Irresistible |ITZER|

36

Dias después...

Itzan acepto de la mejor manera su ruptura con Danna, decidió ser sincero, no podía mentirle, por lo menos podrían seguir siendo amigos. Eso es lo que pensaba Itzan pero Danna tenía otros planes... seguía enamorada de él, no quería seguir sintiéndose mal por tener un novio que tiene sentimientos por otra chica.

Su plan era enrollarse con única persona cercana de Itzan y esa persona es Álvaro, su mejor amigo.

Ese plan parecía perfecto aunque podría salirse de las manos fácilmente.

Álvaro seguía enamorado de Danna aunque jamás le confesó lo que siente, es una historia típica donde por fin Danna podría ver lo que tiene delante de ella o quizás la obsesión que tiene con Itzan va cegarle aun más.

Itzan volvió hablar con Ester, les tocaba trabajar juntos en la universidad...

-Yo ya termine lo mío...

Itzan levanta cabeza, mira el trabajo que hico Ester, lo estudia bien.

-Parece bien.

-Dale, Itzan... no seas aguafiestas.

Itzan sonríe, de un momento a otro los dos logran pasar de ser desde dos personas que buscan enrollarse hacia volver a ser amigos.

Todos ya sabían que esa amistad no va funcionar, fue evidente... cada vez que querían tratar ser amigos eso no funciono, volvieron a acostarse juntos. Ahora, ninguno de los dos era preparado para follar y volver a normalidad el otro día...

-Solamente quiero terminar el trabajo.

Ester pone su mano sobre el brazo de Itzan, acariciándolo sin querer...

-Tengo una buena idea.

Itzan la escucha atentamente mientras sonríe.

-¿Confías en mi? – cuestiona la rubia

-Si, confío en ti ciegamente, con mi vida.

-Vamos a mi casa y podríamos abrir una botella de vino.

Itzan se sorprende ante esa propuesta.

-¿Segura?

-¿Tienes miedo de algo?

-Pues sí, tengo miedo...

Itzan vuelve acercarse a ella, pone mano sobre su pelo, acariciándola.

-Tengo miedo de lo que podría pasar si nos emborrachemos. – susurra en su oído

Ester sonríe pícaramente, le gusta oír voz de Itzan en su oído.

-Lo que sea que pasa te prometo que no vamos a ignorarlo el siguiente día.

-Vale pero no quiero beber.

-Vaya... Itzan Escamilla no quiere beber. ¿Estas seguro que no tienes fiebre? – cuestiona al poner mano sobre su cabeza

-¡Quita la mano! – bromea

-¿Vas a pasar por mi casa esta noche?

-Si, en las ocho.

Ester sonríe, siguen trabajando en la tarea.

En ese mismo momento Danna entro en la aula, notándolos demasiado felices y sonrientes, Álvaro se encontraba por detrás, siguiéndola.

-¿Estas bien? – cuestiona

Danna dio vuelta después de unos segundos, notándolo.

-¿Qué?