí, pero nunca había comprado ropa de embarazada... ¡Ya no me queda mi ropa!
Mia: Pero eso es normal ________, vas a engrosar.
________: Voy a engordar, fue por eso que Cameron se fue ¿verdad? (dijo empezando a llorar) Porque no quiere a un elefante a su lado.
Mia: _______, ya se te olvido que fue idea tuya que se fuera a Londres.
________: S... Sí, pero es que lo extraño mucho.
Mia: Se fue hace 3 días.
________: Pero aun así lo extraño.
Mia: Sabes que... Mejor, vámonos ya al centro comercial, a ver si ir de shopping te levanta un poco el ánimo.

********************

-En el centro comercial-

Mia: Aww _______, te ves lindísima.
________: ¿De verdad? (dijo mirándose al espejo)
Mia: Si, toda esa ropa de maternidad te queda increíble.
________: Gracias por acompañarme Mia.
Mia: De nada amiga. Cuando quieras.

Pagaron la ropa y salieron de la tienda. Iban platicando por los pasillos con las manos llenas de bolsas cuando _________ se paro frente a un aparador con ropa para bebé.

Mia: Todavía falta tiempo para eso no (dijo detrás de ella)
________: Si lo se, ni siquiera sé si va a ser niño o niña.
Mia: ¿Cuánto tiempo falta para saber?
________: Poco menos de dos meses.
Mia: Bueno, todavía hay tiempo para que pienses en ti y en tu ropa.
_______: No quiero saber el sexo del bebé hasta que Cameron este aquí.

Y los días pasaron lentamente para ________, a pesar de mantenerse ocupada cuidando a Scarlett, arreglando el cuarto del bebé y ayudando a Mia con los arreglos de su boda.

Cameron la llamaba siempre que podía, pues la diferencia de horarios hacia que fuera más difícil.

**************

________ estaba sentada en un rincón, frente a ella estaba Nash parado en una plataforma y un sastre giraba alrededor de el tomando medias y clavando alfileres.
Mia le hacía comentarios y el sastre los obedecía al pie de la letra. Pero ________ ya estaba perdida. La panza le había crecido más, y mientras la acariciaba, su mente divagaba en que podía hacer Cameron en ese momento, y las voces de sus amigos eran solo un murmullo en sus ensoñaciones...

Mia: Ay si, te vas a ver guapísimo el día de nuestra boda, amor.
Nash: Pero a mí no me gusta el traje.
Mia: Pero se te ve muy bien, a mi me gusta.
Nash: Claro, tú lo escogiste.
Mia: Por eso es perfecto.
Nash: ¿No puedo opinar ni siquiera en lo que voy a usar el día de mi boda?
Mia: Es que el traje es perfecto para la ocasión, además te ves galante, apuesto, seductor...
Nash: ¿Y yo voy a elegir tu vestido?
Mia: ¡Claro que no! es de mala suerte que el novio vea el vestido de la novia antes de la boda.
Nash: Pensé que era la novia y eran 24 horas antes.
Mia: Pues no, (pregúntale a ________) ¿Verdad que es mala suerte _______? (ella no contestó) ¿________? (siguió sin contestar) ¡________!
________: ¿Qué? Ah, si... Es de mala suerte.
Mia: Lo ves mi amor.
Nash: Como sea, ya quiero salir de todo esto.

Y los protagonistas de la futura boda siguieron discutiendo, mientras la mente de ________ seguía divagando, su mente pasaban de su hijo a Cameron, a Londres, a Cameron, a su hijo, a Cameron, a la posibilidad de que fuera una niña... ¿Las inglesas?.

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