Capítulo 39

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—AH... ngh alfa... es muy... profundo... nnh ah!!!

—aguanta... un poco mas amor— pidió el mayor jadeando sobre el omega.

Los dos cuerpo desnudos estaban amándose desesperadamente apretados a la puerta del baño.

Gulf se agarraba con fuerza de los grandes hombros mientras sus piernas se enganchaban de los brazos que los sostenían con una fuerza inquebrantable.

Su espalda se arqueo al máximo y un grito mezclado de gozo y placer fue liberado cuando fue anudado por tercera vez en el día.

Sus garras salieron de la piel dejando otro hilo de sangre, no se había dado cuenta de lo fuerte que clavo en la espalda del alfa, aunque no vea, sabia que lo había dejado lleno de rasguños.

Mew libero un gruñido gutural satisfecho, y se enderezó mirando al omega con una sonrisa complaciente.

— estas bien bebe?—

Gulf respiraba profundamente con la boca entreabierta, y lo miro a los ojos

— tu qué crees? — ironizo con una media sonrisa, con el sudor recorriendo su rostro

Enredo los brazos alrededor del cuello del mayor, el alfa cuidadosamente lo sostuvo mejor y se dirigieron a la jacuzzi, el agua tibia parecía relajarlos automáticamente

El menor se recostó en el pecho del Mew, cerró los ojos y suspiro, se sentía demasiado cansado y parecía que el agua y el cuerpo del alfa le provocaban unas ganas intensas de dormir

Mew acariciaba amorosamente su espalda, como siempre lo hacía, Gulf se lo pedía constantemente, decía que era muy relajante. Esperando el nudo bajar lo más pronto posible para llevarlo a la cama.

Escucho su respiración más tranquila y profunda, noto que se había quedado dormido y sonrió enternecido.

Por fin se tomo el tiempo de mirarlo detenidamente, el aspecto de Gulf había cambiado mucho, supuso que ese era la de su lobo. Al no ser sangre pura no podía transformarse en uno, pero su omega fue forzado como si fuera uno y trajo consigo efectos secundarios.

Acaricio su suave cabello rubio, se mordió los labios reprimiendo otra sonrisa orgullosa mirando sus colmillitos sobresalir la punta afilada, entrelazo los dedos y miro sus garras— que impresionante eres mi hermoso omega— elogio y lo escucho suspirar.

Sabía que se sobrepaso un poco, su precioso omega quedo exhausto.

***

Un gruñido

—Aguanta! Alfa llorón!— reprendió

Otro gruñido

El omega le dio un manotazo en el hombro— no me gruñas!... Que quejumbroso!— refunfuño

—No veo la necesidad de untarme medicina... si en menos de dos horas volverás a arañarme la espalda... ah arde!!!— se quejo con un gruñido y sintió otra vez manotazo y no pudo evitar reír bajo... pero ardía la medicina que el omega le estaba untando en la espalda lastimada que sin querer le hacía volver a gruñir.

—No importa, de este modo te curaras mucho más rápido— dijo aplicando minuciosamente la medicina, se estaba reprendiendo mentalmente de lo descuidado que fue esta vez, lastimo mucho la piel de Mew, aunque no eran heridas profundas había muchas rayas alargadas rojas en toda la espalda y sabiendo que éstas se iban a curar en menos de una hora sentía la culpa y la necesidad de ponerle alguna medicina.

—sabes que los alfas nos curamos rápido— contesto y giro para acercarse peligrosamente al rostro del omega— estamos preparados para soportar los arañazos de nuestro omega— dijo coqueto mirando sus labios— es la prueba de lo bien que se sintió mi omega en mis brazos, la prueba de nuestro intenso momento pasional.

VALIENTEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora