"Sé hacer cosas que otros omegas no..."
Mew estaba pensando en las palabras de Gulf — asique a eso te referías— susurró para sí mismo.
Ya no podía dormir, la cama ya no olía a su omega, moría por descubrir todo del menor, era una pequeña caja de sorpresas, simplemente sorprendente.
El sol se estaba asomando lentamente, era la mañana del domingo.
Se levantó, se sirvió el desayuno, luego se tiró en el sofá, con la mirada en el techo, no sabía qué hacer, Gulf le demostraba ser muy independiente y fiero.
Ni siquiera tenía palabras para describirlo, aun se sorprendía otra vez al recordar cuan ágil era, como ni siquiera pestañeo ante la voz de mando de otros alfas, era como estuviera presenciando una película de ciencia ficción.
Le gustaba, es un gran orgullo que esa criatura sea su destinado, pero hacia las cosas difíciles.
Otros omegas al reconocer a su alfa automáticamente corre a sus brazos, pero Gulf, estaba haciendo lo contrario y le dolía, vivió una vida en soledad y soñaba que al encontrar a su omega ya no estaría solo, pensó que ya habría alguien que lo abrace en la mañanas y a quien besar en las noches, pensó que tendría el cariño que tanto deseo, pero no era así, nada de eso estaba pasando.
Su lobo por un lado, cada vez estaba más orgulloso de lo magnifico que es su omega, los dos se volvieron locos cuando escucharon de la boca de Gulf aceptar que él era su alfa, si Kaownah no hubiera interrumpido lo más probable es que le haya devorado ahí mismo, porque quería escucharlo llamarlo alfa, reclamarlo una y mil veces que era suyo mientras él se adueñaba de su cuerpo, quería escucharlo gemir su nombre y volverse uno con él, porque Mew hace tiempo que lo había aceptado, y que Gulf lo haya admitido abría las puertas para la unión de los dos.
Pero por otro lado, se preguntaba porque se negaba a él
"Me hubiera gustado conocerte en otra circunstancias... jamás me hubiera aguantado tanto para no besarte" pensó en las anteriores palabras de Gulf, ¿qué hacía que en esta no pueda besarlo o amarlo? Que hacía que se sienta tan preocupado y angustiado, la noche que pidió dormir en sus brazos no pudo evitar ver su semblante triste y sentir todo ese sentimiento, hacía que quiera protegerlo desesperadamente.
Decidió salir a correr, era una mañana fresca y correr lo ayudaba siempre a despejar la mente, tal vez pasaría en frente de la casa de en donde vive los dos omegas, por si llega a ver a Gulf, al fin y al cabo la casa de ambos no estaba tan alejados.
Podría llamarse pesado pero a su lobo le estaba volviendo loco, no verlo desde la noche del viernes era demasiado tiempo para estar separado de él.
***
Gulf tenía los dedos entrelazados con la mirada perdida, sentado en la pequeña sala, se le formo un nudo en la garganta y soltó un sollozó silencioso.
Se sentía tan miserable, no podía salir en las calles con tranquilidad, temía que alguien lo reconozca o la policía lo descubra, pero su mayor temor era decepcionar a Mew, estaba desesperado por arreglar su situación y al paso que iba parecía que ya no había solución.
Su omega bajó las orejas, agachó la cabeza y se enrosco en la parte profunda de su ser, estaban rogando por su alfa, era el único quien lo podía consolar, los dos se sentían miserables.
Escuchó el sollozo de Mild en su habitación y eso lo sacó de su momento melancólico, se secó las lagrimas y ocultó su olor, en ese instante olía a tristeza por todos lados.
Exprimió tres naranjas preparando un poco de jugo y un sándwich para llevarle como desayuno, el pequeño lo estaba pasando muy mal
Mild lloraba por la presencia de Champ, su celo estaba siendo muy doloroso, los supresores ya no ayudaban, su omega exigía por su alfa.
Sabía que su pequeño actuaba de esa manera por su celo, asique no le permitiría a Champ acercarse ahora, esperará a que Mild decida aquello estando en sus cinco sentidos.
Sabía que era una situación un tanto difícil, siendo que el omega ya ha pasado por muchos sustos.
Lo mas seguro es que su pequeño al entregarse a su Alfa querría que sea un encuentro más especial.
No de la manera que al terminar su calentura no recuerde nada, tampoco sabía como reaccionaria, teniendo en cuenta que estaba un poco traumado, asique era un tema delicado.
Decidió que lo mejor era dejar esa importante decisión en manos del omega.
Cuando entró a la a habitación el rostro del pequeño estaba empapado en lagrimas y se retorcía de dolor.
Dejó la comida al lado de la mesita de luz y le acaricio el cabello— Estas mejor?— pregunto preocupado estando consiente de la respuesta.
— Quiero a mi alfa— dijo llorando con un hilo de voz.
Gulf sacó otro supresor y le dio para que el dolor pase, le paso el jugo y libero su olor para calmar mas al pequeño, este se acerco y puso su cabeza en el regazo de Gulf.
— Saldré un momento— informó después de unos minutos cuando el pequeño se calmo— no tardare... traeré algo que te ayude— y Mild asintió con los ojos cerrados.
Se puso el suéter que Mew le prestó, un quepis negro y salió de la casa, se dirigía a hotel de Champ para pedirle alguna prenda suya, sabía que su olor podría ayudar mucho para que el celo de Mild sea menos doloroso
Quería buscar la prenda el día anterior pero al alfa también se le adelanto el celo y espero 24 hs para poder ir a traer.
Caminó solo por las calles, sacó su celular y llamo a Champ para avisarle que estaba yendo a su encuentro luego colgó, como era domingo de mañana no había casi nada por las calles, aun estaba siendo silencioso.
Pronto sintió que alguien lo estaba siguiendo, la brisa trajo un olor familiar, apresuró el paso y se deslizó en una esquina de un pequeño callejón de vecindario, diviso un diminuto balcón solitario, cerró los ojos con fuerza exigiendo a su omega a no desobedecer, le costó más de lo normal ocultar su olor, una vez que lo consiguió trepó al balcón guardando absoluto silencio.
***
Mew había visto a Gulf salir, lo vio con su suéter puesto y sonrió con ternura, aquella cosa realmente le quedaba grande, a principio trato de correr para alcanzarlo, pero vio que llamó a alguien y colgó nuevamente, parecía muy concentrando en mantener oculto su rostro de la mejor manera.
Conociendo a Gulf sabía que no le diría nada, tenía que descubrirlo solo, asique simplemente lo siguió, notó cuando apresuro el paso y también hizo lo mismo, cuando giró en la esquina desapareció, su aroma se desvaneció en ese lugar y ya no lo vio en ningún lado.
Arrugo el frente confundido, la cuadra era muy larga para haberla alcanzado tan rápido, y por más que olfateaba no logro sentirlo más, tampoco pasó ningún vehículo y los locales comerciales estaban cerrados.
Se rasco la nuca confundido y se dio la vuelta regresando a su casa frustrado
"¿hay algo más que sabes hacer?"
Pero encima de Mew en un pequeño balcón el omega sollozó.
Gulf es necio, y ahora ha desarrollado ser temeroso, basado en la reacción anterior de Mew, le daba miedo de que malinterprete las cosas nuevamente y lo acuse de cosas erradas, ya no quería que lo mire con decepción, ya no quería ser señalado por algo que no hizo.
No pudo evitar llorar cuando vio a su amigo, y Champ tuvo que consolarlo, estaba sufriendo demasiado, alejarse de Mew le dolía hasta el alma "debes decirle la verdad" exigió su lobo y él acepto, debe ser valiente y afrontar como sea que reaccione, él debe aceptar.
Recordó a su abuelo, es la figura paterna que siempre tuvo, y aunque le hablaba de sus dos madres y lo valiente que eran, para Gulf no había recuerdos, tan solo pequeños fragmentos que parecían sueños, recordó las veces que su abuelo se enorgullecía por él por lo valiente o lo listo que podía ser, y ahora, tenerle tanto miedo a algo ha hecho que todo el esfuerzo y dedicación de su papá Max haya sido en vano, y eso no lo permitiría, él debe afrontar la realidad.
***
El consuelo de Mild fue grande cuando olisqueo la camisa del alfa y eso ayudó muchísimo para pasar su celo.
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VALIENTE
FanfictionGulf es un omega fuera de lo común. Su abuelo se encargo de entrenarlo para saber defenderse y no ser el típico omega sumiso, al moldear a su omega para ser fuerte e independiente su lobo fue adquiriendo características que se habían perdido con el...