El Error De Haberme Enamorado

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Narra Wendy

Wendy: ¿se les perdió algo?. Digo seria.
Natti Natasha: vaya forma de recibir a tus visitas ¿no?. Dice sarcásticamente.
Wendy: bueno, si no les gusta como me expreso pueden irse al basurero que está a un par de cuadras, escuché que ahí requieren mucho plástico, tal vez ustedes puedan llenar ese requisito. Digo burlándome.
Samantha: ¿no te parece de cobardes y malas amigas qué nos hables así Wendy?. Hace una mueca en tono de burla.
Anitta: si supieran los padres de estos mocosos engreídos que la directora de esta estúpida academia es una sin vergüenza que abandona a las personas. Dice riendo.
Wendy: a ver brujas del tercer mundo, les voy a pedir que no me falten el respeto porque ustedes y tampoco el sonso de Raymond tienen derecho de venir y juzgarme. Miro a Raymond.- pero claro, si aquí el hombrecito que supuestamente tiene muy bien puestos los pantalones le cuenta a su novia lengua larga y a su tropa de amigas ingenuas que yo soy una mala amiga, mentirosa y sobre todo timadora de primera para quedar así como el santo de la película. Digo molesta.
Samantha: escucha engendro del demonio, ¡te prohíbo que hables así de mi novio!. Me grita molesta.
Wendy: ¡ay! pero si la noviesita sale a defender a su novio, que ternura me das. Me burlo.- ¿no crees qué ya es mucho la hipocresía qué haces al estar con Raymond?, si se nota a simple vista que lo único que quieres es sacarle dinero y así dárselo al cuarteto de muñecas viejas que tienes por amigas. Le hago frente.
Raymond: a ver Wendy yo...
Wendy: y tú ¡bravo!. Aplaudo sarcásticamente.- te ganaste el premio al más estúpido, ¿cómo te atreves a venir a mi academia después de la forma de cómo me trataste?. Cruzo los  brazos.
Raymond: por favor Wendy, ¿crees qué vendría por ti a esta absurda academia?. Rodea los ojos.
Samantha: si es obvio amor, esta niñita lo único que te tiene es envidia, ella quisiera estar en mi lugar pero lamentablemente no es así. Sonríe burlándose.
Wendy: ¿yo tenerles envidia a ustedes?, por favor. Rodeo los ojos.- tengo mi casa, mi auto último modelo y mi academia de música, ¿qué más quisiera tener?. Los miro atentamente.
Samantha: el amor de mi novio. Mira a Ray coqueta.

Ese último comentario fue la gota que derramó el vaso, apreté mis manos molesta y después tomé un tubo de metal que estaba en el suelo y me acerqué a esas estúpidas.

Wendy: miren cabronas, yo no soy su títere y si creen que pueden venir a mi academia a insultarme y burlarse. Las hago alejarse con el tubo.- ¡ESTÁN VERDADERAMENTE EQUIVOCADAS!. Grito molesta.

Hice que salieran de la academia y las dejé afuera mientras cerraba la puerta lentamente y tomaba con fuerza el tubo.

Raymond: ¿cómo te atreves a tratar a mi novia así Wendy?. Dice molesto.
Wendy: ¿qué cómo me atrevo?..., ¡¿QUÉ CÓMO ME ATREVO?!. Me volteo molesta a verlo.- tú pedazo de idiota has cruzado la línea literalmente, le dijiste a la mosca muerta que tienes por novia lo que sentía hacia ti, y ahora cree que yo le tengo envidia por no estar en su lugar, pero sabes que. Dejo caer el tubo.- toma tu estúpido orgullo, tu manera de tratarme horrible y tu cursi amor por esa estúpida y puedes metertelos por el culo cabrón, ya me canse que un poco hombre como tú me trate como una mentirosa y mal amiga. Digo alterada.
Raymond: ¿y qué, acaso no eres eso?, una mentirosa y una mal amiga que me abandonó en nuestro día especial. Dice serio.
Wendy: si tan sólo me dejaras explicarte las cosas entenderías que yo no te abandoné. Lo miro molesta.- pero claro, el niño con aires de grandeza prefiere más a su novia doble cara que a la mujer que fue su mejor amiga.
Raymond: más te vale que no sigas insultando a Samantha porque sino...
Wendy: ¿sino que?, a ver diga señor genio que me hará.
Raymond: es tan sólo una advertencia Wendy porque tus berrinches ya me tienen harto.
Wendy: ¿crees qué te tengo miedo Raymond?. Me río burlándome.- a ver intenta ponerme un dedo encima y ya veras como termina tu carita de modelo, no por nada tomé clases de karate por 4 años así que yo no te tengo miedo y mucho menos le voy a tener miedo al grupo de brujas que son tus amigas y además a la tal Samantha como tu novia.

Iba a sacarlo a golpees de la academia pero en eso varios periodistas, camarógrafos y publicistas entraron de repente y nos rodearon mientras nos hacían preguntas.