Capítulo 34

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Mew se sentó en el sofá de la sala, solo con el bóxer puesto, revisó el celular encontrando las llamadas perdidas de Mild.

Gulf salió de la cocina, vestido únicamente con la gigantesca camisa del mayor que lo cubría hasta por la mitad del muslo, con un enorme vaso lleno de agua entre las manos, se acomodo en el regazo de Mew con las piernas apoyadas en cada lado, le dio un gran sorbo y llenó sus cachetes con el líquido luego le paso el resto al alfa.

El mayor lo miraba con una pequeña sonrisa y con un brillo especial en los ojos, tomó el vaso y se bebió todo el contenido, dejando el vaso en la mesa ratona que estaba en frente.

Quiso meter la mano bajo la tela de la camisa pero Gulf le dio un manotazo -no toque! - advirtió terminante.

-Pero es mío- se quejó y Gulf puso una expresión incrédula -es tu culpa, como aguantarme si sé que no tienes nada ahí abajo-coqueteo.

-¿Mi culpa? Tu rompiste mi bóxer! ¿Qué quieres que me ponga? el tuyo me queda como una pollera! ¿No pudiste solo sacármelo?

Mew empezó a reír-estaba muy entusiasmado- confeso y contagio de la risa al menor.

-Mild ha estado llamando, supongo que quiere hablar contigo ya que tu celular... pues...-hizo un gesto y miro el aparato destrozado en el piso.

Gulf también miro la escena del crimen, el celular que lanzo hace unas horas antes estaba esparcido por todos lados cerca de la mesita, totalmente inservible.

Con una mueca de arrepentimiento, se lamento -no debí hacer eso - dijo y agarro el celular que el mayor le tendía marcando el número del pequeño.

-El lunes te consigo uno nuevo- susurro el mayor y el asintió con una pequeña sonrisa acariciándole la cara con una mano y la otra con el celular pegada a la oreja.

-PASALE A MI GULF!!!- grito el pequeño apenas contestó la llamada, y Gulf tuvo que separar el aparato del oído quejándose por el espontaneo grito que le causo zumbidos.

Mew rio bajo tratando de no hacerse escuchar, a veces Mild podía ser muy intenso.

-Que sucede Mild?

-Es que... OYE!... YO LE DIGO!... HEY!- se escucho ruidos y los gritos del pequeño

-Mild?!

-Hola enano- Saludo Champ

Gulf empezó a reír negando con la cabeza pero le expresión de Mew se puso seria en cuanto lo escucho.

-Necesitaba hablar contigo...-continúo el alfa, pero Mew le arranco el celular.

-Porque tu, alfa, necesitas hablar con mí omega?- pregunto con la voz grave lleno de posesividad y celos, al tiempo que rodeaba la cintura del menor y lo pegaba más a él.

-Pásame a Gulf ahora alfa entrometido-exigió del otro lado sonando igual de molesto.

-SII... PASALE A MI GULF! -se escucho el grito de Mild.

Gulf le arranco otra vez el celular al alfa mirándolo con reproche.

Pero Mew acaba de hacerle el amor a su omega y su alfa no quería que hable con otro alfa, estaba siendo muy celoso y posesivo, si seguía hablando con ese, también agarrara el celular para reventarlo contra la pared.

Gulf sabía que estaba pasando, le mantuvo la mirada al alfa, y se acerco para darle un casto beso - calma alfa-le susurro suavemente como si intentara calmar un animal salvaje, llevando con lentitud el aparato al oído nuevamente

-Champ dormiste con Mild otra vez?- pregunto y Mew levanto una ceja.

La pregunta tomo desprevenido al alfa quien empezó a tartamudear y decir cosas incoherentes desde la otra línea

VALIENTEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora