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*Horas después*

*6:00 p.m.*

Narra Wendy

Junto con Ray llegamos al caserío pero ya era casi de noche así que decidió acompañarme a mi casa para que no me pasara nada, a decir verdad hoy fue un gran día además de que me divertí con él, también fue una aventura total habernos perdido en ese bosque.

Aunque la carta que encontramos fue algo que me dejó inquieta ya que mencionaban el amor y la amistad nuevamente así como lo dijo la señora de la tienda hoy en la mañana y realmente eso me está causando miedo, tal vez he guardado el secreto de que Ray me gusta por mucho tiempo pero aún no estoy preparada para decírselo ya que el miedo aún me invade y es algo que me lo impide expresarme hacia él, pero el día de nuestro aniversario no será la excepción, se lo diré y no me importa que pase, lo más importante es que pude decírselo después de haber guardado silencio por mucho tiempo.

Después de unos minutos caminando llegamos a mi casa y los dos nos quedamos mirando la puerta por un momento pero después nos miramos fijamente.

Raymond: bueno, ya estás en casa mi angelito, sana y salva. Dice con una sonrisa.
Wendy: gracias por acompañarme. Sonrío.
Raymond: no tienes porque agradecer, pero ahora entra, porque me imagino que tus padres deben que estar preocupados. Se ríe.- cuídate ¿si?.
Wendy: si Ray, y tú también. Digo feliz.
Raymond: claro que si mi angelito, bueno, nos vemos. Se despide.

Él estaba a punto de irse así que lo detuve tomando su mano delicadamente.

Wendy: Ray, espera. Lo miro.
Raymond: ¿pasa algo?. Dice curioso.

Lo miré feliz por un momento y después saqué un pequeño regalo de mi bolso (imagen en galería) y se lo di.

Raymond: ¿es para mi?. Mira el llavero confundido.
Wendy: obvio que si tontito. Me río.- lo compré hace unos días y me imaginé que te gustaría.
Raymond: oh gracias. Dice feliz.- lo conservare por siempre mi angelito.
Wendy: no hay de que Ray. Sonrío.- bueno, nos vemos.

Me despedí de él dándole un pequeño beso en la mejilla y después entré a mi casa, saludé a toda mi familia que estaba en la sala viendo televisión y después fui a mi habitación para poder descansar.

Llegué y enseguida me fui a recostar a mi cama, estuve pensando en todo lo que pasó hoy hasta que mis ojos no aguantaron más y me quedé profundamente dormida.


El Error De Haberme EnamoradoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora